Cuatro familias. Dos generaciones. Una imprenta. Tras años de experiencia en una empresa de producción de libros en Tierra Estella, Luis M. Cordovín, Félix Errea, José M. Martínez y Miguel A. Sancho decidieron crear en 1990 la firma GraphyCems en Morentin. Con una única máquina de impresión y un taller modesto, comenzaron su andadura con una idea clara: replicar el modelo que conocían, pero a menor escala y con un enfoque más ágil.
Mientras en la década de los 90 las grandes imprentas trabajaban con tiradas masivas, ellos apostaron por volúmenes más reducidos. Hoy, 35 años después, sus hijos continúan su legado produciendo más de seis millones de libros al año en su sede de 4.000 metros cuadrados de Villatuerta. «Desde los 2000, el mercado editorial se ha ido contrayendo y las tiradas han caído mucho, sobre todo en el ámbito de las revistas o los periódicos. Por suerte, el mundo editorial, los libros, se ha dirigido hacia nuestra especialización, las tiradas medias», explica Rubén Cordovín, director comercial de la compañía.
En los últimos años, la facturación ha mostrado un crecimiento notable, impulsado en gran medida por factores externos que favorecieron la demanda. Al contrario que otras industrias, el Covid-19 no perjudicó a la firma por el aumento de la demanda de libros, lo que ocasionó un crecimiento en la producción. En esta línea, la escasez de papel y «el miedo a que este se acabase» también fomentó la fabricación de ejemplares en 2022, tendencia que se mantuvo hasta 2023. Sin embargo, en 2024 volvieron a su línea histórica, superando en un 7 % los niveles de 2021.
Desde el principio, su modelo de negocio se basó en la exportación a Europa, que representa el 85 % de su actividad. La compañía aterrizó primero en el mercado inglés, donde durante muchos años «fueron muy fuertes». Sin embargo, la llegada del Brexit y obligó a los responsables de la firma a buscar otros mercados más accesibles como Países Bajos, Alemania, Suecia y Francia.
Curiosamente, este último, frecuentado habitualmente por las industrias navarras, fue el último en explorarse, aunque hoy es el más potente. «Ahora mismo trabajamos con editoriales muy importantes como Éditions de La Martinière. Con ella hemos publicado los libros de cocina ‘Fait Maison’ del reconocido chef Cyril Lignac o un nuevo catálogo sobre una exposición que combina moda y arte para el Museo del Louvre, del que estamos imprimiendo su tercera edición».
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La compañía de Villatuerta publica unos seis millones de libros al año en francés, inglés y español.
Asimismo, también colabora con entidades como Cambridge University Press, Penguin Random House, Rizzoli New York, la Universidad de Navarra o la Fundación Osasuna, con la que lleva diez años trabajando. «Imprimimos los materiales que necesitan para los campus, los eventos o las actividades. Nos encargamos de las fotos de los jugadores, los pósteres corporativos que entregan en los campeonatos y los de la plantilla. Acabamos de renovar el contrato y estamos muy contentos», añade Cordovín mientras enseña orgulloso unas camisetas firmadas que lucen enmarcadas en la pared.
PROYECTOS DE FUTURO
En 2025, GraphyCems, que factura entre 9 y 10 millones de euros anuales, prevé invertir 2 millones en maquinaria (una impresora Heidelberg SX de ocho colores y otra de encuadernación y acabados, además de alguna mejora en desarrollos informáticos). Su principal objetivo es «optimizar procesos y ser más productivos».
Hace unos años, ya instaló tres robots en diferentes áreas de la empresa, uno de ellos industrial y otros dos colaborativos, que operan mano a mano con los 50 empleados de la plantilla: «Antes, los márgenes en este sector eran muy altos, por lo que la empresa se capitalizó mucho y se hicieron inversiones muy potentes. Hemos intentado mantener ese nivel de reinversión de beneficios en maquinarias y activos, pero con las cifras actuales es complicado conseguirlo. En los últimos años nos hemos centrado en producir cada vez más con el mismo personal gracias a la ayuda de la tecnología».
En 2025, la firma, cuya facturación oscila entre los 9 y los 10 millones de euros anuales, invertirá dos millones en maquinaria.
Cordovín agrega que la empresa compite en un mercado global contra países europeos «con los mismos recursos, pero con costes de personal más bajos» como Polonia, Lituania o Letonia, por lo que su futuro pasa por «mejorar la competitividad». «Son zonas que están creciendo exponencialmente y que cuentan con más ayudas a la inversión, algo que favorece notablemente al desarrollo de una compañía. Por lo tanto, es muy difícil hacerles frente. Además, nosotros detectamos graves problemas a la hora de encontrar personal cualificado. Por eso, colaboramos con la comunidad educativa especializada en artes gráficas e intentamos contratar a los estudiantes que vienen aquí a realizar sus prácticas», puntualiza.
En este sentido, GraphyCems también forma parte de IndesIA, una asociación nacional de Inteligencia Artificial creada por Repsol, Gestamp, Navantia, Técnicas Reunidas, Telefónica, Microsoft, Ferrovial, Airbus e Inditex, con el fin de «formarse y mantenerse actualizada para mejorar su productividad mediante el análisis de datos, compras de materia prima o planificaciones».
