El índice Liner Shipping Connectivity señala que España acaba de desbancar a Japón como el sexto país del mundo mejor conectado a nivel marítimo, solo por detrás de China, Corea del Sur, Singapur, Malasia y Estados Unidos. ¿Una de las causas? La crisis del mar Rojo ha afectado principalmente a puertos del este del Mediterráneo como Grecia o Egipto, con significativas disminuciones de tráfico. En el Mediterráneo Occidental, puertos como el de Barcelona han incrementado su actividad al utilizarse como hub para cubrir ese tránsito.
En este contexto, la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Servicios de Navarra acogió este miércoles una jornada que permitió conocer las previsiones del comercio marítimo internacional, esbozar la situación de la Comunidad foral y profundizar en la relación actual entre el Port de Barcelona y Navarra.
La apertura del evento corrió a cargo de Ana Cañada, responsable de Comercio Internacional en la Cámara Navarra. «(El comercio internacional) está cada vez influenciado por la situación geopolítica. Los ataques de piratas hutíes en el mar Rojo representan una problemática grave porque afectan a canales estratégicos y provocan un aumento de tarifas, seguros o mercancías, además de que ponen en riesgo la vida de muchas personas», alertó. Sin ir más lejos, las autoridades marítimas reportaron el pasado junio el hundimiento del carguero MV Tutor. Fue víctima de un ataque con un «bote suicida», teledirigido y cargado de explosivos. El atentado provocó el hundimiento del carguero, de propiedad griega pero con bandera de Liberia.
Se trata de un «panorama complejo» que también ha provocado un aumento del tráfico en los puertos de todo el mundo. Tanto es así que la mitad de los buques no llegaron a su destino a tiempo, y de media se demoraron seis días. Cañada también hizo hincapié en la situación del canal de Panamá. «Habitualmente está en boca del nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, porque es una vía clave. Por allí circula un 5 % del comercio mundial entre petróleo, carbón, metales, contenedores y personas. Es un canal interesante por sus tasas económicas (desde 40.000 a 450.000 euros, dependiendo del barco y la mercancía), y parece que Trump lo quiere reclamar para que todos contribuyamos a sus impuestos», señaló la responsable de Comercio Internacional de la entidad.
Luis Puzo: «Navarra tiene mucha cultura de exportación a países fuera de la Unión Europea»
En segundo lugar tomó la palabra Luis Puzo, representante en Aragón, Navarra, La Rioja y Castilla y León del Port de Barcelona. «Hace unos años parecía que los juguetes no iban a llegar a tiempo por Navidad por la falta de contenedores. Luego llegó la pandemia, la guerra de Ucrania, el conflicto en el canal de Suez… No tenemos una bola de cristal para solucionar todos estos problemas, pero sí podemos aportar información para ayudar en la toma de decisiones empresariales», precisó.
También destacó el dinamismo de la empresa navarra a pesar de la incertidumbre geopolítica. «Barcelona es el puerto natural para las compañías navarras por su conexión ferroviaria. Navarra tiene mucha cultura de exportación a terceros países fuera de la Unión Europea. Y aunque Aragón haya despuntado en algunos sectores, la tradición empresarial navarra siempre se ha mostrado dispuesta a abrirse a nuevos mercados. Cuando una compañía se internacionaliza fuera de Europa, está menos expuesta a una supuesta crisis a nivel europeo», destacó en declaraciones a Navarra Capital.
NAVARRA Y EL PORT DE BARCELONA
La jornada continuó con un análisis del comercio marítimo mundial a cargo de Eduard Moyà, product manager container division del Port de Barcelona, y de Olga Salvador, responsable de clientes y tráfico refrigerado en la entidad. Salvador resaltó que los expertos han identificado nuevos riesgos económicos y comerciales, como huelgas en puertos de India y Estados Unidos, el posible aumento de aranceles en este país, disrupciones climáticas como la sequía que afectó al canal de Panamá o la incertidumbre sobre el retorno a las rutas normales del Canal de Suez en algún punto de este 2025. «Si no hay nuevas disrupciones, anticipan un descenso gradual de las tarifas marítimas este mismo año, y uno más marcado en 2026», pronosticó.
Eduard Moyà: «Barcelona es el puerto más utilizado por Navarra (33 %), seguido de Bilbao (23 %) y Valencia (20 %)»
Por su parte, Moyà apostilló que, a falta de los datos sobre noviembre y diciembre, 2024 fue un año récord para el puerto catalán en volumen de contenedores, batiendo los números de 2021.
«Tenemos buenas noticias respecto a la carga local, que tiene que ver con lo que sale y entra del puerto. Hemos aumentado un 6 % respecto a 2023. Las importaciones han subido un 9 %, y las exportaciones un 5 %», desglosó para matizar acto seguido que las empresas navarras también son responsables de ese crecimiento.
En concreto, el 27,2 % del comercio exterior navarro sale por vía marítima, mientras que el 72,4 % es por carretera. El 0,4 % se mueve por aire y ferrocarril. «Francia es vuestro principal socio, pero también hay mucho volumen con Portugal y Reino Unido. Barcelona es el puerto más utilizado por Navarra para importaciones y exportaciones con un 33 % de la actividad. A continuación se encuentra Bilbao (23 %) y, en tercer lugar, Valencia (20 %)», enumeró Moyà.
También afirmó que el pasado 2024 fue un muy buen año en cuanto al número de toneladas canalizadas. «Con respecto a 2023, el aumento fue de 27.000 tras pasar de 269.000 a 297.000. Estamos rozando ya las 300.000 toneladas entre Navarra y el Port de Barcelona», incidió.
Además, los productos más exportados fueron alimentarios, para la construcción y la automoción. «En importaciones destacan la propia alimentación, la metalurgia y los bienes de equipo. Hemos observado un aumento en las exportaciones de materiales de construcción, vinos, productos de panadería y aceites de girasol», desgranó Moyà. En paralelo, los incrementos en las importaciones se centraron en los minerales y la metalurgia, concretamente en el alambre de aluminio y los componentes de vehículos.
Salvador fue la encargada de poner el broche final al evento tras anunciar que el Port de Barcelona construirá próximamente siete nuevos bloques en la terminal Best, que utiliza la mayoría de las empresas navarras. «Se incorporarán catorce nuevas grúas automatizadas, eléctricas y movidas por raíles, y la capacidad de almacenaje aumentará un 25 %», avanzó.