Con la presentado del plan estratégico 2018-2022, hoy arranca una nueva etapa para Fundación Caja Navarra. La entidad sigue apostando por el progreso social, económico y cultural de la Comunidad, tal y como lo marcan sus estatutos, pero de cara a los próximos cinco años se ha fijado una serie de objetivos y acciones para lograr “una Navarra más solidaria”. Ése es el lema que regirá las actuaciones de ahora en adelante, recogidas en un documento que es “una hoja de ruta, no meras intenciones“, como ha resaltado el presidente del patronato de la Fundación, Javier Miranda.
El documento, en el que se recogen objetivos y se marcan las pautas de actuación, se convierte así en un “instrumento que va a servir para dar un nuevo impulso al papel que la Fundación tiene que desarrollar en la sociedad como referente en materia de solidad y progreso social”, ha añadido. En este sentido, Miranda ha insistido en que la entidad tiene que adaptarse y responder “de forma adecuada” a los nuevos retos del siglo XXI en materia de obra social. “Nuestro compromiso es con las personas y su bienestar”, ha recalcado.
CUATRO EJES
Tras una labor de puesta en común en la que han participado alrededor de 900 interlocutores y agentes, “entre particulares, instituciones, asociaciones, colectivos y personalidades significadas de diferentes ámbitos”, el plan ha cobrado forma señalando cuatro ejes estratégicos, 18 líneas de actuación y 58 medidas concretas. El documento íntegro se podrá consultar en la web de Fundación Caja Navarra a partir de la próxima semana. No obstante, Miranda ha esbozado parte de su contenido en un acto en el que han participado la presidenta del Gobierno foral, Uxue Barkos; la presidenta del Parlamento de Navarra, Ainhoa Aznárez; el vicepresidente de Derechos Sociales, Miguel Laparra; representantes del Ayuntamiento de Pamplona y miembros de diversas asociaciones.
Javier Miranda, presidente de la Fundación Caja Navarra.
Así pues, el apoyo a las personas más vulnerables; la promoción de la solidaridad, la participación y la convivencia; el apoyo a la investigación, la educación, la cultura y el patrimonio artístico; y la garantía de la solvencia de la Fundación son los cuatro ejes sobre los que girará su actividad hasta 2022. “Y el plan nos marca cómo hacerlo”, apuntaba Miranda. “Mediante la búsqueda de alianzas y trabajo colaborativo en red con otras entidades e instituciones, la innovación, el pilotaje y la evaluación del impacto, la accesibilidad universal en la interacción con la ciudadanía y en la gestión interna, y la garantía de la mayor equidad económica, territorial, cultural y de género”, ha detallado.
APOYO A MÁS DE 5.000 PERSONAS VULNERABLES
Cada uno de estos ejes incluye medidas de acción concretas. En este sentido, y en lo que a atención de los más vulnerables se refiere, la Fundación se compromete al desarrollo de actividades de “rehabilitación funcional y psicosocial” para personas con problemas crónicos de salud, discapacidad “o derivados de situaciones de soledad”. Miranda ha cifrado en más de 5.000 las personas en estas situaciones a las que se prevé ayudar.
Pero la actividad de la Fundación no quedará ahí. “Queremos incidir especialmente en las nuevas problemáticas que van surgiendo”, ha adelantado. Desde favorecer las viviendas de alquiler social o actividades para la inclusión de la población inmigrante, hasta medidas para combatir la ludopatía en jóvenes o el despoblamiento de zonas rurales en declive. Todo ello, ha incidido el presidente del patronato, sin olvidar la cooperación internacional.
La Fundación realizará actividades de rehabilitación funcional y psicosocial para enfermos crónicos, personas con discapacidad y en situación de soledad.
A las acciones recogidas en el primer eje estratégico se suman otras tantas en el resto de prioridades fijadas por la Fundación. Así, en materia de solidaridad, participación y convivencia, la entidad apoyará al tejido asociativo y la participación de jóvenes y mayores, e impulsará el retorno del talento que durante la crisis tuvo que salir al extranjero para desarrollar su carrera formativa y profesional.
En el ámbito de educación, cultura y patrimonio, se plantea apoyar la investigación universitaria y la innovación en el ámbito educativo, además de promover el arte y la cultura contemporánea y difundir y conservar el patrimonio de la Comunidad foral.
QUINCE MILLONES MÁS
Y, a todo ello, se unen medidas para garantizar la solvencia económica y técnica de la Fundación, optimizando el patrimonio de la misma y poniendo en marcha una nueva estructura de gestión, entre otras acciones. “No se trata de mirarnos al ombligo, se trata de asegurar que el plan y el futuro de la Fundación es viable y que disponemos de los recursos para utilizarlos como palanca posibilitadora de todo lo demás”, ha aclarado Miranda. No en vano, según las cifras que ha hecho públicas el presidente del patronato, para cumplir el plan hará falta incrementar los ingresos “en aproximadamente 15 millones de euros”.
Miembros del patronato y asistentes a la presentación.
Sólo como referencia, en 2017 la Fundación logró 10,3 millones de ingresos (la mayor parte de dividendos, pero también de las aportaciones de los usuarios y beneficiarios y de otros ingresos financieros) y gastó 10,25 millones en actividades sociales, educativas, culturales, a mayores, en investigación y cooperación.
“Somos conscientes de la dificultad que supone llevar a cabo todos estos objetivos, pero todos en la Fundación creemos que cualquier avance que logremos contribuirá a que nuestra sociedad sea algo más justa, algo más solidaria, algo más equitativa y, en definitiva, mejor”, ha concluido Miranda, no sin antes animar a toda la ciudadanía a colaborar en este empeño.
La presidenta del Gobierno, Uxue Barkos, ha aplaudido la labor de la Fundación, al tiempo que ha recordado la necesidad de la obra social de “readecuarse” a los retos del siglo XXI. “En el cambio de enfoque está el reto”, ha señalado. Y, en ello, Barkos ha asegurado que su Ejecutivo está “alineado con la Fundación para lograr una Navarra más solidaria”. “Pero necesitamos el apoyo del conjunto de la sociedad, esa complicidad, para lograr resultados, para avanzar en la satisfacción de las necesidades de las personas. Navarra ha sabido ser seria y ambiciosa en estos temas, pero todavía hay que seguir trabajando”, ha animado.
La presentación del plan, que ha tenido lugar en un repleto salón de actos de Civican, ha estado amenizada por el quinteto de cuerda de la Orquesta Sinfónica de Navarra.
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