Las empresas están adoptando planes para reducir su dependencia derivada de los combustibles fósiles y, en ese sentido, el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de descarbonización industrial nace precisamente con el objetivo de apoyarlas en ese camino. Así, las compañías navarras se han sumado a este proceso, lo ven «como una oportunidad» y están invirtiendo en tecnologías para reducir las emisiones de CO2. Pero, al mismo tiempo, subrayan que no debe ser un factor que frene su competitividad. Estas son algunas de las ideas que se debatieron este miércoles en la jornada ‘Cómo descarbonizar la industria ganando competitividad’, organizada por la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Servicios de Navarra con el patrocinio de Iberdrola.
En la apertura, Javier Taberna, presidente de Cámara Navarra, resaltó la importancia de «hacer posible que la descarbonización de la industria sea una realidad». «En Navarra, las empresas ven este proceso como una oportunidad, más que como una amenaza, y saben que la sostenibilidad es sinónimo de diferenciación».
Por su parte, Luis Colunga, comisionado especial para el PERTE de descarbonización industrial del Ministerio de Industria y Turismo, recordó que este Proyecto Estratégico «nace con el compromiso de apoyar a la industria en su transición hacia modelos y procesos más respetuosos con el medio ambiente y de contribuir al objetivo de neutralidad climática en 2050».
El proyecto supone inversión pública prevista de 3.100 millones de euros con el fin de movilizar hasta 11.800 millones de euros de inversión total. También ensalzó que las inversiones en descarbonización y modernización de la industria manufacturera impulsadas a través de este PERTE permitirán incrementar la competitividad del sector en alrededor de un 10 % y supondrán la creación de unos 8.000 empleos. En este momento, ya se han presentado 120 proyectos. «Hay desconcierto al apoyar a empresas que tienen resultados positivos y beneficios, pero estamos obligando a la descarbonización y a realizar inversiones importantes. Así que debemos garantizar la calidad y competitividad de las empresas y, en muchos casos, como el caso del hidrógeno verde, se puede incrementar el precio un 30 o 40%».
LAS REDES ELÉCTRICAS
Durante su intervención, Eduardo Ryan, delegado de Iberdrola en Navarra y jefe de zona de i-DE Navarra, remarcó que las redes eléctricas son imprescindibles para la descarbonización y electrificación: «Las inversiones actuales son insuficientes. Necesitamos poder realizar inversiones anticipadas y aumentar el límite de inversión, para lo cual es necesario un marco regulatorio que fomente la inversión en redes», agregó.
Eduardo Ryan: «Necesitamos poder realizar inversiones anticipadas y aumentar el límite de inversión, para lo cual es necesario un marco regulatorio que fomente la inversión en redes»
En la mesa redonda, Santiago Osés, director general de la planta de Rockwool en Caparroso; Jesús Calavia, director general de Operaciones de Viscofan; Eduardo Glaría, director regional de Ingeniería en General Mills; y Erlantz Egidon, responsable de Proyectos Estratégicos en Kaiku, compartieron cómo son los proyectos de descarbonización que están implementando en sus empresas. Lo hicieron moderados por Alberto Pérez de Ciriza, responsable comercial en Navarra de Iberdrola.
En sus intervenciones, coincidieron en la importancia de «mejorar los procesos y hacerlos más sostenibles y circulares», reduciendo al máximo las emisiones de CO2. Sin embargo, como precisó Calavia, la descarbonización «no puede ser un factor de falta de competitividad». «Nos dicen que nos descarbonicemos, pero no nos dicen cómo y necesitamos la ayuda del Gobierno. Además, en muchos casos nos falta la materia prima, como ocurre con el hidrógeno verde», defendió.
La jornada fue clausurada por Esperanza Aristu, directora de Transición Energética del Gobierno de Navarra.
