Han sido numerosos los directores homenajeados por este Festival, se empezó con Fernando Trueba, y se continuó con otros como Berlanga, Miguel Picazo, José Luis Garci, Montxo Armendáriz, Carlos Saura, Francisco Regueiro y un largo etc.
La razón general de hacer estas distinciones a directores consagrados consiste en reconocer el esfuerzo y el trabajo de unas personas que hicieron lo imposible por mantener nuestro cine, luchando contra las fuertes dificultades económicas y la implacable censura, pero que pese a ella fueron también capaces de hacernos entender entre líneas ideas que no se podían expresar con palabras ni con imágenes.
En el Cine Club Muskaria de Tudela hemos tenido claros los motivos para elegir este año a Jaime Chávarri como homenajeado en el Festival Ópera Prima 2018, organizado por Castel Ruiz. Destacamos que ha sido desde el principio un enamorado del cine, pues con poco más de 20 años realizó dos largos en 8mm. que luego exhibía en los Colegios Mayores de Madrid, donde residían los universitarios. Aunque también se debe al interés del director de Opera Prima, Luis Alegre.
Fotograma de ‘Las bicicletas son para el verano’.
La afición de Chávarri le llevó a matricularse en la Escuela Oficial de Cinematografía (EOC), aunque fue expulsado por ‘rojo’ junto a Fernando Méndez Leite, José Luis García Sánchez, Iván Zulueta y el crítico Antonio Castro, entre otros. Entró a trabajar en TVE, lo que le llevó a colaborar en varios guiones y a realizar algunos programas, ejerciendo también la crítica de cine en la recordada revista ‘Film Ideal’. En 1974 realizó su primera película ‘los Viajes escolares’ que veremos este año en el Festival, un film que gusta mucho a Chávarri pues le parece precioso, aunque reconoce que en la última media hora le falta claridad al guion, opinión que tiene desde entonces, porque él no vuelve a ver nunca sus películas, le basta con filmarlas y ver el montaje final.
(Foto: en Estudio Work in Progress, de Patricia Fuertes).
La crítica reconoció, pese a este fallo, la estética de los planos y la fotografía, destacando el buen pulso de su novel realizador. Al año siguiente y de la mano de Alfredo Matas realizó el documental, cercano a la ficción, ‘El desencanto’, sobre la vida de la familia del poeta Leopoldo Panero. El tema es similar en cierto modo al de ‘Los viajes escolares’, el análisis social y personal a través de la descomposición familiar, asunto que a Chávarri le ha interesado siempre.
El cine de este realizador se caracteriza por su facilidad y buen gusto para planificar las escenas, cosa que hace teniendo en cuenta la secuencia anterior y posterior, y el punto de vista del personaje central en ese momento. Además demuestra una elegancia nada común en la composición estética de cada plano, cuidando mucho las perspectivas y las líneas de fuerza; de igual modo los movimientos de cámara son adecuados y enriquecedores, sin resultar nunca retóricos ni fuera de lugar, y finalmente dirige con mucho acierto a los actores, logrando que respondan con veracidad al argumento. Alguna película suya, como ‘Bearn’, fue comparada con ‘El gatopardo’ de Visconti por la belleza de todas las secuencias, aunque Chávarri utiliza una perspectiva muy distinta. En su filmografía hay solo dos películas de las que él ha escrito el guion, siendo una de ellas precisamente ‘Los viajes escolares’, otras están basadas en obras literarias y el resto son películas de encargo, cosa de la que Chávarri no renuncia.
Fotograma de ‘Las cosas del querer’.
Además de las tres películas citadas en esta breve reseña cabe mencionar también otros títulos reconocidos por el gran público y la crítica, como pueden ser ‘A un dios desconocido’, ‘Dedicatoria’, ‘El río de la vida’, ‘Las bicicletas son para el verano’, ‘Las cosas del querer’, ‘El año del diluvio’ y ‘Camarón’, sin olvidar que su amor al teatro le ha llevado a dirigir obras de autores modernos como Edward Albbe y clásicos como Oscar Wilde. Todo lo dicho son méritos más que suficientes para rendir una muestra de admiración a este sin par realizador cinematográfico.
Como viene siendo habitual, en el homenaje se celebra una mesa redonda en la que participarán junto a Chávarri varios conocedores de su obra, expondrán sus opiniones y charlarán con el homenajeado. Posteriormente es el público el que interviene con sus preguntas y al final el Alcalde de la ciudad le entregará al realizador un recuerdo del acto, consistente en una reproducción a pequeña escala del icono bardenero ‘Castil de Terra’.
Reportaje de Alfonso Verdoy, miembro del Cine Club Muskaria de Tudela.
Fotograma de ‘Camarón’.
