Florette ha reducido en un 15 % el plástico empleado en los envases de la mayoría de sus ensaladas listas para consumir en bolsa. Es un logro que, según un comunicado emitido por la empresa, tiene su origen en la puesta en marcha de un Plan de Envases Sostenibles, un proyecto «transversal» a todo el portafolio de productos que se fundamenta en los principios de la economía circular y en la política de las 3R: reducir, reciclar y reutilizar.
Florette también ha impulsado otras medidas como la utilización de materiales «100 % reciclados y reciclables» y de energía renovable en sus centros de producción.
«Tras varios años de trabajo y proyectos de investigación», esta medida supone que Florette retirará del mercado alrededor de 160 toneladas de plástico al año en su «esfuerzo» por minimizar el impacto medioambiental.
“En Florette estamos inmersos en varios proyectos en materia de sostenibilidad, que tienen como objetivo reducir la huella de nuestra actividad en el medioambiente y ofrecer un producto sostenible al consumidor, manteniendo siempre su gran calidad y garantizando la seguridad alimentaria”, aseguró Fermín Aldaz, director comercial y de Marketing de la compañía.
La reducción del 15 % de plástico en los envases de ensaladas listas para consumir se suma a otras medidas ya implementadas por la empresa navarra, como la utilización de materiales «100 % reciclados y reciclables» en los boles de sus Ensaladas Completas. Además, desde Florette apuntaron que continúan «investigando e impulsando» otros avances en torno al ecodiseño. Y aunque actualmente «no existe un sustituto del plástico que asegure las mismas condiciones de calidad y seguridad alimentaria de los vegetales de IV gama», Aldaz insistió en que la «prioridad» de la compañía es compaginar el estudio de tecnologías alternativas para la conservación de los alimentos con la «protección y respeto del medioambiente a través de una gestión responsable”.
Fermín Aldaz (Florette): «Actualmente no existe un sustituto del plástico que asegure las mismas condiciones de calidad y seguridad alimentaria de los vegetales de IV gama».
Por otra parte, el comunicado hizo énfasis en que el «compromiso» de Florette con la sostenibilidad es «presente y futuro» y «se aplica a todo el proceso, desde su cultivo hasta que está listo para consumir». Entre otras medidas, la empresa impulsó la utilización de energía 100 % renovable en los centros de producción, así como prácticas para la gestión eficiente de los recursos naturales.
En ese sentido, los campos cuentan con técnicas de ahorro de agua como el riego por goteo o por aspersión y las mantas térmicas, así como la reutilización del agua de lluvia y el uso de desinfectantes naturales de ‘residuo cero’. Adicionalmente, Florette fomenta la «cercanía» entre los cultivos y los centros de producción, algo que «no solo asegura la calidad y frescura del producto, fomentando la economía local, sino que ayuda a reducir las emisiones de CO2 durante el transporte».
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