El sector hostelero en Navarra tenía registrados el año pasado 3.914 establecimientos, de los cuales el 76,1 % (2.977) pertenece a la rama de restauración. Y precisamente, estos últimos dieron empleo a 14.300 personas. Además, cerró el año con una facturación de 1.371 millones de euros, lo que representa el 4,4 % de la riqueza regional.
Estas son algunas de las cifras que se recogen en el Anuario de la Hostelería de España 2019, presentado por Hostelería de España en la sede madrileña de Mahou-San Miguel. Una publicación que recoge datos estadísticos del sector referentes a 2018, incluyendo sus dos ramas de actividad: restauración y alojamiento.
El sector hostelero foral cerró el año con una facturación de 1.371 millones de euros, el 4,4 % de la riqueza regional.
En el análisis sobre Navarra, el informe concluye que el sector evolucionó “de manera positiva” en 2018 tanto respecto al año anterior como a 2010. El número de locales de la rama de alojamiento creció “a mayor ritmo”, con especial relevancia de los apartamentos y casas rurales (197 en 2018 frente a los 185 de 2017 y los 66 que había en 2010).
También se produjo un mínimo descenso de los restaurantes (725 en 2018 frente a 727 en 2017). Pero es la única región en la que aumentó el número de bares con respecto al año anterior. En total, se contabilizaron 2.133 en 2018, un 1,5 % que el año anterior (2.101) y un 3,4 % más que en 2010, cuando había 2.062.
Emilio Gallego (Hostelería de España), Leticia Iglesias (periodista), José Luis Yzuel (Hostelería de España) y Peio Arbeloa (Mahou-San Miguel), tras la presentación del anuario. (Foto: cedida)
Por otro lado, el documento revela que el empleo en las actividades de restauración moderó su crecimiento (0,7 %) después del fuerte avance del año anterior, cuando experimento una subida del 12,5 %. Y detalla que los precios subieron más que en 2017 en las dos ramas de actividad hostelera, especialmente en el alojamiento (6,1 % en este ámbito y 1,9 % en restauración).
ANÁLISIS NACIONAL
Navarra se sale por tanto de la tendencia nacional, ya que 19.300 bares echaron el cierre en el país entre 2010 y 2018 (unos 2.400 al año). Este fenómeno se cebó especialmente con los locales de barrios periféricos y pequeños pueblos. Eso sí, el volumen de ventas de los bares españoles aumentó un 7 % en ese período, hasta superar los 36.000 millones de euros.
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