La comunidad científica española está compuesta por un 49,3 % de mujeres, 8,3 puntos por encima de la media europea (41 %) según los últimos datos de Eurostat. Una cifra que asciende al 53,2 % en Navarra, País Vasco y Aragón, las regiones con la mayor proporción de mujeres científicas.
Al mismo tiempo, las matriculaciones en los centros educativos de la Comunidad foral también dan señales de un cambio de tendencia. En el curso 2016/2017, un total de 5.710 alumnas cursaban Bachillerato Científico en institutos navarros o carreras ligadas al mundo STEM en la Universidad Pública de Navarra (UPNA) y en la Universidad de Navarra. Este curso, la cifra -al alza de forma permanente ejercicio tras ejercicio- fue de 6.355. Es decir, un 11,3 % más. Sin embargo, el Ministerio de Educación y Formación Profesional advierte de que el porcentaje de mujeres que cursan grados científicos todavía no alcanza el 30 % en las universidades españolas. Incluso en Informática, por ejemplo, apenas representan el 12,9 %; y en carreras de ingeniería, industria y construcción, el 28,5 %. La brecha, por tanto, es evidente, igual que la menor presencia femenina en los ámbitos de decisión de este sector.
Lola Urrutia (SNE-NL): “El campo de las STEM está muy masculinizado y necesitado de mujeres que estén luchando por posicionarse”.
Conscientes de la necesidad de potenciar el liderazgo femenino en este campo, el Servicio Navarro de Empleo-Nafar Lansare (SNE-NL) ha puesto en marcha una iniciativa que pretende servir para reconocer los logros obtenidos hasta ahora y acelere, al mismo tiempo, los avances que están por llegar. Se trata de ‘Lidera en femenino-STEM’, un ciclo formativo enmarcado en el Programa Lidera y materializado en colaboración con la Asociación de la Industria Navarra (AIN). El objetivo: promover el ascenso laboral de las mujeres STEM y resaltar el talento femenino.
Tal y como relata la jefa de Desarrollo e Innovación de Programas y Promoción Sectorial del SNE-NL, Lola Urrutia, el proyecto surgió después de confirmar que las mujeres “son mayoría en las universidades, presentan buenos niveles académicos y su participación mejora los resultados empresariales”, pero aún “no alcanzan el 8 % en el ámbito de la alta dirección y solo tienen una presencia de en torno al 25 % en direcciones funcionales”.
El ciclo se integra dentro de una ambiciosa oferta de formación no formal y pone el foco en las “protagonistas” de un nuevo paradigma empresarial, donde la innovación y la diversidad cada vez cobran mayor importancia. Bautizada en esta ocasión como ‘Lidera en femenino-STEM’, la tercera edición de esta iniciativa quiere incidir específicamente en una rama “muy masculinizada y necesitada de mujeres que están luchando por posicionarse”.
Precisamente, esa reivindicación es la que les empuja a “premiar a las pioneras que apostaron en su día por las carreras STEM y, en la actualidad, ocupan puestos de liderazgo en sus organizaciones”. Así lo destaca Eva Pardo, integrante del Departamento de Formación y Desarrollo de AIN y responsable del proyecto. Entre las metas a conquistar, la entidad resalta la necesidad de “visibilizar casos de éxito” capitaneados por mujeres líderes y de “impulsar perfiles de alta demanda a futuro, como son las profesiones relacionadas con la tecnología”.
Eva Pardo (AIN): “Esta iniciativa busca visibilizar casos de éxito e impulsar perfiles de alta demanda a futuro”.
Compuesto por cuatro sesiones de capacitación y tres de mentoría, que se celebran entre el 4 y el 25 de mayo, el ciclo aspira a convertirse en un punto de encuentro que una a “agentes del cambio” en torno a la adquisición de las soft skills o habilidades blandas, estrechamente vinculadas a la inteligencia emocional. ‘Lidera en femenino-STEM’ ofrece una formación a la carta, basada en la demanda y las necesidades manifestadas por las diecisiete participantes de esta edición, procedentes de empresas y entidades como Acciona, Volkswagen, Nordex, Siemens Gamesa, 3P Biopharmaceuticals, Tracasa, Naitec, Tasubinsa, NEM (Grupo Inerzia), Avanvida, CyC, Dinabi, MyA Ingeniería, CENER, Arsan, Anteral y la propia AIN.
A todas ellas -vinculadas a los sectores de la automoción, farmacéutica, energías renovables, metalurgia, telecomunicaciones, eficiencia energética y psicología- se les sometió a un cuestionario durante el proceso de preselección. “Partiendo de sus respuestas, identificamos cuatro competencias que ellas consideraron como las más interesantes o necesarias”, precisa Marian Salaverria, una de las tres instructoras.
Para esta psicóloga especialista en Gestión de Recursos Humanos, las inquietudes expresadas a partir de estas encuestas están estrechamente relacionadas con los atributos que los expertos han asignado al liderazgo femenino: “Es un estilo de dirección colaborativo y cooperativo, basado en la escucha, en la empatía y en estructuras jerárquicas que son más horizontales. Está muy orientado a las personas y compagina el pensamiento racional con el emocional”. Las dos sesiones ofrecidas por Salaverria versan sobre la teoría situacional -un modelo que propone variar la forma de dirigir en función de las características concretas de cada subordinado- y la gestión de las emociones.
Ana Apesteguia, por otro lado, es la encargada de conducir las sesiones sobre habilidades de comunicación y manejo de conflictos. Ingeniera agrónoma de profesión, en 2012 dio un giro a su carrera y se especializó en gestión del talento y preparación para emprendedores. En el marco de ‘Lidera en femenino-STEM’, la formación que imparte se basa en el refuerzo de competencias comunicativas, en el manejo de conflictos “desde una posición de asertividad”, en técnicas para reconocer los logros de la plantilla, emitir y recibir críticas y ofrecer feedback a compañeros de trabajo.
Adicionalmente, proporciona técnicas para desdramatizar situaciones típicas en cualquier ambiente laboral. “Al hablar de conflicto solemos otorgarle una connotación negativa, cuando en realidad las opiniones diferentes pueden generar soluciones creativas. Al mismo tiempo, a veces pasamos de largo ciertas cosas que deberían ponerse sobre la mesa por miedo a que sienten mal o por dar una opinión contraria a la de la mayoría”, defiende.
Tras la clausura del programa, el SNE-NL editará un vídeo con la intención de despertar las vocaciones STEM entre las más jóvenes.
El último de los aspectos sobre los que pivota la iniciativa encabezada por el SNE-NL y AIN es el ‘coaching’, una práctica que se basa en la identificación de aspectos de mejora concretos, en la creación de un plan de acción para superar ese reto y en el establecimiento de un sistema de evaluación que permita evaluar el progreso alcanzado.
En este caso, la facilitadora es Jesusa García, licenciada en Psicología y miembro de la Asociación de Coaching Ejecutivo y Organizativo (AECOP). “Al ser un ‘coaching’ grupal, la idea es que cada una trabaje el propósito que quiera, pero que el aprendizaje sea compartido. Como formadora, mi intención también es enseñarles la metodología, darles un meta aprendizaje para que ellas puedan repetir el proceso en otras ocasiones”, apostilla esta especialista.
Las veintidós horas de formación se rematarán con un encuentro final que se celebrará el jueves 3 de junio, donde las candidatas resumirán su trayectoria profesional, explicarán por qué decidieron participar en el proyecto y enviarán un mensaje especial a las estudiantes interesadas por la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas. La jornada será grabada y editada por el SNE-NL para su posterior difusión, con una finalidad específica: fomentar el talento y despertar las vocaciones STEM entre las más jóvenes.