«¿Está el jefe? Tres palabras que resumen lo que sucedía décadas atrás, o no tanto. Tres palabras que hemos escuchado en infinidad de ocasiones las mujeres que estábamos y estamos al frente de los negocios de hostelería. Estas tres palabras justifican una exposición como esta, con la que Anapeh quiere dar visibilidad a las mujeres y su trabajo en negocios de hostelería».
La presidenta de la Asociación Navarra de Pequeña Empresa de Hostelería (Anapeh), María Ángeles Rodríguez, inauguró este lunes la exposición ‘Historia de la hostelería, contada por 25 mujeres’. Junto a ella, otras veinticuatro mujeres forman parte de la muestra, expuesta en el Palacio del Condestable.
Con esta acción, el colectivo quiere homenajear tanto a las mujeres «que en las últimas décadas se han empoderado y puesto al frente de muchísimos negocios» como a las que «lo han hecho desde sus puestos de trabajo». A la inauguración asistieron, además de las protagonistas de la exposición, el alcalde de Pamplona, Enrique Maya; la primera teniente de alcalde, Ana Elizalde; la concejala de Cultura e Igualdad, María García; la directora del servicio de Marketing Turístico del Gobierno de Navarra, Paz Fernández; el presidente de la Cooperativa de Hostelería, Santiago Enciso; y el gerente de la Cooperativa de Hostelería, Javier Arístegui. Además, acudieron a la cita Igor Goroskieta y Pilar Villarreal, de Caja Rural de Navarra; Eva Istúriz y María Ángeles García, del Instituto Navarro para la Igualdad; María Carmen Ochoa, de la Coordinadora de Organizaciones de Mujeres y Feministas por la Igualdad (Comfin); y Cristina Sotro, presidenta de la Asociación de Mujeres Empresarias y Directivas de Navarra (Amedna-Neeze).
La muestra se acompaña de un libro disponible en pdf en la web de Anapeh.
«Las mujeres forman parte de la historia de la hostelería a todos los niveles, desde la gestión hasta las labores de limpieza, desde la propiedad hasta los fogones. Trabajos que muchas veces han quedado ocultos tras figuras masculinas. Sin embargo, las mujeres siempre han estado ahí», valoraron desde la asociación.
La muestra se acompaña de un libro disponible en pdf en la web de Anapeh, que recoge veinte imágenes de estudio y cuarenta fotos caseras de veinticinco mujeres de entre 22 y 75 años. «Todas ellas en activo, de negocios tan variados como una venta de montaña o un bar de ocio» nocturno. La exposición se podrá ver hasta el 19 de abril en Pamplona y luego se convertirá en itinerante «para llevar su mensaje por otros rincones de Navarra donde residen las protagonistas del libro».
LAS PROTAGONISTAS Y SUS FRASES
- Ana María Gabás (55 años), Nerea Urzainki (28 años) e Idoia Urzainki (22 años). Venta Juan Pito (Isaba): «Yo he hecho la vida aquí y mis hijas también se han criado en la casa, donde ahora trabajamos juntas».
- Arantxa Galarza (49 años). Bodegón Sarría (Pamplona): «Mi madre estaba en la cocina y yo he seguido sus pasos. Me enseñó y he continuado el trabajo adaptando a los tiempos la cocina y mejorando la oferta con los años».
- Beatriz Huarte (50 años). Secretaria general de Anapeh: «Me gusta mucho lo que hago, me veo cómoda, a pesar de las dificultades que está viviendo este sector. La asociación es muy fuerte, pero el sector está muy débil. Los próximos dos o tres años van a ser claves».
- Beatriz Zabaleta Cestau (75 años). Restaurante Beatriz Enea (Leitza): «Hay que animarse, seguir con ganas, con cariño, con amor. Tengo la suerte de que mi trabajo me ha gustado toda la vida».
- Belén Martínez (62 años). Cervecería Feel The Music (Ansoáin): «Mi satisfacción es cuando un cliente te dice que ha estado a gusto y ha disfrutado. Por eso, mi valoración de todos estos años es de diez, la gente nos valora, vuelve, y eso es importante».
- Belen Urrutia (51 años). Posada Elbete (Elbete): «Lo que tenemos que hacer es seguir esta línea de trabajo, apostar por la economía circular y el kilómetro cero, buscando los sabores auténticos, los de aquí y aprovechar lo que nos dé la naturaleza».
- Consuelo Urmeneta (54 años). Hotel Rural Camino de Las Bardenas y Alojamientos Dezerto Bardenas / Camino de Las Bardenas (Arguedas). «Las mujeres siempre hemos estado ahí, toda la vida, en todos los puestos, limpiando o gestionando, da igual. Todos esos trabajos son y han sido importantes, pero ahora hemos ganado en visibilidad».
- Diana Díez (35 años). Terraza del Baluarte, Catering Cock (Pamplona): «Me han ido enseñando el trabajo, la vida, los eventos-.. Al final es lo que he elegido. Los trabajos que he ido haciendo y mi formación en Recursos Humanos y Trabajo Social también han ayudado a ser lo que soy ahora».
- Eva Gómez (57 años). Bar Nicolette (Pamplona): «Hemos pasado del punk a la música electrónica y de compartir una cerveza a pedir un gin tonic. La noche en Pamplona ha cambiado mucho».
- Iratxe Garro (47 años) y Gema Garro (41 años). Aiñari Lojan (Urzainqui): «Con el tiempo fuimos aprendiendo que hay que vivir, tienes que adaptarte y trabajar».
- Maite Fernández (60 años) y Clara Fernández (68 años). Hostería del Temple (Pamplona): «Tenemos gente que venía cuando estudiaba Empresariales y que luego ha venido con su cuadrilla de amigos, con sus novias y novios, con sus hijos y ahora con sus nietas y nietos. Eso nos emociona de verdad».
- Idoia Etxeberria (48 años). Albergue de Beintza Orbela (Beintza Labaien): «Con el tiempo vas haciendo clientes que vuelven a menudo porque se sienten como en casa, y entablas una relación, una amistad».
- María Ángeles Ezquer (57 años). Casa rural Katalin Garde (Isaba): «Desde que era niña estoy acostumbrada a ver gente en casa. Para mí era emocionante».
- María Ángeles Rodríguez (61 años). Presidenta de Anapeh. Hotel El Castillo (Larraga): «Tengo un trabajo bonito, que me aporta. Ese trato con la gente de otras culturas, lugares… Para mí, tener un hotel es una apertura al mundo».
- María Jesús Ayestarán (52 años). Hotel Ayestarán Lekunberri (Lekuberri): «Muchos clientes llevan varias generaciones viniendo a nuestra casa y son parte de la familia. Hemos ido a sus bodas y a sus funerales y han venido a los nuestros. El hotel es algo vivo».
- Maritxu Erbiti (55 años). Herriko Ostatua de Etxaleku (Etxaleku): «Empecé para probar y ya son quince años. Estoy encantadísima en mi pueblo y totalmente enganchada».
- Mirentxu Goienetxe (50 años). Apartamentos Turísticos Tresanea (Ituren): «No sé si es la necesidad que tenemos de salir, pero últimamente viene gente durante todo el año, no solo en verano, los puentes o Semana Santa».
- Rosa Galán (49 años). Chez Belagua (Pamplona): «Llevo 33 años trabajando en hostelería y he podido ver la evolución que hemos hecho las mujeres. Cuando empecé, la anterior generación ya estaba dando pasos y ahora puedo decir que el cambio es brutal».
- Stephanie Mutsaerts (53 años). Northern Spain Travel (Pamplona): «Somos una boutique de viajes, ofrecemos una experiencia a medida de la clientela mezclada con catar el norte, ya que aquí hay una gastronomía brutal».
- Lorea Luzuriaga (48 años) y Haizea Luzuriaga (43 años). Donamariako Benta (Donamaría): «Si nuestros padres no hubieran montado un restaurante, seguramente no habríamos sido hosteleras. Tuvimos la oportunidad de cambiar de oficio y decidimos que esta profesión es la que nos gusta, no se nos ocurriría trabajar en nada más».
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