El consejero de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra, Bernardo Ciriza, abogó este jueves por “allanar entre todos el camino para seguir avanzando en la movilidad de las personas y la circulación de las mercancías” y defendió “seguir apostando por un mundo más interconectado, a través de una movilidad más sostenible y eficiente”. Además, expresó su apuesta por el tren de altas prestaciones (TAP), así como por la mejora de los servicios ferroviarios de media distancia.
En respuesta a una interpelación de Navarra Suma durante el pleno de control, Ciriza reivindicó que la Comunidad foral “debe invertir en un transporte público de calidad” y destacó que el Plan Integral del Transporte de Viajeros (PITNA). Respecto a este, indicó que “la renovación de las concesiones es una oportunidad para reordenar los servicios de transporte público”. Según especificó, actualmente se está prestando en torno al 70 % del transporte interurbano y el Gobierno ya ha destinado 1,4 millones para “compensar el déficit incurrido en el sector” por la pandemia.
En la terminal de Noáin, además, se prevé realizar una inversión para transportar productos frigoríficos o que estos puedan ser llevados a temperaturas controladas, “algo muy importante para Navarra”.
Sobre el transporte urbano en la Comarca de Pamplona, al que se ha otorgado un millón de euros por el momento, el consejero detalló que el 100 % de los servicios permanece operativo desde el 1 de septiembre. Y respecto al sector del taxi, concretó que Navarra cuenta 440 taxis y 94 licencias de VTC, de las cuales 37 no se encuentran activas.
Uno de los objetivos a futuro pasa por “incrementar la cuota de transporte ferroviario de mercancías, en consonancia con las políticas de la Unión Europea”. Y en este punto, anunció que el Ejecutivo ha retomado los contactos con Adif “para el desarrollo conjunto del nodo intermodal de Pamplona, formado por el centro logístico de Noáin y la ciudad de transporte de Pamplona, así como un nodo intermodal en Tudela-Castejón”. En la terminal de Noáin, además, se prevé realizar próximamente una inversión para poder transportar productos frigoríficos o que estos puedan ser llevados a temperaturas controladas, “algo muy importante para Navarra”.
REACCIONES DE LOS GRUPOS
Ahora bien, Javier García (Navarra Suma) acusó al Gobierno de “no estar actuando ni haciendo nada para mejorar la eficiencia” de los transportes en la Comunidad foral. Así, defendió la alta velocidad para Navarra; pidió mejoras en el transporte interurbano, aéreo o ferroviario; y preguntó al consejero “qué va a pasar con la tarjeta de transporte”.
Jorge Aguirre (PSN) consideró que la actual situación de Navarra respecto al transporte interurbano o ferroviario se “deriva de la inacción de los Gobiernos de UPN”. En este sentido, defendió el trabajo que está realizando el Ejecutivo foral en todos estos ámbitos y, sobre el TAP, señaló que “quienes pretendan confrontar tren regional versus tren de altas prestaciones están haciendo una pelea ficticia”.
Así mismo, Pablo Azcona (Geroa Bai) también ensalzó la importancia del PITNA ya que, según dijo, “va a dar solución a medio centenar de municipios de Navarra que, en estos momentos, no están recibiendo ningún servicio público de transporte ni de movilidad”. Además, planteó “la necesidad de un servicio de trenes que dé servicio a la media distancia y saque las mercancías de las carreteras”.
Maiorga Ramírez (EH Bildu), por su parte, se preguntó por qué “si el TAV es tan imprescindible, los Gobiernos del PSOE y el PP no lo han puesto ya en marcha”. En su opinión, “los argumentos en los que se sustentan” para defender este proyecto “son falsos”, ya que “no es necesario para Navarra”.
Ainhoa Aznárez (Podemos-Ahal Dugu) apostó por “acompasar los servicios públicos con los recursos naturales, con el fin de situarnos en ese marco de movilidad sostenible”. Y respecto al TAV, pidió un tren que “conecte el territorio” para que no se repitan “situaciones que ya vivimos con aeropuertos o trenes sin viajeros”.
Finalmente, Marisa de Simón (Izquierda-Ezkerra) defendió una movilidad “sostenible” y volvió a expresar su oposición al tren de alta velocidad, “una inversión totalmente ruinosa que no sirve para nada”. En esta línea, consideró que este proyecto es “insostenible” desde el punto de vista económico, medioambiental y social.