La localidad de Jaurrieta alberga un proyecto novedoso de emprendimiento en el Pirineo navarro, que pretende «revitalizar la zona». Se trata de un consorcio empresarial, coordinado por el navarro Gonzalo Celay y formado por Pentabiol, Caviar Pirinea y el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA). Además, cuenta con el acompañamiento de la sociedad pública INTIA.
Según vaya avanzando la legislación, su objetivo es crear una compañía centrada en la cría y comercialización del gusano Tenebrio molitor, que posee abundantes propiedades nutritivas y del que se pueden obtener productos alimenticios. De hecho, la primera etapa de esta iniciativa, ya en marcha, se está focalizando en la detección de barreras y requisitos clave para su desarrollo, así como en la recopilación de información sobre otras propuestas alimentarias con insectos.
El proyecto como tal se encuentra en fase de pilotaje y cuenta con una hoja de ruta que, a futuro, espera generar productos primarios y biotecnológicos a partir de esta especie de gusano. Para ello, la coordinación recae sobre Celay, Pentabiol garantizará la sanidad y el bienestar de los animales, Caviar Pirinea se encargará de la validación de mercado y de los resultados de las pruebas piloto para controlar la alimentación y el crecimiento de los gusanos, CNTA desarrollará nuevas opciones de ingredientes alimentarios, e INTIA asesorará en materia normativa y supervisará el proceso de establecer la actividad empresarial.
«Al tratarse de un proyecto piloto de innovación, tendremos que demostrar su viabilidad operativa y de mercado. Y como el gusano harinero ya existe como proteína alternativa, debemos trabajar para aportar un valor diferencial», resalta a Navarra Capital el responsable de Innovación de Caviar Pirinea, Diego Mendiola. De esta manera, el objetivo final es demostrar la viabilidad técnica, económica, regulatoria y medioambiental de la prueba para generar actividad económica, empleos directos e indirectos y nuevos productos alimentarios en la zona de Jaurrieta.
OFICINA EN CEIN
En este sentido, el consorcio empresarial también está poniendo el foco en solventar varias problemáticas advertidas por los vecinos del valle de Salazar. «Como está lejos de grandes núcleos urbanos, Jaurrieta carece de instalaciones modernas. También sufre una dispersión geográfica muy potente y la falta de relevo generacional», constata Celay. Por ello, el consorcio gestiona ya una oficina de mercado en las instalaciones del Centro Europeo de Empresas e Innovación de Navarra (CEIN) para estar más cerca de agentes, clientes, proveedores y la Administración pública navarra.
El proyecto piloto está cofinanciado por el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (FEADER) del Gobierno de Navarra y por el Fondo Europeo Agrícola de Garantía (FEAGA). Además, está adscrito al fondo de la Política Agraria Común (PAC) y, en concreto, a las ‘Ayudas a proyectos piloto dentro del programa de desarrollo rural’ del Ejecutivo navarro.