Centrar la innovación en nuevos productos y no tanto en los procesos; lograr un consenso político para definir el modelo productivo de Navarra; crear sinergias más estrechas entre el ámbito educativo y el tejido empresarial, con el fin de que la formación estudiantil se adapte mejor a las necesidades actuales del mercado laboral… Estas son algunas de las ideas clave que Navarra debería desarrollar para que su economía sea más competitiva, según las conclusiones obtenidas en el grupo de discusión sobre El Espejo de NavarraCapital.es.
El estudio, elaborado por la socióloga Eva Perujuániz, sirvió para analizar qué piensan los empresarios y directivos navarros sobre aspectos clave del desarrollo económico como la tecnología, la innovación, la competitividad, la formación o la mano de obra, entre otros. Y tras su presentación en junio, la pasada semana se convocó una sesión con representantes del ámbito empresarial, económico, institucional y educativo, que hicieron balance de los resultados obtenidos en El Espejo y pusieron de manifiesto los aspectos sobre los que hay que incidir de cara al futuro.
El Espejo, financiado por Ultracongelados Virto, Laboratorios CINFA y Caja Rural de Navarra, contó también con la colaboración de la Cámara Navarra de Comercio e Industria e Institución Futuro para recoger las respuestas de las 254 empresas que contestaron a la encuesta. Datos que sirvieron de base para la elaboración del estudio por parte de Perujuániz.
La sesión se celebró en las instalaciones de Cámara Navarra.
En el encuentro de la semana, se dieron cita, además de la autora, Fernando San Miguel, responsable de Estudios Económicos y Proyectos Europeos en Cámara Navarra; Marino Barasoain, director de la Fundación Navarra para la Excelencia; Javier Vidorreta, fundador de Vidorreta Design y presidente de AJE Navarra; Íñigo Ayerra, CEO en IED Electronics; Antxon Lasarte, del área empresas de Caja Rural; Miguel Cornejo, managing partner en Macuarium Network SL; Jorge Lanchas, director de Salesianos; Pili Ruiz, de CCOO; Unai Garbisu, director del Servicio de I+D+i, del Gobierno de Navarra; y Cristina Oroz, directora de Desarrollo y Comunicación de Cámara Navarra.
MEJORAR EL PRODUCTO
Uno de los temas clave tratados en el grupo de discusión giró en torno a la competitividad y la innovación. Aunque los encuestados para el estudio valoraron de forma positiva la situación actual de las empresas navarras en este ámbito, los asistentes matizaron que las compañías deben ir más allá de la tecnología, la robótica o la digitalización. El motivo es simple: estas se centran más en los procesos y «pueden morir en cualquier momento» porque son muy temporales y coyunturales. La solución, por lo tanto, pasa por innovar más en el diseño de nuevos productos, en la apertura de nuevos mercados.
San Miguel: «La generación de producto propio es la verdadera fuente de valor añadido y ganancia de competitividad”.
Perujuániz reconoció estar “muy sorprendida», porque los participantes hicieron «mucha autocrítica» sobre el enfoque dado a «algunas estrategias en las propias empresas». Pero estos también criticaron el modo en que interviene «la Administración en la empresa y, en consecuencia, en el mercado de trabajo”.
En esa misma línea, Fernando San Miguel destacó que “las empresas navarras son buenas en la innovación de procesos, pero no en producto”. Algo a mejorar, pues «la generación de producto propio es la verdadera fuente de valor añadido y ganancia de competitividad”.
El responsable de Estudios Económicos y Proyectos Europeos en Cámara Navarra indicó que Navarra «ha perdido puestos en el ranking de regiones más innovadoras de Europa» y necesita atender los retos derivados de la transformación de los principales sectores económicos y modelos de negocio, debido a la aparición de nuevas tecnologías, nuevos productos, la digitalización y las nuevas formas de consumo.
Los asistentes lamentaron que algunos sectores industriales tienen los centros de decisión y diseño de producto fuera de Navarra.
Precisamente, los asistentes destacaron como negativo que determinados sectores industriales (más del 50 %), especialmente el de la automoción, tienen los centros de decisión y diseño de producto fuera de Navarra. Pero San Miguel trató de no ser alarmista en este sentido: “Me surge la duda de si esta foto no es algo extrema. Porque según la Encuesta sobre Innovación en las Empresas, elaborada por el Instituto de Estadística de Navarra, el 55 % de las empresas realizaron innovación de producto en el periodo 2014-2016. Si miramos más allá del sector industrial, encontramos empresas innovadoras que basan su innovación en las oportunidades que ofrecen la digitalización y las nuevas tecnologías». Como ejemplo, recordó que una delegación de la Cámara de Comercio de Navarra viajó a Nueva York el año pasado con representantes de seis pymes navarras, innovadoras de producto todas ellas y cuyos modelos de negocio no son nada tradicionales.
FALTA DE SINERGIAS Y CONSENSOS
En el apartado relacionado con la administración, los participantes no solo hablaron de la necesidad de lograr un consenso político sobre el modelo productivo que se quiere para Navarra. También aterrizaron a cuestiones mucho más prácticas y cotidianas como la necesidad de «hacer accesibles las ayudas y las subvenciones para que lleguen a donde tienen que llegar con urgencia: a la pyme y a la micropyme”, apuntó Perujuániz.
De izda. a dcha.: Ayerra, Garbisu, Vidorreta y Oroz.
El futuro de la Formación Profesional fue otro de los temas que se abordaron en la sesión. Todos se mostraron partidarios de que debe apoyarse, pero lamentaron que ninguno de los agentes implicados termina de mostrar el camino a seguir. Los participantes en el grupo de discusión esbozaron algunas propuestas: que la FP no solo dependa de Educación, sino que esté vinculada a otras áreas del Gobierno de Navarra como Innovación, Desarrollo de Empresa y Trabajo.
Perujuániz: «Hay que crear sinergias entre los mundos de la empresa y la formación para, entre otras cosas, organizar la Formación Dual».
En este ámbito, la falta de más sinergias entre el mundo del conocimiento y el de la empresa fue otro de los asuntos que pusieron sobre la mesa, sobre todo a la hora de organizar la Formación Dual.
“¿Quién la organiza? ¿Cómo? Las empresas, en el cuestionario, decían que solo un 17 % había participado en programas de Formación Dual. No tenían información de cómo hacerlo. Y organizar la Dual es algo muy concreto, de cara a que sea más operativa», recordó Perujuániz.
Fernando San Miguel y Eva Perujuániz.
