Nacido en Alsasua hace 45 años, Juan Mari Guajardo ha sido la voz de La Vuelta a España desde el año 1997. Admirador confeso de Miguel Induráin, es una de las personas más queridas en el pelotón. Guajardo se atreve con todo: eventos del mundo del motor, atletismo, traineras, fútbol playa… Pero su mayor pasión es el ciclismo.
1. Su primer recuerdo como ‘speaker’.
El Campeonato de Euskadi de Ciclocross en Alsasua, en 1996.
2. Su padre fue periodista deportivo. ¿Qué aprendió de él?
El cariño por hacer las cosas bien, por preparar todo e ir a cada carrera como si fuese un Campeonato del Mundo.
3. ¿Cuándo se dio cuenta de que su camino profesional era rentable y podía vivir de ser ‘speaker’?
A partir de 1997, cuando hice La Vuelta a España. Ahí vi que ese podía ser mi camino.
4. Profesionales que trabajen solo de ‘speakers’ no hay tantos en España. ¿Se considera un privilegiado?
Que se dediquen profesionalmente a ello, conozco muy poquitos. Así que me siento un privilegiado. Ahora que estamos en esta situación de pandemia, es cuando estoy valorando la suerte que tengo y me estoy dando cuenta de lo mucho que me gusta mi trabajo.
5. ¿En qué medida el coronavirus ha frenado su trabajo?
Buah, una barbaridad. En 2019, estuve 200 días fuera de casa. 2020 no tuvo nada que ver, estuve muchísimos menos. Y en lo que llevamos de este año, pues aún menos. Esperemos que en abril vaya mejorando.
6. ¿Sintió miedo en el confinamiento al ver que muchos eventos se cancelaban?
Miedo, preocupación, angustia… Creo que he pasado por todos los estados. También optimismo cuando ves que, poco a poco, se puede ir a las carreras.
7. No sé si su futuro pasa también por las conexiones telemáticas, zoom, etc…
La demanda de los Instagram Live durante el confinamiento fue grande. El camino está ahí, entre los eventos presenciales y los digitales… Los híbridos se van imponiendo.
8. ¿Cómo está afectando la crisis al ciclismo?
A nivel organizativo, muchísimo. Lo estoy viendo, especialmente en categorías inferiores. En la Sub-23, Júnior… No hay una continuidad y eso afecta muchísimo. El año pasado, hubo corredores que deberían haber vivido su último año en ‘amateur’ para dar el salto a profesionales y que, finalmente, han perdido una temporada. Está afectando una barbaridad, como en otros aspectos de la vida.
9. ¿Cómo vivió la última Vuelta a España con pandemia?
Fue de permanente tensión por las noticias que iban llegando sobre el coronavirus, pero había que ir día a día. Cada etapa fue un triunfo y así llegamos con esa satisfacción a Madrid. La gente la vio desde casa, también nos seguían en el ‘streaming’ que hacíamos desde el control de firmas… Esperemos que este año sea ya con público.
10. Veinticuatro ediciones como ‘speaker’ en la Vuelta a España. ¿Cómo fue la primera vez que le llamaron?
Contactaron conmigo una semana antes. De hecho, recuerdo que fue en septiembre, que es mi cumpleaños. Me pidieron alguna referencia de carreras que había hecho porque habían escuchado hablar de mí. Y me dijeron que me llamarían al día siguiente para decirme sí o no. Me telefonearon y me anunciaron que me habían seleccionado y que me iba a Lisboa, donde la Vuelta empezaba aquel año.
11. ¿Cómo es su relación con Miguel Induráin?
A Induráin lo conocí cuando yo era un crío y mi padre iba a hacerle las entrevistas en La Vuelta, el Tour o a su casa. Es un mito, una leyenda. Solemos coincidir en muchos eventos y es un placer poder charlar un rato con él.
12. Consiguió sacarle unas palabras a Lance Armstrong en la Vuelta a Murcia, que no es tarea fácil…
Pues fíjate, Armstrong siempre ha sido una persona muy simpática conmigo. A mí me saludaba, me daba la mano y me preguntaba qué tal estaba. Coincidí con él en muchas carreras como La Vuelta, La Vuelta a Murcia o el Gran Premio Miguel Induráin.
13. ¿Le han decepcionado muchos deportistas al tenerlos cerca?
No, en absoluto. De hecho, hay muchos ciclistas que me han llamado para hacer la presentación de sus equipos como Alberto Contador o Samuel Sánchez. Me siento agradecido.
14. ¿Le han ofrecido trabajar en algún medio de comunicación deportivo?
Estoy muy contento con lo que hago, pero no se puede decir nunca haré esto. No puedo cerrar las puertas a otras facetas.
15. Ha llegado a presentar hasta maquinaria agrícola. ¿Qué es lo más curioso que ha hecho?
He hecho traineras, baloncesto, gimnasia rítmica… Pero sí, igual amenizar un evento de tractores, desde el desconocimiento total, y que te digan los organizadores que “esto que haces tú con el deporte igual lo podemos llevar a un evento al aire libre, donde se congregan 3.000 o 4.000 personas…”. Fue una experiencia gratificante.
16. ¿Qué no presentaría por nada del mundo?
Para mí sería muy difícil narrar un partido de fútbol.
17. ¿Está bien remunerado el trabajo de ‘speaker’?
Depende de los eventos y de las carreras. Es verdad que trabajas muchos días, y no es lo mismo un evento con 10.000 personas que con 100. No es lo mismo un Campeonato de Europa de FreeStyle o un Campeonato de Europa de Supercross… Pero te diría que sí estoy bien remunerado.
18. ¿Cómo lleva lo de estar tanto tiempo fuera de casa?
Es lo más duro. Teniendo tres pequeños, te puedo asegurar que es lo más complicado. Uno está deseando marcharse a las carreras porque es su vida, pero cuando estás fuera estás deseando llegar a casa para estar con los tuyos.
19. ¿Cuánto tiempo dedica a la preparación de una carrera?
Ahora que estoy más tiempo en casa, estoy ya preparando La Vuelta a España de este año, viendo las etapas, los resultados de uno, de otro… Y la semana antes de una carrera ya te pones a tope, memorizando para no consultar mucho los papeles.
20. Un buen speaker debe…
Primero, llevar el trabajo bien preparado desde casa. Luego, intentar entretener y meterte al público en el bolsillo. También te diría que mantener la atención, empezar de menos a más y, sobre todo, que el público valore el esfuerzo que hacen los ciclistas, que son los verdaderos protagonistas.
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