Mucho antes de que ChatGPT irrumpiera en el mercado, el campo de la Inteligencia Artificial (IA) ya estaba experimentando una explosión mundial de esfuerzos comerciales e investigación. A principios de la década de 2010, comenzaron a aparecer los primeros asistentes de voz para móviles y, en 2018, empezó a asentarse el uso de la IA en distintas industrias. Todo ello llevó posteriormente al lanzamiento de programas low code, que han permitido a usuarios sin apenas formación técnica desarrollar de forma intuitiva nuevas aplicaciones de esta tecnología. En vista de su potencial presente y futuro, la Universidad de Navarra decidió poner en marcha en 2020 el Instituto de Ciencia de los Datos e Inteligencia Artificial (Datai) en Pamplona con un objetivo: aglutinar los esfuerzos del centro educativo en esta materia.
Tras cuatro años de funcionamiento, el instituto ya cuenta con una sede propia en las instalaciones de la universidad, donde trabaja un equipo compuesto por «más de veinte personas» que ha ido creciendo en el tiempo. Este espacio pretende también facilitar la colaboración y la interdisciplinariedad entre sus «más de 110 personas investigadoras» adscritas, asociadas o invitadas.
El equipo investigador vinculado a Datai ya participa en un proyecto europeo, dos nacionales y seis de ámbito autonómico
«Somos un centro tecnológico y de investigación que trabajamos para ser referente en el sector a nivel nacional y mundial, así como para transferir nuestro conocimiento a la sociedad», explica Iván Cordón, director de Innovación y Transferencia Tecnológica en Datai. Precisamente, el instituto ya colabora en proyectos a través del Sistema Navarro de I+D+i (SINAI), coordinado por ADItech, ya que la Universidad de Navarra es uno de sus agentes.
Al mismo tiempo, sus objetivos se materializan en tres pilares sobre los que se estructura el trabajo del instituto. «En primer lugar, ofertamos formación tanto a estudiantes y profesionales como a empresas en formato in company. Al mismo tiempo, tenemos una línea vinculada a la investigación, que se materializa a través de tesis industriales. En estos momentos, dentro de la alianza estratégica que mantenemos con BBVA, las primeras nueve tesis industriales están culminando», celebra Cordón.
Por último, el Datai también gestiona certificaciones profesionales en ciencias de datos, un tipo de formación muy demandada por las empresas: «Hay muchos perfiles profesionales que se han dedicado a la minería de datos, que es como antes se llamaba a la ciencia de datos. Con todo el auge de la IA, estas personas han tenido que hacer un reskilling para actualizar su forma de trabajar. Hemos formado a más de cien personas por esta vía con un gran beneficio para sus firmas porque, como parte de la certificación, tienen que desarrollar un producto que usualmente mejora con nuestra retroalimentación».
PROYECTOS COLABORATIVOS
En su misión de transferencia de conocimiento e innovación, los investigadores adscritos a este centro de investigación participan en un proyecto europeo, dos nacionales y seis de ámbito autonómico. Por ejemplo, colabora desde 2022 en Build Twin, que investiga tres gemelos digitales para mejorar la climatización en un edificio del campus. La iniciativa está coordinada por ADItech y financiada por el Gobierno de Navarra en la convocatoria de ayudas a centros tecnológicos y organismos de investigación para la realización de proyectos de I+D colaborativos.
Así mismo, el instituto de la Universidad de Navarra coordina el programa de aceleración SofIA, que celebró su primera edición en 2022. En concreto, preseleccionó a cuatro startups entre más de 300 que respondían a los retos de las empresas tractoras del programa: Cinfa, Carrefour, Seguros AXA y BBVA. «Aún ahora, algunas de ellas han seguido colaborando con estas grandes firmas para implantar sus soluciones, pero a nivel internacional», añade Cordón. Datai sigue apoyando el emprendimiento a través de otro proyecto específico del centro educativo: Innovation Factory.
A todo ello se suman nueve iniciativas que está desarrollando «de la mano de seis empresas» nacionales e internacionales, pertenecientes a sectores como las energías renovables o la comunicación. Por ejemplo, el Polo IRIS premió el pasado mes de noviembre un proyecto colaborativo entre el Datai y la firma Human AI, que pretendía crear una solución para caracterizar la personalidad y las habilidades socioemocionales a partir de textos escritos: «Seguimos trabajando para ampliar nuestras colaboraciones con empresas. De hecho, entre tres y cuatro firmas están interesadas en trabajar con nosotros, y estamos ultimando los detalles para hacerlo».
OBJETIVOS DE 2024
Este año, el instituto de la Universidad de Navarra busca consolidar su estructura y enriquecer su reputación. «Entre nuestras prioridades se encuentra el impulso a nuestra línea de investigación enfocada en el impacto de la IA en las empresas a través de la ética. Esta tecnología plantea aún muchas incertidumbres, por lo que, en línea con el espíritu humanístico de la universidad, desde Datai queremos impulsar la investigación en torno a cómo aplicar de forma ética las soluciones actuales en los procesos administrativos, productivos y logísticos de las compañías», detalla su director de Innovación y Transferencia Tecnológica.