Aún abrumada por los cientos, quizá miles, de llamadas, felicitaciones y entrevistas que ha tenido que atender estas semanas, la pamplonesa Susana Vera (1974) intenta “recuperar” en los últimos compases de este insólito mes de mayo la normalidad para con su vida y su profesión. “Todavía estoy como en una nube. No me lo creo, es una emoción tremenda. Pero necesito concentrarme. Volver a la rutina de mi trabajo”, exclama entre risas por teléfono. Y lo cierto es que razón no le falta. Desde que saltara la noticia de la concesión del prestigioso Premio Pulitzer, en la categoría Breaking News, a su ya inmortal fotografía de los disturbios de Hong Kong de 2019, la vida de esta discreta fotoperiodista no ha vuelto a ser la misma.
Ni lo será nunca jamás. Ella bien lo sabe, aunque guarde silencio. La caprichosa historia ha querido que sea la primera mujer española en lograr el galardón periodístico más importante del mundo. Con una espectacular imagen, por cierto, que le acompañará para el resto de sus días.
Porque la fotografía con la que Vera ha ganado el Pulitzer habla por sí sola. Refleja, en un solo instante, la brutalidad de la represión policial vivida en Hong Kong el pasado año, cuando miles de manifestantes se lanzaron a las calles del distrito del Almirantazgo para exigir la retirada del proyecto de ley de extradición a China. La instantánea tiene fecha: 29 de septiembre de 2019; y un encuadre tan perfecto como aterrador: congela el momento en el que un grupo de agentes antidisturbios azota a un grupo de jóvenes, a los que arrastra por los suelos hasta detenerlos. Todo ello enfocado mientras la pamplonesa luchaba al mismo tiempo por su seguridad, con una “visión reducida” que le imponía su propia máscara de gas.
Practicando la vieja escuela de Robert Capa, para quien “una foto no es suficientemente buena si no te encuentras suficientemente cerca”, la navarra quiso reflejar en la galardonada imagen “el caos y la confusión”. “Recuerdo el momento. Mientras la policía de Hong Kong disparaba gases lacrimógenos contra los manifestantes antigubernamentales, los antidisturbios aparecieron en la niebla y arrastraron a decenas de ellos. Me acerqué cuanto pude para poder retratar los rostros, porque son los rostros los que muestran las emociones“, ha detallado en multitud de entrevistas estos últimos días.
Porque como fotoperiodista, Vera siempre defiende la siguiente máxima: “La clave de una buena imagen está en los rostros. Es lo que hace que la gente documente esa situación”. Y lo afirma quien, en principio, tenía como objetivo vital trabajar en prensa escrita. Pero tras acabar la carrera (doble licenciatura en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad de Navarra) le surgió la oportunidad de inscribirse en un curso de iniciación al fotoperiodismo que no desaprovechó. ¡Para nada! Esta disciplina, junto a siete años de trabajo en los Estados Unidos como fotógrafa de periódicos, definirían para siempre su carrera. Un futuro, desde hace años presente, con el que retornó poco después a España para incorporarse al equipo de la agencia Reuters en Madrid, donde se ha dedicado principalmente a la fotografía de prensa y la cobertura de agenda diaria. De hecho, siempre modesta. Vera se autodefine como “fotógrafa al uso”, tan pronto cubre un partido de fútbol como una sesión parlamentaria.
Pero el pasado año 2019, Reuters le ofreció la oportunidad de viajar a Hong Kong junto a un equipo de fotoperiodistas para cubrir los graves disturbios, que ya eran portada en las televisiones de medio mundo. Una oportunidad que, sin estar acostumbrada a trabajos tan guerreros, no podía dejar escapar. Y, sin duda, ha dado sus frutos. El gran trabajo del staff de fotógrafos de Reuters dejó instantáneas para el recuerdo, que en esta última edición de los Pulitzer han sido reconocidas.
De hecho, el premio ha recaído para una serie de veinte fotografías realizadas por once profesionales de la conocida agencia. ¿Sus argumentos? “Las amplias e iluminadas fotografías de Hong Kong mientras los ciudadanos protestaban por la violación de sus libertades civiles y defendían la autonomía de la región del Gobierno Chino”. Un máximo reconocimiento para quien ya con 19 años, siendo estudiante de Periodismo, apuntaba maneras. “En una ocasión removió Roma con Santiago para entrevistar a Phil Collins. No había nada que se le resistiera, siempre ha destacado por su energía imparable”, afirman quienes mejor conocen a Susana Vera. La pamplonesa con mirada de Pulitzer que, en plena pandemia del coronavirus, reivindica con fuerza el papel de la fotografía: “Con más imágenes sobre los estragos del Covid-19, todos estaríamos más concienciados”.