Aún recuerda aquella instantánea del expresidente José María Aznar jugando un partido de pádel con Carlos Sainz en la década de los noventa. La ha visto varias veces, aunque por aquel entonces, Víctor García, marcillés de 33 años, apenas daba sus primeros pasos en la vida. Su pasión por esta disciplina no empezó a forjarse hasta 2012, cuando se sentaba ante el televisor con su hermano, Miguel, para ver los partidos del World Padel Tour. Hoy es profesor de este deporte y acaba de poner en marcha VG Pádel, un método de aprendizaje pionero en Navarra.
En concreto, se dirige a aquellas personas que, por sus complicados horarios, no pueden acudir a las escuelas de pádel tradicionales. Tras definir el nivel de juego del alumno, Víctor analiza sus áreas de mejora y, a través de vídeos, profundiza en el saque, el servicio, el revés, la estrategia en pista… En declaraciones a Capital Sport, apunta que adaptó esta idea de Paloma Lázaro, una entrenadora gallega que publica contenido en Instagram con consejos sobre cómo moverse en la cancha, claves para conseguir puntos y recomendaciones para no cometer errores.
“Hay quienes pretenden mejorar a un ritmo excesivo sin asentar antes las bases, pero también quienes saben que aprender a jugar bien requiere de práctica”, precisa para añadir acto seguido que la mayoría de sus pupilos se acercan al pádel principalmente para hacer ejercicio: “Corres menos que en otros deportes, pero sudas igualmente”.
PAREJA CON SAKANA PADEL
En sus redes sociales, el joven navarro combina consejos sobre aspectos técnicos del juego con otros más relacionados con su vertiente mental como la concentración, cómo sobreponerse a contextos adversos o cómo controlar las emociones durante un partido. “Debes aprender a gestionar situaciones complicadas, como cuando te enfrentas a un rival que celebra los tantos como si le fuera la vida en ello, o como cuando empiezas fallando muchos puntos. Si no te sobrepones a esos errores, la frustración te sacará del partido”, asegura rotundo.
Precisamente, se trata de una filosofía que comparte con Jon Echaide, uno de los socios fundadores de Sakana Padel, que también trabaja para fomentar el mentoring deportivo. Esa visión común llevó al profesor marcillés a iniciar una colaboración con el centro de Arbizu, que se gestó tras leer el reportaje publicado por Capital Sport en 2022 sobre la inauguración de estas instalaciones indoor.
Fue entonces cuando Víctor contactó con Joseba Alzueta, el otro fundador de la empresa sakanesa. Conectaron de tal manera que Echaide y Alzueta le encargaron la gestión de las clases, los torneos y los cursos intensivos. Así, desde el pasado mes de octubre, el joven ribero imparte las clases en Sakana Padel los viernes, aunque también ejerce los jueves en el Centro Deportivo Mendikur de Orkoien y los martes en el polideportivo de Berriozar.
Él y su hermano fueron los principales promotores de que se instalara una pista en Marcilla con la ayuda de Raúl Campeán, actual presidente del club de pádel de la localidad. Allí fue donde trazó su primeras voleas e, incluso, organizó el ‘Campus de la Raqueta’ junto a Alejandro Capitani, exjugador y actual entrenador argentino de pádel en el centro Mundo Capitani de Mutilva.
Poco a poco, fue haciéndose un nombre en distintas instalaciones de la Comunidad foral como Pádel Reyno de Navarra, en Beriáin, (antes Entrena Pádel). Sin embargo, un desafortunado revés le pilló a contrapié. En 2016, sufrió una fisura en el manguito rotador del brazo derecho mientras entrenaba en Marcilla, que le mantuvo apartado de las pistas ocho meses.
Aunque era un punto de break difícil de salvar, salió reforzado. Volvió a entrenar y a ganarse un hueco de nuevo entre los profesores de pádel navarros. Ahora, a través de una pista digital, busca mejorar aún más su servicio.