“La visión en terapia visual no son solo dos ojos que ven un 100 %, sino un proceso mucho mas complejo que nos permite ubicarnos e interaccionar con el espacio y los objetos que se encuentran en él”. Así lo explica el proyecto Ver para Crecer, cuyo fin es concienciar a la sociedad de la importancia de la visión en las tareas cotidianas. La labor para acercar la salud visual a personas en situación de vulnerabilidad también ha llegado a Navarra, donde ya se han entregado varias docenas de gafas a través del comedor social París 365 y la fundación Xilema.
La iniciativa se apoya en la experiencia en materia de cooperación de la fundación Cione Ruta de la Luz y en la capacidad tecnológica de las entidades que colaboran con ella. El objetivo es “revisar la vista de personas sin recursos o en situación de vulnerabilidad en España, apoyando a organizaciones locales que trabajan con estos colectivos, y donando, a todo el que se le haya prescrito y la necesite, una gafa graduada nueva adaptada a sus gustos y necesidades”. Desde que nació, en el año 2015, son ya treinta y dos misiones ópticas las que este proyecto ha realizado por todo el país.
“Trabajamos para que todos los niños en situación de vulnerabilidad que lo necesitan en España, tengan sus gafas”
El pasado abril, con el apoyo logístico de FASFI (Fundación Ayuda Solidaria Hijas de Jesús), cinco ópticas voluntarias revisaron la visión de 56 niños con, a priori, “defectos refractivos”, en el Colegio Jesuitinas María Reina de Orcasitas. En esta ocasión, la acción se centró exclusivamente en las revisiones visuales a menores de este centro. “Desde siempre, atender la salud visual de los más pequeños ha sido prioritario para nosotros. Trabajamos para que todos los niños y niñas en situación de vulnerabilidad y sin recursos que lo necesitan en España, tengan sus gafas”, subrayó Cristina López-Mora, gerente de la fundación Cione Ruta de la Luz.
Por su parte, Pablo Zimmermann, director de FASFI, recalcó la importancia de compartir misión y valores con otras ONGs y fundaciones, como la Ruta de la Luz, “buscando sinergias con las que generar impacto positivo en nuestra sociedad”. “Este tipo de acciones, que incluyen la donación de gafas para colectivos desfavorecidos, contribuye a atajar el fracaso escolar de hoy, y, por lo tanto, el abandono educativo prematuro y el paro juvenil de mañana”, añadió. España es el país de Europa con una mayor tasa desempleo juvenil, y el segundo en lo que a abandono educativo temprano se refiere. “Con estas acciones, ponemos nuestro granito de arena para mejorar la situación”, concluyó.
MEJORAR EL APRENDIZAJE CON LA VISTA
“Comportamientos como acercarse demasiado al papel o que el alumno nos pida cambiar de sitio para ver mejor, nos ponen en alerta. Sabemos lo importante que es ver bien para el aprendizaje, y por eso estamos muy agradecidos a esta acción generosa de Ver para Crecer, puesto que estamos en un entorno desfavorecido”, expresó Natividad Piñero, directora del colegio.
Una de las ópticas voluntarias que cedió su tiempo para llevar a cabo las revisiones fue Marta Galdón (Óptica Quevedo). La joven profesional se mostraba “ilusionada” porque el ejercicio de su profesión pudiera ayudar a mejorar la capacidad de aprender de los niños: “Siempre hay errores refractivos sin compensar que pueden ser el origen del fracaso escolar. Las gafas que se les proporcionarán van a mejorar muchísimo su calidad visual y, por lo tanto, su capacidad para aprender”.
“Las gafas que se les proporcionarán van a mejorar muchísimo su calidad visual y, por lo tanto, su capacidad para aprender”
Una de las beneficiarias fue Mayte, una niña de 12 años a la que, en poco tiempo, había subido alarmantemente su graduación de miopía. “No veo la pizarra”, definía. Después de un examen visual, pudo elegir una gafa azul de metal. En unos días la recibirá nueva, con la graduación que corrige esa miopía. En concreto, todas las lentes necesarias para la corrección de los defectos refractivos las donará la empresa Essilor-Luxottica.
Desde 2015, Ver Para Crecer ha revisado la vista de 3.400 personas y entregado 2.200 gafas graduadas a beneficiarios de organizaciones como Aldeas infantiles SOS (Barcelona, Granada y Tenerife), Fundación Tomillo (Vallecas, Orcasitas y Carabanchel en Madrid), Mensajeros de la Paz (Madrid, León y Toledo), Fundación Xilema y Comedor Solidario París 365 (Pamplona), REMAR (Madrid), Fundación Atenea en Sevilla y Sant Joan de Déu – Serveis Socials/Obra Social (Barcelona y Valencia), Fundación Jesús Abandonado (Murcia), Nazaret (Alicante), Entidades del Programa CaixaProinfancia en Madrid, Tenerife y Zaragoza, Cruz Roja, en Loja (Granada), ADUNARE en Zaragoza y CEAR, en Málaga y Valencia y ahora FASFI.