La inflación en Navarra ha escalado durante los últimos ocho meses hasta situarse el pasado noviembre en el 5,7 % con respecto a 2020. Así mismo, los precios crecieron un 0,6 % más que en el mes pasado. Según valoró la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Servicios de Navarra, esta subida «se ha moderado en comparación a la experimentada en octubre, el mes en el que más aumentaron los precios».
La presión inflacionaria provocó un aumento de los costes salariales, que ahora se suma al de los costes energéticos y de materias primas, valoraron desde Cámara Navarra.
Los grupos que siguen motivando esta subida de los costes son la vivienda (19,8 %) y el transporte (13,2 %). Incrementaron también con respecto al mismo mes del año anterior los precios de la alimentación y las bebidas no alcohólicas (3,4 %), el menaje (2,4 %) y las actividades de ocio y cultura (2,2 %). El incremento de los precios no incide, por tanto, solamente en grupos ligados al aumento del precio de la electricidad y los costes energéticos. Se percibe también en el incremento de la inflación subyacente en la segunda mitad del año hasta situarse en el 1,6 % anual el pasado noviembre.
A juicio de Cámara Navarra, la presión inflacionaria se mantendrá en los próximos meses, «lastrando la capacidad de recuperación de la economía navarra por su incidencia tanto en la oferta como en la demanda». En primer lugar, el aumento de los costes salariales se suma ahora al de los costes de la energía y las materias primas. En segundo término, el incremento de los precios puede incidir en el consumo, «especialmente en el primer trimestre del año, pasado el efecto de la campaña navideña».
