El 31 % del gas natural que emplea Volkswagen Navarra se destina a la central térmica que permite climatizar la empresa. El resto se emplea en la producción. Al analizar estos datos, la fábrica de Landaben se dio cuenta de la importancia de reducir ese primer porcentaje con el objetivo ser más eficiente y también disminuir las emisiones de CO2. Precisamente, de esa necesidad nació en 2018 la iniciativa Ai-Factory.
Se trata de un proyecto colaborativo coordinado por ADItech, que a su vez es coordinador del Sistema Navarro de I+D+i (SINAI), y que cuenta con financiación del Gobierno foral. Y se ha materializado en un prototipo de un gemelo digital, que recrea de forma virtual el sistema de climatización industrial. Ha sido desarrollado por la Asociación de la Industria Navarra (AIN) y, según traslada Pilar Herrera, coordinadora del grupo Sistemas Inteligentes, ha tenido muy buena aceptación. «Otras empresas nos han llamado a raíz de conocer el proyecto Ai-Factory», avanza.
El 85 % de las empresas españolas quiere disminuir sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Esta expectación coincide con el creciente interés de las compañías por ser más eficientes y reducir sus emisiones de CO2. De hecho, el informe ‘Net Zero Economy Index 2021’, que cada año elabora PwC, revela que España disminuyó la intensidad de sus emisiones de carbono un 7,9 % en 2020. Esta cifra sitúa a nuestro país como el tercero de los que pertenecen al G20 que más ha avanzado en esta materia, solo por detrás de México e Indonesia.
De dicho informe también se desprende que el 85 % de las firmas españolas quiere disminuir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Además, otro estudio elaborado por el Pacto Mundial de Naciones Unidas y Accenture Strategy destaca que el 44 % de los CEO encuestados ven un futuro de emisiones cero dentro de sus empresas en los próximos diez años.
Precisamente, Ai-Factory puede convertirse en una oportuna herramienta para alcanzar estos objetivos. De hecho, el prototipo ya ha demostrado «ahorros significativos» de gas y reducción de las emisiones de CO2.
Un gemelo digital es una representación virtual de un objeto o sistema físico. Utiliza datos en tiempo real, fórmulas y otras fuentes para permitir el aprendizaje, el razonamiento y la recalibración dinámica que permite una mejor toma de decisiones. A ojos de Herrera, lo que diferencia este proyecto de otros similares radica en que el gemelo digital está «totalmente basado en datos».
Por el contrario, los sistemas ya existentes trabajan con fórmulas. «Estas implican dibujar todas las naves, modelizar las calidades constructivas, meter física termodinámica, fluidos. Y es muy complejo», comenta. Así, incide en que su propuesta permite ahorrar «tiempo y conocimiento».
ASÍ NACIÓ LA IDEA
El proyecto surgió cuando el grupo de Energía de AIN acudió a la fábrica de Landaben para presentar una oferta de una auditoría energética. «En aquella conversación, nos contaron que tenían un problema con la climatización industrial», rememora Herrera. En concreto, se gestionaba todavía a mano.
Pilar Herrera: «No se trata de automatizar el proceso, sino de que el gemelo digital sirva de ayuda a la hora de tomar decisiones».
«El equipo de Volkswagen buscaba ayuda para saber cuándo encender la calefacción de forma más eficiente», especifica.
En planta eran conscientes de que si la encendían muy pronto, se gastaba mucha energía. Pero si lo hacían muy tarde, corrían el riego de no alcanzar la temperatura de confort necesaria para trabajar. En ese sentido, la coordinadora del grupo Sistemas Inteligentes puntualiza que «no se trata de automatizar el proceso». Más bien, el gemelo digital pretende ser «una ayuda» para la persona responsable de tomar las decisiones.
La central térmica de Volkswagen Navarra está compuesta por cinco calderas de gas de diferentes capacidades. Por eso, lo primero que analiza el gemelo digital es la demanda de calor. Y lo hace con un horizonte temporal de 24 horas, las predicciones meteorológicas y otras variables. «Si se trabaja hay que encender la calefacción, pero si es fin de semana no», ejemplifica.
Conocer cuál es la curva de demanda resulta clave porque no solo permite decidir cuándo encender la calefacción, sino también qué calderas utilizar. En estos momentos, Volkswagen Navarra ya está poniendo la infraestructura necesaria para poder implantar el gemelo digital. Pero, además, la investigadora ve factible que, a partir de Ai-Factory, se puedan desarrollar otras herramientas similares para diferentes empresas. «No solo permite mejorar tu eficiencia, sino también tu cuenta de resultados», pone en valor.
En ese sentido, confirma que la idea del proyecto se puede trasladar a otros grandes consumidores de energía y climatización, En parte porque el conocimiento adquirido puede agilizar el proceso de desarrollo de nuevas propuestas: «Si son también de climatización, tenemos mucho trabajo hecho».