Volkswagen Navarra ha invertido 25,1 millones de euros en mejoras ergonómicas para el proceso de fabricación entre 2015 y 2020. Con el objetivo de favorecer “unas buenas condiciones laborales y preservar la salud de toda la plantilla”, la fábrica señaló en un comunicado que ha completado durante este periodo veintitrés actuaciones en sus talleres.
En paralelo a los preparativos para el lanzamiento del nuevo Polo en 2017, y a la posterior adjudicación de la producción de dos nuevos modelos, el Volkswagen T-Cross y el nuevo CUV, cuyo inicio de producción está previsto para septiembre de 2021, la empresa ha aprovechado el periodo 2015-2020 “para acometer modificaciones relevantes en todos los talleres de la fábrica, todas ellas orientadas a mejorar la ergonomía de puestos concretos y las condiciones generales de trabajo de sus empleados”.
Las mejoras ergonómicas se concentran en sus talleres y en las zonas comunes de fábrica: dos de ellas en Pintura, tres en Motores, ocho en Montaje, dos en Revisión Final y ocho en zonas comunes. “Desde Seguridad Laboral, en estrecha colaboración con Producción e Ingeniería de Planificación, trabajamos diariamente para garantizar que las condiciones ergonómicas de los puestos de trabajo están dentro de los parámetros adecuados y en continuo proceso de mejora”, apuntó el responsable de Seguridad Laboral de Volkswagen Navarra, Juan Martín Hernández.