La apertura de las terrazas de los bares con motivo de la entrada de la Fase 1 de la desescalada para paliar la crisis del Covid-19 “no supondrá una relajación en el control de la normativa” dictada tanto por el Ministerio de Sanidad como por la Delegación del Gobierno en Navarra o la propia ordenanza municipal de Tudela.
Ese fue el mensaje que se trasladó tras la última reunión de seguimiento del estado de alarma, mantenida este miércoles por el alcalde, Alejandro Toquero, y los representantes de las policías, Protección Civil y Cruz Roja. Porque la puesta en marcha de las terrazas ha provocado “una incomprensible relajación de algunos ciudadanos”. “Y esto no podemos permitírnoslo de ninguna manera porque seguimos en medio de una pandemia y con un riesgo de provocar un rebrote, que caería como un mazazo para todos después de tanto esfuerzo personal, social, sanitario y económico”, remarcó Toquero.
Ante las dudas ciudadanas por la celeridad de los cambios de normativa que establece el paso de una fase a otra, la Policía Municipal estuvo hasta ayer dando a conocer por las terrazas, tanto a propietarios de bares como a clientes, qué requisitos deben cumplir para hacer uso de estos espacios. “No se han interpuesto denuncias, pero a partir de hoy (miércoles), los incumplimientos se denunciarán”, adelantó el jefe de la Policía Municipal, Juan Cruz Ruiz.
RESTRICCIONES
A este respecto, se aconseja que los camareros lleven mascarilla y se recuerda que las mesas instaladas deben guardar dos metros de separación entre unas y otras. Además, está prohibido apilar mesas junto a las terrazas, permanecer de pie en las mismas o servir a clientela que no esté sentada. En cuanto a los toneles que sustituyen a las mesas o las mesitas altas sin silla, “no está permitido su uso, por lo que se interpondrá denuncia en su caso”.
Alejandro Toquero: “No podemos permitirnos la incomprensible relajación de algunos ciudadanos porque seguimos en medio de una pandemia y con un riesgo de provocar un rebrote”.
Hasta el momento, el Consistorio de la capital ribera ya ha recibido un total de 40 solicitudes de ampliación de terraza, cuya casuística se analiza “de forma individualizada” por el Área de Promoción Económica y la propia Policía Municipal, que en los últimos días ya han efectuado la revisión de veintiocho instalaciones.
Además de aplicar criterios de no interferencia con el paso de peatones ni el tráfico, entre otros, la Policía Municipal exige desde este miércoles, tal y como se informó ayer presencialmente a los propietarios, que en cada establecimiento se exponga de forma visible un cartel “en el que se informe tanto del aforo máximo permitido en la terraza como del número de mesas disponibles”.
“Estas normas no son un capricho ni del Ayuntamiento de Tudela ni de su Policía, son normas en medio de una situación crítica que podemos remontar o empeorar. Ni más ni menos. Tanto el personal del Consistorio como las policías son trabajadores, como el personal sanitario, y también están agotados. Si el sentido común no funciona, seremos estrictos. No queda otra”, declaró el primer edil.
Así mismo, se advirtió también de la necesidad de cumplir los horarios de cierre de las terrazas de cara al fin de semana, un extremo coordinado entre todas las policías. Los viernes y sábados por la noche, las terrazas podrán estar en funcionamiento hasta las 2.30 de la noche, mientras los domingos, lunes, martes, miércoles y jueves, tendrán que cerrar a la 1.00.
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