Las empresas españolas se enfrentan al creciente problema de atraer y retener su talento. Una necesidad que es incluso más acuciante cuando hablamos de la escasez de directivos. La consultora Synergie apunta que este fenómeno obliga al 40 % de las compañías a buscarlos en el extranjero. Por eso, no es de extrañar que la tendencia de ofrecer a los empleados beneficios sociales para fidelizarlos esté abriéndose camino. Según el V Informe de beneficios para empleados y empleadas 2024, elaborado por Cobee, casi tres de cada diez compañías ya cuentan con un plan, en el que la ventaja más habitual son los seguros de salud (52 %). Precisamente, este tema también constituye la mayor preocupación para el 55 % de las personas encuestadas.
La Clínica Universidad de Navarra (CUN) no es ajena a esta tendencia, atestiguada principalmente a través de su Unidad de Chequeos Médicos. Creada hace veinticinco años, esta área lleva a cabo exámenes integrales de salud, que actúan de forma preventiva y curativa. “Hemos visto una evolución en el perfil de las personas que se realizan chequeos médicos en la clínica. Antes venían muchos particulares, pero en los últimos ocho años se han incrementado las empresas que se acercan a nosotros para ofrecer este servicio como parte de los programas de cuidados que tienen para sus directivos”, detalla a Navarra Capital el director de Desarrollo de Negocio de la CUN, Íñigo Goenaga.
“Uno de los desafíos en esta área es conseguir atender a los pacientes en su idioma, ya que los matices en el lenguaje son muchas veces importantes en las consultas médicas”
Por eso, la clínica ha ido optimizando sus servicios dirigidos a este segmento, sobre todo para “ajustar tiempos y ser flexibles con el horario de los pacientes o materializar una gama de chequeos según las necesidades específicas” de cada compañía. Un camino que cogió impulso en 2018 con el aterrizaje en Madrid, donde un “número importante” de empresas se acercaron para conocer la oferta de chequeos. Finalmente, con la irrupción de la pandemia, la colaboración que la CUN desarrolló con compañías de Navarra y la capital española permitió que se conocieran sus servicios corporativos de forma más extendida, al tiempo que también crecía la costumbre de ofrecer estos beneficios en la Comunidad foral.
Hoy, la clínica tiene acuerdos en esta línea con unas sesenta empresas, de las que más de veinte son navarras. “En la Comunidad foral, los demandantes de estos servicios, a los que acuden también firmas de La Rioja y País Vasco, son pymes en las que la decisión la toma de manera individual su propietario con el objetivo de cuidar a sus directivos más cercanos. Mientras tanto, en Madrid es más común atender a grandes compañías y multinacionales, donde el proceso está más racionalizado y es pilotado por los departamentos de recursos humanos”, señala Goenaga.
A grandes rasgos, la Unidad de Chequeos gestionó 7.245 chequeos en sus dos sedes durante el curso 2022-2023, de los que 381 (5,26 %) fueron pacientes extranjeros. En este último grupo se encuentra el perfil del empresario que, con ocasión de una visita turística a España, acude a la entidad. En este sentido, el 50 % de los foráneos proceden de Latinoamérica, el 40 % de Europa y el 10 % restante provienen de otros territorios: “Uno de los desafíos en esta área es conseguir atender a los pacientes en su idioma, ya que los matices en el lenguaje son muchas veces importantes en las consultas médicas”.
HACIA LOS PROGRAMAS DE SALUD
El siguiente objetivo para la CUN dentro de esta línea es “convertir los acuerdos para chequeos puntuales en programas de salud” para las empresas. “Ya tenemos algunas que han optado por servicios muy especializados como la secuenciación y el estudio del genoma con el objetivo de personalizar los chequeos médicos. Sabemos que los genes nos pueden dar información valiosa sobre las enfermedades a las que tiende una persona, algo que luego utilizamos para generar un examen integral a medida”, ejemplifica el director de Desarrollo de Negocio de la CUN.
Así mismo, la clínica ya se encuentra trabajando en las nuevas demandas que ha identificado entre los empresarios que acuden a sus servicios. Así, en los últimos años sobresale cada vez más un perfil de directivo mayor de 50 años y que, al mismo tiempo, practica deporte de forma habitual. “Muchos son auténticos fanáticos del running que corren maratones o medias maratones, y sus preocupaciones tienen que ver con su rendimiento deportivo. Así que consultan con su médico el plan de entrenamiento o los umbrales del ácido láctico”, agrega Goenaga.