La apertura de España al turismo nacional e internacional, anunciada por Pedro Sánchez el pasado fin de semana para la campaña de verano, generó acto seguido un gran incremento en el número de consultas registrado por algunas agencias de viajes online como Destinia, que este domingo hablaba de una subida del 142 % y un repunte de las reservas. También está teniendo un efecto positivo en los mercados. De hecho, las acciones de Aena, Meliá o NH se revalorizaron este lunes hasta un 40 %.
Según Sara Martínez, las previsiones que manejan los hoteles de Pamplona para el verano rozan el 20 % de ocupación: «Muchos se están planteando abrir porque no sale a cuenta».
Sin embargo, esa corriente relativamente positiva no alcanza a todos por igual. Y tampoco todos los agentes del sector coinciden en sus análisis sobre la verdadera relevancia de las cifras publicadas por Destinia. Mientras los hoteleros de Pamplona confirman que no han sentido «nada», en los alojamientos rurales se muestran aliviados hasta cierto punto con el nivel de reservas que están empezando a recibir.
«Nosotros seguimos bajo cero. Uno de nuestros asociados, por ejemplo, apenas tiene doce reservas para todo junio», resume la presidenta de la Asociación de Hoteles de Pamplona, Sara Martínez, a NavarraCapital.es. Martínez, que siguió la comparecencia de Sánchez en directo, no oculta su sorpresa por esa avalancha de consultas ocurrida en las cinco horas posteriores a la intervención del presidente. Un extremo que ella focaliza principalmente en los destinos de sol y playa, «que nada tienen que ver con nosotros«.
Además, los datos que se están ofreciendo no tienen en cuenta que esa subida no es realmente tan espectacular en términos absolutos porque se parte de los niveles mínimos, casi nulos, registrados en las semanas previas. «Con solo dos visitas, ya estás por encima del 100 %», advierte la presidenta de la asociación.
Pese al intento de Martínez por transmitir «cierto optimismo«, las previsiones que manejan los establecimientos hoteleros de Pamplona y su Comarca para este verano apenas rozan el 20 % de ocupación: «Muchos de nuestros asociados se están planteando seriamente abrir porque no sale a cuenta».
Nacho Calvo resalta que los ‘campings’ navarros sí están recibiendo «muchas llamadas para hacer reservas», aunque cree que el turismo no se dinamizará de verdad hasta que llegue la Fase 3.
Al igual que Martínez, Nacho Calvo, secretario general de la Asociación de Hostelería y Turismo de Navarra (AEHN), recuerda que el incremento de consultas de los últimos días se está comparando con fechas en las que no había prácticamente ninguna actividad. “Ahora, cualquier cosa parece buena. Eso es para animar al sector. Pero hasta que no llegue la Fase 3, no se dinamizará el turismo de verdad”, valora.
A pesar de todas estas dificultades y de que la suspensión de los Sanfermines ha sido un mazazo, Calvo defiende que la capital navarra y la Comunidad foral pueden atraer a turistas interesados en huir de las masificaciones. “El visitante que viene a Navarra busca otras cosas. Además de hacer turismo rural, conoce Pamplona, donde a menudo tiene su centro de operaciones…”, resalta.
EL PARAÍSO RURAL
En el lado opuesto se encuentra el turismo rural. Beatriz Huarte, secretaria técnica de la Federación de Turismo Rural de Navarra, asegura que este tipo de alojamientos lleva cierto tiempo recibiendo reservas para el verano: «Nuestros asociados nos confirman, además, un incremento notable de consultas en estas últimas horas». Un hecho que viene motivado por las «buenas expectativas sanitarias en las que se mueve Navarra y porque el tamaño de los alojamientos rurales es más reducido».
Beatriz Huarte: «Nuestros asociados nos confirman un incremento notable de consultas en estas últimas horas».
En este sentido, las previsiones que baraja esta organización hablan de un nivel de ocupación media por encima del 60 %. «No llegaremos a los niveles de plena ocupación de otros veranos», puntualiza.
También confirma que se producirán fluctuaciones más marcadas que en anteriores campañas: «Es posible que haya semanas con mayores niveles de ocupación y otras con menos». Cifras provisionales en todo caso, ya que «los clientes más habituales (madrileños, catalanes y valencianos) van por detrás en la desescalada y todavía no han concretado su destino de vacaciones».
Calvo especifica, en una línea similar, que los ‘campings’ están recibiendo «muchas llamadas para hacer reservas», aunque prefiere no realizar predicciones sobre los niveles de ocupación que puede alcanzar Navarra. Pero sí es bastante pesimista respecto al cambio que pueda suponer la llegada de la Fase 2 para los bares y restaurantes. Aunque carece de cifras y porcentajes precisos sobre reaperturas de establecimientos en estos momentos, ve difícil lograr un despegue firme y sostenido del sector hasta no solucionar el problema de los Expedientes Temporales de Regulación de Empleo.
Durante la Fase 2, el aforo en el interior de los bares es del 40 % y solo se puede consumir en mesas.
“Aún no se ha arreglado el tema de los ERTE y existen dudas sobre cómo hacer la transición hacia los ERTE parciales por fuerza mayor… ¿Qué le decimos a los asociados? La gente tiene mucho miedo y hay una gran incertidumbre”, remata.
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