La consejera de Economía y Hacienda del Gobierno de Navarra, Elma Saiz, defendió este jueves que «no es momento para una bajada generalizada de impuestos» y anunció que, «de manera inmediata», se van adoptar medidas fiscales de apoyo a los sectores afectados por las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania.
Así lo señaló la consejera en respuesta a una interpelación de Navarra Suma en el pleno de control. Sin embargo, María Jesús Valdemoros manifestó que el Gobierno foral «va tarde» en la adopción de medidas y señaló que ella no habla de una bajada masiva de impuestos, sino de medidas como «deflactar la tarifa del IRPF de manera progresiva».
Elma Saiz: «La socialdemocracia, el Estado social en el que yo creo, no se sostiene con una bajada masiva de impuestos».
A este respecto, Saiz rechazó que el Ejecutivo navarro este actuando «tarde» y puso como ejemplo «la reacción con la bonificación del combustible» o las reuniones que está manteniendo con los sectores afectados por el ‘shock’ energético, que «se van a ver aliviados por una batería de medidas de manera inminente».
«Estamos siendo sensibles con la crisis energética y ahí están las suspensiones o aplazamientos de impuestos relacionados con la energía», apuntó. Medidas que cifró en 50 millones de euros.
En este sentido, la consejera sostuvo que «no es momento para bajada de impuestos generalizadas, sí para el análisis compartido y el debate sosegado», y señaló que «hace falta voluntad de llegar a acuerdos» porque, «ahora más que nunca, no todo vale con el fin de llegar al poder». «La socialdemocracia, el Estado social en el que yo creo, no se sostiene con una bajada masiva de impuestos», agregó para añadir acto seguido que cuando las formaciones de Navarra Suma han tenido responsabilidades de Gobierno «han subido impuestos».
En contraposición, Valdemoros (Navarra Suma) declaró que «en Navarra y España llevamos soportando inflaciones que superan el 2 % desde abril de 2021 y la Comunidad foral registra desde ese mes tasas de inflación que sistemáticamente superan a las del conjunto del país». «La inflación, como impuestos que es, también genera recaudación para las haciendas», criticó. Y ejemplificó que «la recaudación de impuestos como el IVA no hace sino aumentar».
Ante esta situación, denunció que el Ejecutivo foral ya debería haber lanzado medidas fiscales para «empresas, autónomos y sectores afectados». «En las diputaciones vascas ya lo han hecho. El Gobierno de Navarra siempre va tarde y por detrás. No sé para quién gobierna. ¿A quién rinde cuentas?, ¿a Navarra o a Pedro Sánchez?», cuestionó.
INTERVENCIONES DE OTROS GRUPOS
Mikel Asiain (Geroa Bai) rechazó las propuestas de Navarra Suma, pero con matices: «No podemos permanecer pasivos ante la imparable escalada de los precios de la electricidad, del costo del gas, del importe de los carburantes o ante una inflación que roza ya el 10 %. Se deben adoptar medidas estructurales para romper inercias del pasado».
María Jesús Valdemoros (Navarra Suma): «El Gobierno de Navarra siempre va tarde y por detrás. No sé para quién gobierna. ¿A quién rinde cuentas?, ¿a Navarra o a Pedro Sánchez?».
Por su parte, Adolfo Araiz (EH Bildu) valoró que «la necesidad de contar con un sistema público fuerte obliga a establecer un sistema que permita recaudar» y resaltó que, «implantando un impuesto a las grandes fortunas en Navarra, estaríamos en disposición de obtener 80 millones de recaudación más»: «Tenemos que ajustar los beneficios fiscales y son necesarios más medios personales y materiales para la lucha contra el fraude fiscal».
Por su parte, Mikel Buil (Podemos-Ahal Dugu) señaló que «en esta situación, que ya deja de ser coyuntural y empieza a ser estructural, lo importante es seguir en la línea de ayudas directas, de créditos, de avales, de nacionalización de salarios en las empresas en las que hay problemas, de intervención de los precios en el ámbito de la energía y sin descuidar nuestra Administración».
Finalmente, Marisa de Simón (Izquierda-Ezkerra) reconoció que «Navarra Suma ha descrito una situación totalmente real y objetiva», pero apostilló que «viene con su propuesta de siempre de bajada de impuestos». «Con esa inflación disparada hay que tomar medidas valientes, tiene que haber una regulación estatal sobre los precios de los alimentos, los servicios básicos y, por tanto, una intervención económica por parte del Estado», concluyó.
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