La línea eléctrica entre Muruarte y Tierra Estella, así como la nueva subestación de Tierra Estella 220 kV, han obtenido la declaración de impacto ambiental (DIA) favorable por parte del Gobierno de Navarra. Se trata de dos infraestructuras que impulsa Red Eléctrica -filial de Redeia- y que permitirán a las empresas «contar con la garantía de suministro necesaria para poder desarrollar su actividad industrial, facilitando el crecimiento económico de la zona».
La obtención de la DIA, según apuntó la compañía este lunes, «supone un paso decisivo en la tramitación del proyecto». Anteriormente, el Ejecutivo navarro lo había declarado de interés foral, lo que supuso «un impulso preferente y urgente a los trámites administrativos por parte de todas las administraciones concernidas de cara a agilizar el desarrollo de la nueva línea de suministro».
Red Eléctrica, que invertirá en estas nuevas instalaciones 18 millones de euros, realizó un trazado para la nueva línea de 220 kV. Las instalaciones «también servirán para la evacuación de nuevos proyectos de renovables, ya que es una zona con alto potencial eólico, tal y como destaca el Plan Energético de Navarra».
La compañía proyecta una conexión de esta línea eléctrica con el nuevo eje Navarra-País Vasco de 400 kV.
Por otra parte, la compañía proyecta una conexión de esta línea eléctrica con el nuevo eje Navarra-País Vasco de 400 kV, que «vendrá a reforzar la robustez del sistema eléctrico, potenciando la integración de energía renovable y sirviendo de eje estratégico para la nueva interconexión con Francia a través del golfo de Vizcaya.
OTRAS INSTALACIONES
Además de las instalaciones mencionadas, la planificación 2021-2026 -aprobada por el Consejo de Ministros y de ejecución obligatoria para Red Eléctrica- contempla la ampliación de la subestación de Sangüesa 220 kV, con el fin de «habilitar la conexión de un gran consumidor que requiere de grandes volúmenes de energía, facilitando su mantenimiento y actividad industrial, fundamental para la estabilización de empleo y la lucha contra la despoblación«.
Por otro lado, la planificación prevé de cara a 2025 un eje adicional entre Navarra y Aragón, «que supondrá la construcción de un doble circuito entre La Serna (Tudela) y Magallón (Zaragoza) y el aumento de capacidad de varias líneas de 220 kV en la zona, reforzando la conexión eléctrica de dos zonas del sistema eléctrico con muy alta implantación de energía renovable e importante desarrollo industrial».
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