Un bocado crujiente y grasiento por igual que, al ser acompañado de un pedazo de pan, hace danzar las papilas gustativas. Estas finas tiras de tocino, procedentes del cerdo, son fritas hasta alcanzar una dorada y tentadora textura. Y, posteriormente, se sirven como el aperitivo por excelencia en muchas partes del país. Aunque su cuna gastronómica es la comunidad de Castilla y León, ha extendido su influencia a múltiples rincones de la Península, y Pamplona no es la excepción.
En este recorrido, descubriremos diez locales en la capital que sirven unos torreznos de categoría, capaces de rivalizar con los de Soria, y para encontrarlos nos hemos basado en la guía del portal gastronómico Restaurant Guru.
La ruta comienza en la calle Emilio Arrieta 9, en el restaurante El Burladero, donde podrás disfrutar de auténtica cocina española. Destacan sus «torreznos de lujo», elogiados en la guía gastronómica. Con una calificación de 4.1 en Google, es una excelente opción en el centro de la ciudad.
En el número dos, encontramos La Servicial Vinícola, una bodega tradicional cerca de la Iglesia de San Ignacio. Ofrece auténticos almuerzos con platos como huevos, callos rellenos, morcilla y torreznos. Destaca por su ambiente acogedor y decoración encantadora, y tiene una puntuación de 4.3 en Google.
Continuamos en Zizur Mayor para descubrir los apreciados torreznos en Garnatxa Ardotegia, donde también se destacan por su selección de vinos. El servicio cercano y cuidadoso y los precios razonables hacen de este lugar una elección acertada, respaldada por su calificación de 4.5 en Google.
En la calle San Fermín 55, el Bar Itziar deleita con sus «riquísimos torreznos». Este establecimiento ofrece cocina tradicional, con una destacada tortilla de patata. Los clientes elogian la amabilidad del personal y el eficiente servicio, con una calificación de 4.3 en Google.
En Serafín Olave, la cervecería Pecado Ibérico invita a sumergirse en el mundo de los barriles de cerveza, acompañados de «sabrosos torreznos».
Seguimos hasta el Bar-Restaurante Manolo, en la calle Engracia, 7, conocido por sus torreznos de calidad y equilibrados menús a buen precio. Ha conseguido una puntuación de 4 en Google.
El Bar Taula del Parque de los Enamorados es un paraíso para los amantes de los torreznos. Además, sus deliciosas empanadas son un acierto seguro.
Madison Urban Food, en calle Esquíroz, 20, ocupa la octava posición gracias a sus exquisitos torreznos y una experiencia culinaria centrada en la cocina mediterránea. El personal se destaca por su creatividad y eficiencia en el servicio.
De vuelta al centro de la ciudad, en la singular Calle Estafeta, Chez Evaristo deleita con unos «torreznos de escándalo». Sus pintxos son irresistibles y el café servido por los camareros es el colofón perfecto para el aperitivo.
Para culminar la ruta, nos trasladamos a la calle Manuel de Falla, 23, donde el Bar Bodegas Leyre Restaurante te espera con sus «crujientes torreznos» y su especialidad: la tarta de queso.
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