El vino siempre ha estado entre el arte y la gastronomía, es uno de las bebidas que más ha cuidado su imagen y estética, y paladearlo va más allá de la sed; es un placer. Y entre ellos, es el momento del rosado. Bodegas Emina presentó en la Feria Madrid Fusión sus nuevas joyas vinícolas: su línea Emina Rosé.
El equipo de enólogos de la bodega ha trabajado durante el último año para elaborar una gama de rosados diferentes, “más originales, frescos y sutiles”, acordes con “la elegancia y personalidad” de los rosados provenzales y que pudieran sorprender a los consumidores, en palabras del presidente de la bodega, Carlos Moro.
A la hora de apreciar este vino por otros sentidos además del gusto, se puede ver que el color de estos rosados es de un delicado tono rosa fresa suave con reflejos azulados, limpio y brillante. En la nariz, muestra inequívocas frutas de hueso, como el melocotón, así como leves toques de zarzamora entre tonos minerales y de flor blanca.
La gama se completa con Emina Rosé Prestigio que llama la atención a primera vista por la estética femenina de su botella, tan atractiva como su interior. Su aspecto diferencial está en las distintas variedades de uva, tanto blancas como tintas, que aportan sus tonos y características propias y provienen de viñedos antiguos de más de 70 años.
Este vino presenta un precioso color picota de baja intensidad con bordes amoratados y brillante, con aromas de frutas del bosque, como grosella o zarzamora, así como matices herbáceos y balsámicos de tomillo y suave lavanda, con sutiles tonos minerales. Esta botella ofrece un cuidado especial del vino y del diseño para hacer la experiencia aún más especial.
Con esta nueva gama de vinos, Bodegas Emina se decanta por un perfil más femenino, las “auténticas amantes de los vinos rosados”. Brindemos por quienes ven la vida color rosé.