La consejera foral de Salud, Santos Induráin, dio algunas pistas este miércoles sobre cómo podrían ser las próximas Navidades de los navarros. En la rueda de prensa posterior a la sesión de Gobierno, precisó que el Consejo Territorial analizará la propuesta del Ejecutivo central para limitar las reuniones a un máximo de seis personas y fijar un toque de queda hasta la una en Nochebuena y Nochevieja.
A este respecto, el Gobierno foral tiene clara cuál será su propuesta: cierta flexibilización del cierre perimetral, “pero solo para el reagrupamiento familiar” y no por tanto para hacer turismo (los estudiantes universitarios de otras regiones sí podrían viajar a sus hogares); apoyar el toque de queda que quiere aplicar el Ejecutivo central; y que se puedan celebrar reuniones de “dos unidades convivenciales”, con entre “seis y diez personas”. Un número algo mayor, en definitiva, al sugerido por Madrid.
En este sentido, Induráin también se mostró partidaria de que las medidas implementadas por las comunidades autónomas para las próximas fiestas sean, en cualquier caso, “lo más homogéneas posibles”.
Entra aquí para leer más sobre el impacto del coronavirus en Navarra.