Para Xabier Muriel, de 41 años, el deporte es una forma de entender la vida. De hecho, lo practicaba desde niño: fútbol, pelota… Pero fue el ciclismo el que lo cautivó y formó a nivel personal. “Un deporte agonista como el ciclismo te enseña que la vida no es una línea recta en progresión”, subraya a Capital Sport.
Su currículum así lo atestigua. Es licenciado en Ciencias de la Actividad Física y Salud, máster en Rendimiento Deportivo y Ciencias de la Actividad Física, entrenador nacional de ciclismo, especialista en biomecánica y está a punto de defender su tesis doctoral sobre el rendimiento en el ciclismo. Un tema sobre el que lleva años investigando. “La formación no puede parar”, defiende convencido. Su energía para afrontar varios proyectos a la vez ha sido una constante en su vida: “Yo mismo me sorprendo cuando miro atrás. Ha sido mucho trabajo, pero hay tiempo para todo”.
“Un deporte agonista como el ciclismo te enseña que la vida no es una línea recta en progresión”
Muriel pronto tomó conciencia de que, pese a su pasión por el ciclismo, nunca sería lo suficientemente bueno para convertirse en deportista de elite. Por eso se formó para consolidarse como un gran preparador. En 2008, formó parte del equipo de Leire Olaberria, ganadora de una medalla de bronce en la modalidad de ciclismo en pista durante los Juegos Olímpicos de Pekín. Ese carácter inconformista lo empujó a seguir creciendo y, con 23 años, fundó junto a tres socios una empresa de gestión de centros deportivos.
La compañía creció de manera exponencial y llegó a tener 300 empleados. Así, durante varios años, Muriel compaginó la dirección deportiva con la gestión de su empresa, lo que le obligaba a desplazarse continuamente desde Pamplona, donde residía con su mujer, hasta el País Vasco, donde se encontraba la sede de la firma: “No tenía vida. Además, daba clases y estudiaba”. Aquella vida a contrarreloj lo alejó un poco del ciclismo, pero en 2014 decidió ponerle fin y se desvinculó de la empresa.
SIEMPRE EMPRENDIENDO
En 2015, “contradiciéndose” a sí mismo como él dice, volvió a emprender. Esta vez fue en Pamplona, cerca de su mujer y sus hijos, donde fundó BioZiklik, un centro de entrenamiento y biomecánica profesional situado en Ansoáin. Muriel y su equipo ofrecen entrenamientos personalizados de diversos niveles. En concreto, el estudio biomecánico se basa en el análisis de la posición del deportista sobre la bicicleta, ya sea de carretera, contrarreloj o BTT, para lo que Muriel tiene en cuenta una serie de parámetros que inciden directamente en la seguridad, confort y óptimo aprovechamiento de las capacidades del ciclista.
“Mi perfil atípico puede aportar mucho al Movistar Team. Soy un friki de los datos, pero es importante escuchar las sensaciones del deportista. Hay que buscar el equilibrio”
Esta labor es posible gracias a un sofisticado sistema de cuatro cámaras de grabación en 3D (STT), colocadas de forma estratégica alrededor de una bicicleta acoplada a un rodillo, con las que graba al ciclista mientras pedalea. Las imágenes le permiten analizar los ángulos corporales, la asimetría y eficiencia de pedalada. Además, recientemente, Muriel ha ampliado su equipo y sus instalaciones y cuenta con un servicio de fisioterapia y nutrición deportiva.
Por su centro han pasado importantes deportistas de elite, cuyo nombre no puede desvelar por motivos de confidencialidad. Pero asegura que algunos han ganado etapas del Tour o el Giro, así como competiciones importantes. Sin embargo, entre sus clientes hay perfiles de lo más variado: opositores a policía foral, municipal y bomberos; deportistas apasionados, que se preparan para triatlones; o personas que simplemente quieren perder peso y estar en forma. Pero, para él, todos son igual de importantes. Quizás porque estamos ante un profesional muy meticuloso. “Cada vez que alguien se sienta en mi consulta, estamos creando nuevas ilusiones, nuevos retos. Es muy gratificante”, remarca. En paralelo a su negocio, fue director deportivo en los equipos Euskadi-Murias (2015-2019) y Caja Rural-Seguros RGA (2020-2021).
Muriel siente que ha llegado a la cima, tras unos años que le han exigido estar en plena forma física y mental: “El ciclismo te enseña a base de golpes. Hay que tener algo de sufridor para elegir este deporte”. Han sido largas horas de entrenamiento, estudio incesante… “He cumplido todos mis sueños”.
Su reciente fichaje como director deportivo y experto biomecánico del Movistar Team ha sido el colofón a una brillante carrera, gestada en la trastienda de grandes equipos. “Mi perfil atípico puede aportar mucho al equipo. Soy un friki de los datos, pero también he sido ciclista. Y creo que es importante escuchar las sensaciones del deportista y buscar el equilibrio”, remata.
Entra aquí para leer más noticias de Capital Sport.