La vía judicial no es, ni debe ser, la única alternativa para resolver las disputas entre dos partes. Desde hace un tiempo, la mediación y la figura del mediador ha cobrado fuerza como una manera de garantizar el principio de tutela judicial efectiva. La posibilidad de optar por un proceso más rápido, más diligente y con valor contractual hace que cada vez más personas y empresas recurran a esta alternativa.
Conscientes de la necesidad de contar con profesionales formados en la resolución de conflictos, la empresa Mediación Navarra y el Club de Marketing lanzaron en octubre el primer curso de Experto en Mediación Civil y Mercantil. Ayer, tras siete meses de trabajo, 25 sesiones y 100 horas lectivas, una quincena de alumnos recogió sus diplomas que les habilitan para el ejercicio de la profesión de mediador y su inscripción en el Registro de Mediadores del Ministerio de Justicia.
Lo hicieron, además, en una jornada que contó con la presencia de la directora general de Justicia, Lourdes Aldave; Rafael Ruiz de la Cuesta, magistrado del Juzgado de Primera Instancia nº5; y Margarita Pérez Salazar, magistrada del juzgado de violencia sobre la mujer nº1, ambos de Pamplona.
El Ministerio ha creado un Registro de Mediadores e Instituciones de Mediación, en el que constan las personas y empresas capacitadas para esta labor
“Es muy satisfactorio ver la acogida que ha tenido esta iniciativa. Se trata de un curso novedoso, presencial, y en el que los docentes somos profesionales del sector con experiencia en mediación”, resalta Elena Sarasa Villaverde, abogada y socia de Mediación Navarra.
Junto con sus socias Amaya Sanz Oricáin y Maite Ruiz Aquerreta, abogada y psicóloga respectivamente, diseñaron la estructura del curso y los contenidos, al tiempo que seleccionaron los ponentes. “Queríamos combinar la enseñanza teórica con la práctica. Todo con el objetivo de dotar a los alumnos de los conocimientos y habilidades necesarias para ejercer esta profesión. La idea es que, ante el desarrollo que está teniendo la mediación en el ámbito civil y mercantil, existan profesionales formados de manera presencial y por profesores que sean, además de buenos docentes, reconocidos profesionales en el campo de la mediación”, añade.
NUEVAS NECESIDADES, NUEVOS MÉTODOS
No cabe duda de que los tiempos han cambiado. Y con ellos han aparecido conflictos nuevos y también nuevas formas de resolverlos, distintas a las de épocas anteriores. “Actualmente la sociedad tiene nuevas necesidades, por lo que se están desarrollando nuevos métodos de solución de conflictos” más allá de la vía judicial, incide Elena Sarasa. Y la figura del mediador es fundamental; un mediador formado, con reconocimiento por parte de la Administración y sujeto a una legislación. De hecho, el Ministerio de Justicia cuenta con un Registro de Mediadores e Instituciones de Mediación público, en el que figuran aquellos que cumplen los requisitos para desarrollar esta labor con garantías.
Un total de trece personas han realizado el curso completo, a las que se añadieron varias más en módulos concretos
Pero, ¿qué hace un mediador? El objetivo de este profesional es escuchar a las partes y atender sus necesidades, más allá de las posiciones que manifiesten. Y, para ello, el primer paso es, aclaran desde Mediación Navarra, analizar el conflicto. Con ese análisis previo es cuando se puede comenzar a diseñar una estrategia para su resolución, la más adecuada en cada caso. “Tenemos que lograr que las partes se comuniquen y pasen de posiciones a intereses; que observen el conflicto desde diferentes perspectivas, que piensen de una manera diferente a como lo han hecho hasta ese momento, generando nuevas opciones de solución”. 
La clave del éxito de la mediación en los últimos años es que el acuerdo que alcanzan las partes tiene “la misma validez que un contrato”, argumentan desde Mediación Navarra. “Si, además, lo elevan a escritura pública, este acuerdo tendrá fuerza ejecutiva y se podrá interponer una demanda ejecutiva ante la falta de cumplimiento”. El proceso de mediación puede iniciarse también cuando existe un proceso judicial. De hecho, según apunta Elena Sarasa, la mediación intrajudicial está ganando terreno: “Cada vez va a ser más frecuente que los jueces, antes de entrar a conocer una demanda, deriven el asunto a mediación”. En ese caso, si hay acuerdo, las partes pueden solicitar al tribunal “la homologación del acuerdo con lo dispuesto en la Ley de Enjuiciamiento Civil”, añade.
PREPARANDO LA NUEVA EDICIÓN
El éxito de este primer curso de experto, que se podía realizar de forma íntegra o por módulos, ha llevado a Mediación Navarra y al Club de Marketing a comenzar a trabajar ya en la segunda edición, que arrancará el próximo octubre. La empresa de economía social Mediación Navarra apuesta por seguir formando a profesionales en esta materia y a potenciar el uso de la mediación por parte de la sociedad. “Es una manera rápida, ágil y eficaz de solucionar las disputas de forma satisfactoria para todas las partes”, incide Amaya Sanz.
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