Raquel Sánchez, presidenta de la cadena hotelera pública Paradores, anunció este jueves las actuaciones que se llevarán a cabo para la reforma integral del Parador de Olite y que supondrán una inversión cercana a los 7 millones de euros. Una inyección económica de la cual Paradores aportará directamente 6 millones y el resto serán a cargo de los Fondos Europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, a través de Turespaña.
En su visita de este jueves a la localidad navarra, la presidenta de la cadena acudió acompañada de la delegada del Gobierno en Navarra, Alicia Echevarría; el jefe del Servicio de Ordenación, Gestión y Calidad del Turismo del Gobierno de Navarra, Manuel Bermejo; y el teniente de alcalde de Olite, Jorge Bacaicoa, con los que comentó los detalles de los proyectos.
Según indicó Paradores, las obras contemplan la remodelación integral de sus instalaciones para mejorar la eficiencia energética y el confort de sus huéspedes, así como una nueva decoración que pondrá en valor la monumentalidad del parador: «Todas las modificaciones se llevarán a cabo teniendo en cuenta el importante valor artístico e histórico del emblemático edificio». Ya en 2023, Navarra Capital adelantó algunas de las principales reformas que se proyectaban en el establecimiento.
Sánchez explicó las inminentes reformas que se realizarán en el establecimiento que la cadena hotelera pública tiene en Navarra y que obligarán al cierre temporal del establecimiento debido a las obras. En concreto, el parador cerrará sus puertas temporalmente el próximo 15 de octubre con una duración estimada de diecisiete meses.
«Paradores quiere continuar siendo un motor que impulse la prosperidad económica, cultural y patrimonial de este territorio. Cuando el Parador de Olite reabra sus puertas, estaremos listos para ofrecer una experiencia renovada en un entorno más sostenible y confortable, sin olvidar la misión que nos define: proteger el patrimonio cultural y contribuir al desarrollo local», recalcó la presidenta. Además, Sánchez quiso destacar la alta ocupación del establecimiento navarro, que cerró el verano con una cifra superior al 85 %.
REFORMA DE ZONAS COMUNES Y HABITACIONES
Asimismo, el proyecto también incluye la reforma integral de las cubiertas del edifico histórico y el aislamiento térmico, así como la sustitución de la totalidad de la carpintería exterior, lo que «mejorará notablemente la eficiencia energética del inmueble». Además, se van a reformar integralmente las dieciséis habitaciones del inmueble, así como las situadas en la planta baja del edificio ampliado, para incluir una habitación accesible y otra familiar con el fin de «responder a la demanda turística y mejorar la accesibilidad». En paralelo, se reformarán todos los baños de las habitaciones situadas en la primera, segunda y tercera planta del edificio, sustituyendo las bañeras por platos de ducha para facilitar la accesibilidad.
En cuanto a instalaciones, el proyecto de obra contempla la ejecución de un nuevo saneamiento en el edificio histórico, así como la sustitución de la protección contraincendios para adecuarlo a la nueva normativa y la instalación eléctrica. También se renovarán tuberías, fancoils y radiadores, así como la instalación hidráulica de producción de frío y calor.
Una vez finalizadas las obras se llevará a cabo un proyecto de decoración integral y artístico de un millón de euros. Todas las actuaciones «se realizarán teniendo en cuenta el valor histórico del edifico y su catalogación como Bien de Interés Cultural«. En este sentido, las intervenciones de Turespaña incluyen la elaboración de un Plan Director de Conservación, que «permitirá conocer a fondo el edificio y sus necesidades». Además, este se encargará de la iluminación monumental de la fachada, la conservación tras los problemas de humedades de esta y la consolidación estructural de las torres. Unas medidas que superarán en total los 600.000 euros.