Una información de Miguel Bidegain para Navarra Capital.
Durante su intervención en el Club de Marketing de Navarra, invitada por la escuela de negocios ESIC Business & Marketing School, Nabila Prieto, marketing communications manage de Just Eat explicó el funcionamiento de su compañía.“Tenemos, por un lado, los restaurantes, ellos son los que preparan y reparten la comida, y por otra parte están los clientes que en un momento determinado deciden pedir comida para que les sea llevada a su domicilio en lugar de prepararla o de salir a un restaurante”, indicó.
A partir de ahí, continuó, “nosotros somos la tecnología intermedia que hace posible esa relación, somos una app, una web a la que el restaurante sube su menú y que es consultada por el usuario para hacer su pedido, que después paga en efectivo, con su tarjeta e incluso con paypal. Así de sencillo”.
Prieto, igualmente, añadió que la revolución a la que aludía el título de su conferencia “viene dada por el hecho de que es un modelo extrañamente sencillo, en el sentido de que solo somos esa herramienta intermediaria, nuestro modelo de negocio se basa en una comisión que aplicamos al restaurante cada vez que tiene un pedido y… resulta es que rentable”.
Asimismo, la ponente reconoció que, al principio, Just Eat dudó del éxito de su iniciativa en España porque “por la cultura del ocio y gastronómica que tenemos iba a ser muy complicado implementar en modelo de negocio como éste, pero la verdad es que las cifras nos están diciendo lo contrario”. Sin embargo, la razón puede estar en que cuando se habla de comida a domicilio “lo primero en lo que pensamos es en fast food, hamburguesas, pizzas… cuando la verdad es que el restaurante del barrio, que hace comida española, también está en Just Eat y también se pueden consumir sus platos a domicilio”, afirmó.
Nabila Prieto consideró, además, que otra parte del éxito reside en que “nuestro modelo de negocio es compatible con el resto de consumo de comida del usuario, que se ve beneficiado de que un día de lluvia, por ejemplo, puede pedir que se la lleven a domicilio sin salir de casa, pero es que el restaurante también resulta beneficiado porque incrementa sus ingresos en un 25 por ciento. Es decir, gana el usuario, gana el restaurante, ganamos todos”.
A los restaurantes integrados en la plataforma no se les cobra nada, únicamente una comisión cuando tiene un pedido. “Por lo tanto, si ellos ganan un dinero nosotros también lo hacemos. Cuando se plantea un negocio en el que uno sale perdiendo, porque tiene que pagar una cuota por ejemplo, se complican las posibilidades de que sea un éxito”, explicó esta responsable de Just Eat.
No obstante, a pesar de la sencillez de la fórmula y de que “todo va muy rápido en el mundo de Internet”, la invitada de ESIC en Pamplona advirtió de que se equivocan quienes piensan que “conseguir el éxito pasa por hacer las cosas deprisa para marcar la diferencia”. “Sólo si piensas en un modelo a largo plazo vas a conseguir quedarte ahí y consolidarte como líder”, aseguró.
SOBRE JUST EAT
Precisamente, aplicando esa filosofía Just Eat se ha convertido en líder mundial de pedidos de comida a domicilio a través de Internet con presencia en 13 países. Inició su actividad en 2001 en Dinamarca y, desde entonces, ha conseguido que más de 38.000 restaurantes trabajen con la empresa, entregando un total de 50 millones de comidas al año.
Un negocio, por lo demás, que sigue con un buen ritmo de crecimiento ya que la compañía tecnológica anunció a principios del pasado mes de febrero la adquisición de cuatro negocios de Rocket Internet y Foodpanda por valor de 125 millones de euros, entre los que se encontraba la empresa La Nevera Roja. Una operación que deja a la sociedad de origen danés como líder indiscutible del mercado de la comida online a domicilio en España.