La empresa Optimus Crane se encuentra en pleno desarrollo de un producto propio que forma parte de su línea de innovación. Con la idea ya patentada, sus profesionales están ultimando el diseño de un primer prototipo con el que pretenden facilitar la manipulación y el movimiento de las palas de los aerogeneradores para el sector renovable. «Estamos trabajando en un utillaje que permite el manejo de estos equipos con una sola grúa. De esta forma, los constructores pueden ahorrar tiempo y dinero. Ahora solo falta que nuestra propuesta sea probada por los tecnólogos», explica su director general, Patxi Fabo, a Navarra Capital.
Desde Optimus Crane opinan con orgullo que su innovador producto «tiene buena pinta». Según indica Fabo a este medio, el útil les permitiría experimentar un crecimiento «salvaje» a la empresa. Esto supondría un ingreso «extra» a un negocio que no va nada mal. Así lo demuestran los números. Este año, con los proyectos que tienen firmados, prevén ingresar 400 mil euros, un 500 % más que el año pasado, cuando facturaron 80 mil euros.
Patxi Fabo, director general de Optimus Crane
Por otro lado, gracias a este proyecto de innovación, Optimus Crane obtuvo las ayudas del Programa NEOTEC, en 2022, con el que obtuvieron 325 mil euros repartidos en dos años. Ahora pueden «potenciar su línea de desarrollo del producto» tras ser el trigésimo primer proyecto mejor valorado de los 400 que se presentaron.
APUESTA POR LA INTERNACIONALIZACIÓN
La entidad también ofrece un servicio de consultoría, en el que tratan de analizar y dar con la mejor estrategia posible para la construcción de plantas de energías renovables. «Somos la única empresa que hacemos ese análisis global y que mira todos los factores de gasto. Hemos tenido clientes que, por sugerirles una grúa más cara, se han ahorrado 180 mil euros por molino construido», argumenta Fabo.
Patxi Fabo: «Somos la única empresa que hacemos este tipo de análisis global. Hemos tenido clientes que, por sugerirles una grúa más cara, se han ahorrado 180 mil euros por molino construido».
En esta línea, ya han ofrecido sus servicios en países como Chile y Egipto. Dicha estrategia se ha visto reforzada por los 24 mil euros procedentes del Programa ICEX Next, en los que se busca la internacionalización de empresas españolas. Con esta ayuda, la compañía puede reforzar su plan de internacionalización. «Este va ligado a nuestro ADN. En dos años, el 90 % de los proyectos que facturemos deberían de ser fuera de España», detalla Fabo. Ahora, esperan expandirse a otros países como Italia o Francia.
La compañía cuenta con una plantilla de nueve trabajadores. El perfil de la empleado suele ser una persona sénior con amplia experiencia en el sector y que está especializados en el servicio que ofrecen. El problema que presenta el mercado es el contacto con nuevos clientes. Fabo explica que su servicio debe de ser contratado por «perfiles altos de las empresas», por lo que hay dificultades para poder acceder a este tipo de personas.
