Code Matrix es el ejemplo de que emprender no resulta siempre tan rápido como uno quisiera, pero que con esfuerzo es posible llegar a la meta. La empresa de informática echó a andar en 2016 en Tudela. Sus objetivos eran ambiciosos y la energía de sus integrantes, infinita. Se marcaron como meta hacer la competencia ni más ni menos que a Microsoft y a MacOS desarrollando un nuevo sistema operativo libre, gratuito, sencillo y rápido. La idea, desde luego, era atractiva. Pero los medios económicos para llevarla a cabo no siempre fueron suficientes.
Integrada en la actualidad por los navarros Alejandro Cordero Vicaria, Adrián León Salvatierra, Cristian Dos Santos y Santiago Sáinz Caparroso, y por Alberto Del Ruste, de Zaragoza, Code Matrix pretendía sufragar mediante crowdfunding el desarrollo y lanzamiento de su propio sistema operativo, bautizado como CMOS. “Confiábamos en recaudar suficientes fondos como para contratar a quince personas y poder lanzarlo en enero de 2017, pero el crowdfunding falló y hemos tenido que realizarlo con medios propios”, explica Santiago Sáinz, CEO de Code Matrix. Los cinco jóvenes emprendedores se pusieron manos a la obra y contactaron con un sinfín de entidades y expertos para colaborar en el desarrollo del sistema operativo, como Linux Fundation. “Gracias a eso tenemos una red de colaboradores bastante grande”, añade.
Despacio pero sin pausa, compaginando esta tarea con otros servicios de seguridad informática con los que financiar el trabajo, estos jóvenes informáticos han logrado su objetivo. “En mayo de este año terminamos el desarrollo y, tras unas semanas de prueba, lo lanzamos en julio”, confiesa orgulloso Sáinz.
Ordenador diseñado por Code Matrix.
LIBRE PREVIA AUTORIZACIÓN
La labor informática tras el desarrollo de CMOS se ha topado, sin embargo, con las restricciones y cautelas legales, que no han hecho viable que la descarga del sistema operativo sea pública para cualquier persona en cualquier momento. “Ello permitiría ver el código de seguridad que hemos desarrollado y podría usarse y modificarse para otros fines, por lo que hemos optado por ofrecer el sistema operativo de forma gratuita pero previa autorización para descargarlo. Eso ralentiza un poco las descargas, pero garantiza una seguridad más estable”, explica el CEO de Code Matrix.
Otra de las vías que han previsto para generalizar el uso de CMOS es vender ordenadores con este sistema operativo ya instalado, tanto portátiles como ordenadores de mesa. “Queremos llegar a cien unidades vendidas antes de fin de año y, para eso, estamos en conversaciones con grandes superficies y con pequeños comercios de informática”, confiesa, al tiempo que reconoce que la propuesta ha levantado cierto interés entre los usuarios.
Las ventajas de CMOS frente al resto de sistemas operativos son varias, según sus desarrolladores. Además de ser gratuito, es mucho más rápido, hasta el punto de encenderlo y apagarlo en apenas unos segundos. “Ésa es una de las cosas que más nos demandan, sobre todo, los profesores de informática, que ven cómo su hora de clase se pierde mientras se encienden todos los ordenadores del aula. Por eso, nuestro objetivo, además del usuario particular, son los colegios. Creemos que podemos serles muy útiles”, añade Santiago Sáinz. Pero, además de la rapidez, CMOS “está en constante actualización” y no tiene ningún tipo de obsolescencia programada, de forma que sigue manteniendo la rapidez con el paso de los años. A ello se suma la seguridad, de la mano de Linux, y las más de 80.000 aplicaciones instalables, al margen de las que trae ya preinstaladas, como Libre Office, Firefox, Skype o Spotify.
ESFUERZO DE PREMIO
Su apuesta emprendedora les ha valido varios reconocimientos. Así, en 2016 Navarra Televisión les entregó el Premio Valor Joven, por el desarrollo de este innovador sistema operativo propio. Y, en las pasadas fiestas de Tudela, recibieron el ‘Quiosco de oro’, galardón que premia las iniciativas de la gente joven de esta localidad navarra.
Pero los premios no les desvían de sus objetivos. Por eso siguen trabajando no sólo en CMOS sino también en la otra faceta de su empresa, prestando servicios de seguridad informática sobre todo a entidades públicas de Navarra. Entre sus próximos retos: extenderse a Zaragoza.
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