El oxígeno es el principal alimento del ser humano. De hecho, las personas respiran aproximadamente 23.000 veces al día. Pero, en la mayoría de los casos, este proceso se realiza de manera incorrecta, impidiendo que el aire se expanda debidamente por los pulmones y que el organismo se nutra de forma adecuada. Un problema que trata de evitar el excapitán de Osasuna Oier Sanjurjo.
Tras retirarse el año pasado en el AEK Larnaca, el navarro es, desde mayo de este año, instructor avanzado de Oxygen Advantage, una empresa especializada en respiración funcional y que fue creada por Patrick McKeown. Esta compañía, con sede en Irlanda, ofrece cursos basados en el método buteyko, una técnica dirigida a personas con afecciones o patologías respiratorias y que el irlandés ha adaptado al rendimiento deportivo. En la actualidad, cuenta con 3.000 profesores repartidos en más de cincuenta países; ha sido noticia en The New York Times, CNN o TEDx; y el promotor de la firma ha publicado hasta diez libros en dieciséis idiomas diferentes relacionados con su metodología.
“Partimos de unas pruebas iniciales para obtener información sobre el usuario. Y, a lo largo del curso, hacemos una serie de ejercicios y sesiones presenciales, en los que vemos su evolución. Son tareas sencillas, que no llevan mucho tiempo”
De esta manera, Sanjurjo ofrece cursos de cuatro a seis semanas, donde enseña a respirar por la nariz de manera lenta, sutil y a través del diafragma, “el principal músculo respiratorio del cuerpo”. En estas clases se trabajan tres pilares: la bioquímica, la forma que interactúan los gases en el proceso de respiración; la biomecánica, es decir, aprender a respirar a través del diafragma; y la psicofisiológica, ya que, para bien o para mal, un sentimiento o una emoción puede alterar el proceso de inhalación y exhalación.
“Partimos de unas pruebas iniciales para obtener información sobre el usuario. Y, a lo largo del curso, hacemos una serie de ejercicios y sesiones presenciales, en los que vemos su evolución. Son tareas sencillas, que no llevan mucho tiempo y que fácilmente se pueden incorporar a tu día a día”, detalla el exfutbolista a Capital Sport.
“UN PROCESO TRAUMÁTICO”
Sanjurjo descubrió la respiración funcional cuando afrontaba su retiro. En sus últimos años en Osasuna, comenzó a reflexionar y gestionar la nueva etapa que tenía por delante. Aunque a priori colgar las botas le generaba cierta ansiedad, según se iba acercando el momento lo fue tomando con mayor naturalidad. “Tuve la gran suerte de que excompañeros míos me avisaron de que era un proceso ciertamente traumático. Es importante que, desde los clubes, también haya una figura que ayude a los jugadores en ese sentido. Uno está acostumbrado a competir a alto nivel, pero de repente llegas a un momento en el que se te abre un abanico de posibilidades y, si no tienes las cosas claras, te puedes ver un poco perdido”, relata.
Una situación que el estellés intentó evitar. Para ello, tras su periplo por Chipre, decidió disfrutar del verano y, en septiembre del año pasado, tomarse un mes de reflexión. En su última temporada, ya había descubierto la ciencia de la respiración, por lo que investigó un poco más hasta que, en octubre, descubrió Oxygen Advantage.
“Desde la calma, me escuché y estuve conmigo mismo. Creo que es el mejor escenario para poder tomar decisiones acertadas. Y así fue. Encontré interesante este tema. Observé que había estado quince años exigiendo a mis vías respiratorias y nunca había recibido ningún tipo de instrucción. ¿Cómo puede ser que un jugador caliente sus músculos y su organismo, pero a la respiración no le haga ni caso? Me pareció algo que tenía sentido y que merecía mi atención”, revela.
PRINCIPALES VENTAJAS
La respiración funcional permite regular y oxigenar adecuadamente todos los órganos de una persona. Además, Sanjurjo asegura que mejora la calidad del sueño, reduce la fatiga e incrementa la vitalidad. De esta forma, al nutrir de forma óptima los músculos, el deportista puede evitar lesiones; rendir mejor; y, tras una prueba o competición, optimizar su recuperación.
“Estuve quince años exigiendo a mis vías respiratorias y nunca recibí ningún tipo de instrucción. ¿Cómo puede ser que un jugador caliente sus músculos y su organismo, pero a la respiración no le haga ni caso?”
Por otro lado, al trabajar el diafragma, se regula el nervio vago, lo que permite mandar señales de calma y tranquilidad al cerebro. Un aspecto que Sanjurjo experimentó en primera persona: “Si oxigenas bien el cerebro, puedes tener mejores pensamientos, ser más optimista y tener las cosas claras. Así mismo, al estar atento a cómo respiras, eres más consciente del presente y tienes más capacidad de concentración en las cosas que haces. Ahora no reacciono con tanta impulsividad a estímulos que me irritan y, a nivel deportivo, hago ejercicios y entrenamientos que ni por asomo podía hacer antes”.
Con este nuevo proyecto, el navarro ha aunado dos pilares fundamentales de su vida: el deporte y la enseñanza, ya que estudió el Grado de Magisterio cuando era futbolista. “Me he dado cuenta de que es algo que ha venido para quedarse en mi vida. De hecho, ya no se me ocurre respirar por la boca. También estoy participando en la ikastola de mis hijos. Estoy en la junta, entretenido en la comisión y echando un cable siempre que puedo. En ningún momento he sentido que se me caían las paredes encima”, resalta el excapitán rojillo.