Las ballenas francas tienen una naturaleza dócil. Sus comportamientos lentos en la superficie, sus tendencias para mantenerse cerca de la costa y su alto contenido de grasa hacen que sea presa fácil para los humanos desde tiempos muy antiguos. De hecho, los altos rendimientos de aceite que los balleneros obtenían de ellas las hacían un objetivo muy apetecible en la costa vasca.
Quizá por ello, estos animales fascinan al hondarribiarra Mikel Larramendi, quien es reclutado con 27 años como parte de una expedición científica que partirá de Terranova hasta el Ártico canadiense. El objetivo de esa travesía es estudiar la influencia del deshielo en el desplazamiento de poblaciones de las ballenas orcas que, en contraposición con las ballenas de los vascos, atacan a otros mamíferos acuáticos de la zona a la que antes no tenían acceso. Y él, que se había doctorado en el estudio de cetáceos, no tarda en embarcarse en un viaje para abandonar el pueblo del que tanto reniega. 
Pero la vida de Mikel a bordo del barco, el Own True North, es muy dura. Sus sensaciones y vivencias se intensifican al mismo tiempo que la soledad se convierte en un lujo imposible. Sin posibilidad de escapar, se refugia en sus propios pensamientos. Esa introspección lo sitúa bajo su propio examen y, a medida que avanza la exploración de una zona tan remota y desconocida para él, tendrá que enfrentarse a lo que siempre ha escondido en las profundidades de sí mismo.
Esta es la premisa de Siempre el norte, la nueva novela del escritor Pablo González. Publicada en vísperas del Día Internacional del Orgullo LGBTI, esta historia poliédrica irrumpe en temas que van más allá de la homosexualidad oculta del protagonista. “Estamos ante una novela de viajes y aventuras que encierra un mensaje más profundo, una lucha interna por intentar cumplir con lo que se espera del protagonista, a la vez que trata de encajar en la sociedad tras descubrir su nueva realidad”, valoró el autor.
Se trata de un conflicto interno en el que las cuestiones relativas a la aceptación de sí mismo se entremezclan con una rebeldía ante la tradición pesquera familiar, en favor de una forma de vida más ecológica. De hecho, destaca sobremanera la labor de documentación llevada a cabo por el autor con respecto a los aspectos científicos de la expedición.
“Las primeras sinopsis las trabajé en 2013. He reposado mucho la historia para poder enriquecerla con mis investigaciones. Me puse en contacto con asociaciones canadienses que trabajan con cetáceos, así como con psicólogos especializados en el colectivo LGTBI. Es una lectura muy de verano, porque va de viajes a lugares remotos, pero sin olvidar los grandes temas”, explicó González.
EL AUTOR
Nacido en 1973 en Durango (Vizcaya), González se crio en Salamanca. Pero vive desde hace casi dos décadas en Pamplona, donde trabaja para la administración en el Gobierno de Navarra. Entusiasmado de la lectura desde muy pequeño, empezó a crear sus propias historias, integrando también en ellas su interés por los viajes a lugares muy distintos.
En 2017 publicó su primera novela, Treinta, que se sitúa en el Dublín actual, a la que siguió en 2018 Al otro lado, emplazada en el Berlín de los años del muro. Con su tercera novela, Trece, comenzó en 2019 una saga fantástica ambientada en la época actual y aderezada con dosis de ecología y medio ambiente, otras de sus grandes pasiones.
LA EDITORIAL
La Calle es la primera editorial andaluza que impulsa publicaciones con un carácter LGTBI. Está abierta a nuevas ideas y nuevas voces, por lo que mantienen la recepción de manuscritos y propuestas editoriales abierta, para que puedas contactar con nosotros siempre que así lo desees.
