Nuestros lectores más nostálgicos recordarán cómo en cuanto la Orquesta Mondragón atacaba los primeros sones de su mítica ‘Viaje con nosotros’ en el escenario aparecía el no menos mítico Popotxo con su maletón representando a ese turista despistado que, de la mano de Gurrutxaga y sus acompañantes, recorría, entre curioso y divertido, “las hermosas historias que le vamos a contar”.
Pues bien, para disfrutar de esas ‘hermosas historias’ hoy no es necesario ni irse muy lejos ni disponer de mucho tiempo. Al contrario, los estudios nos indican que los viajes de fin de semana han crecido de un modo tan significativo que se han convertido en toda una tendencia imprescindible para aquellos o aquellas que quieren estar a lo último en todo. Por lo tanto, si los condicionantes son: el tiempo (un fin de semana) y la distancia, ¿qué alternativas nos quedan? Aquí te ofrecemos algunas.
La gastronomía, por ejemplo, es una de ellas. No no atrevemos a decir que la primera pero sí la que mejor encaja para irse un fin de semana y explorar otros lugares de una forma diferente: visitando bodegas, participando en degustaciones, conociendo chocolaterías, catando quesos o, simplemente, dejándose llevar a una cena gourmet. Los números, además, así lo verifican. Según reflejan los últimos datos (proporcionados por Weekendesk.es), este tipo de escapadas se han incrementado en un 5,85% en el último año.
Aquí, la buena noticia es que Navarra destaca por ser uno de los destinos más demandados para lo que se ha dado en conocer como las vacaciones tasting porque nadie en su sano juicio se quiere perder la Semana del Pincho, las Jornadas de Exaltación y Fiestas de la Verdura o los innumerables encuentros monográficos que se realizan vinculados a auténticas joyas de nuestra gastronomía como los espárragos, el aceite o el pimiento del piquillo.
Queda como posibles alternativas la rica oferta de Castilla y León gracias a su selecta oferta de cocina típica y vinos o, por supuesto, La Rioja y sus posibilidades en el ámbito del enoturismo que, en cierta forma, comparte también con Navarra y que representan una combinación perfecta de gastronomía y naturaleza. A todo ello hay que sumar, también, el tema económico en la medida en que el coste medio de este tipo de viajes de fin de semana se sitúa en torno a los 178 euros.
Ahora bien, si de diversión se trata, no es lo mismo planificar un fin de semana en parejita que hacerlo si tenemos niños. Para este último caso los parques temáticos se sitúan como una de las opciones preferidas por un coste medio que suele situarse en torno a los 240 euros. En este segundo tipo de escapadas las preferencias son tan variadas como las que representan Aragón con sus visitas al Acuario Fluvial de Zaragoza, o Dinopolis en Teruel; Andalucía y su Isla Mágica (Sevilla), Desierto de Tabernas (Almería) o Bioparc (Fuengirola); LoroPark (Tenerife) o, los primeros de la lista representados por Port Aventura (Tarragona), L’Oceanografic (Valencia) o el Parque Warner o Faunia (Madrid). En Navarra destacan Sendaviva e Irrisarri Land.
Llegados a este punto, está claro que hemos cubierto todas nuestras expectativas más primarias de simple y pura diversión. Sin embargo, como bien sabemos ya todos, ‘hay gente pa to’ que diría aquel y, por lo tanto, siempre habrá alguien dispuesto a ponerle un poco de aventura a su vida. Un grupo, por cierto, cada vez más numeroso en la medida en que este tipo de actividades de ocio han aumentado, según las últimas estadísticas, en un 3,5% y suponen un coste medio de unos 260 euros como mínimo.
Dentro de este paquete las alternativas son muy variadas y van desde el senderismo, el nordic walking, los paseos a caballo o la bici de montaña, para los que, dentro del abanico, se presentan como los menos arriesgados hasta los amantes de lo extremo en sus versiones barranquismo, espeleología, submarinismo, parapente o salto en paracaídas.
Tenemos, en fin, para todos los gustos y de todos los colores aunque la gran mayoría de este tipo de actividades se concentran, fundamentalmente, en la Comunidad Valenciana debido a la perfecta combinación de orografía y buen clima que permite la práctica a lo largo de todo el año. Cataluña y las islas, tanto Baleares como Canarias, pueden representar otras magníficas oportunidades para ese fin de semana ‘distinto’ que todos y todas anhelamos de vez en cuando, ¿verdad?
Por último, pensando en el tramo de seguidores menos aventurero siempre les quedará la opción de esos planes culturales que incluyen desde conciertos y representaciones teatrales hasta visitas ‘ad hoc’ a monumentos históricos, museos, catedrales y similares. La referencia en este caso la constituye Madrid al concentrar a su alrededor una de las ofertas más importantes y ricas de las que podemos disponer para todo un fin de semana.
Tras este somero repaso de propuestas, queda claro que cada vez hay menos gente que está dispuesta a no tener planes para el sábado y el domingo. Por ello podemos concluir que cuánta razón tenía el eminente filósofo chino Lin Yutang cuando afirmaba aquello de “nadie se da cuenta de lo hermoso que es viajar hasta que vuelve a casa y descansa sobre su almohada vieja y conocida”. Que ustedes lo disfruten…. A poder ser, el próximo fin de semana.