El diccionario de la Real Academia Española define el concepto «irrupción» como «la aparición violenta y repentina de algo«. Sin duda, no existe mejor término para reflejar la llegada a nuestras vidas del coronavirus. En apenas dos meses, la actividad económica ha pasado de una situación de parón total a otra de incierta desescalada. Las empresas y los trabajadores tratan de adaptarse a una realidad en continuo cambio, en la que se suceden las noticias sin solución de continuidad.
Es bueno, por tanto, detenerse y poner en perspectiva el escenario que nos rodea. Por su conocimiento y contacto directo con la realidad desde su puesto en el Gobierno navarro, la directora general de Política Empresarial, Proyección Internacional y Trabajo, Izaskun Goñi, ofrece algunas claves a NavarraCapital.es para entender mejor la situación actual.
¿Qué valoración hace el Gobierno de Navarra de la ampliación de las exoneraciones extraordinarias contempladas en la última actualización del RDL del 18 de marzo? ¿Por qué creen que son importantes?
Los Expedientes Temporales de Regulación de Empleo (ERTE) de fuerza mayor se establecieron para mantener el empleo a partir de una serie de normativas extraordinarias. Entonces, el reto era proveer a la empresa de un marco normativo que le facilite su transición desde un estado de suspensión a otro en el que pueda ir recuperando su actividad. En ese contexto, la semana pasada se aprobó el RD 18/2020, que establece, en primer lugar, la prórroga automática de los de fuerza mayor hasta el 30 de junio, con las condiciones establecidas al inicio. Y se introduce, como gran novedad, el ERTE de fuerza mayor parcial, que se inicia desde el momento en que una persona de la plantilla en situación de regulación vuelve a la actividad.
«Los ERTE parciales ayudan a las empresas un poco más con sus costes fijos si van incorporando a personas y, al mismo tiempo, mantienen la protección a quienes todavía no lo pueden hacer».
De ellas, ¿cuáles destacaría para empresas de menos de 50 trabajadores? ¿Y para las de 50 o más?
Digamos de entrada que las empresas van a seguir cobrando una exoneración de las cotizaciones, tanto de las personas que incorporen como de las que sigan dentro del ERTE en mayo y en junio. Eso es muy importante.
Sin embargo, las empresas de menos de 50 trabajadores, en el momento en el que pasen a incorporar a algunas personas a la actividad y por tanto el ERTE pase de forma automática a ser de fuerza mayor parcial, tendrán una exoneración del 85 % de la cotización en mayo y del 75 % en junio para esas personas que «recuperen». Para el resto que permanezcan en suspensión, la exoneración será del 60 % en mayo y del 45 % en junio.
En el caso de las empresas de 50 trabajadores o más, se mantendrán exoneraciones del 60 % de las cotizaciones para las personas que se activan en mayo y del 45 % en junio. Mientras, las que sigan con suspensión de contratos serán del 45 % en mayo y del 30 % en junio.
El Gobierno foral comenzará a diseñar medidas para la conciliación en los próximos días.
¿En qué cree que van a beneficiar los ERTE parciales a la actividad económica?
Como decía, es una medida de transición hacia la normalidad. Por un lado, se ayuda a las empresas un poco más con sus costes fijos si van incorporando a personas y, al mismo tiempo, se mantiene la protección a quienes todavía no lo pueden hacer. Estamos hablando, en definitiva, de una ayuda inédita y muy excepcional, que trata tanto de evitar los despidos como de aliviar las cargas de las empresas en estos momentos tan críticos. Ahí está el aspecto más destacado de esta decisión.
ERTE IMPAGADOS
¿Cuáles son las últimas cifras actualizadas de ERTE que tiene el Gobierno de Navarra?
Desde el 13 de marzo, se han presentado 6.934 ERTE, que afectan a 61.705 personas, un 60,5 % hombres y un 39,5 % mujeres. El 90,8 % lo son de fuerza mayor, mientras que los registrados por causas productivas, técnicas, organizativas y/o económicas suponen el 9,2 % restante.
Desde el 13 de marzo se han presentado en Navarra un total de 6.934 ERTE, que afectan a 61.705 personas.
El sector servicios ha solicitado el 83,1 % de los expedientes, que incluyen al 56,9 % de los trabajadores afectados por el parón debido a la pandemia. Mientras, el 39,4 % de los trabajadores afectados están en la industria (con un 11.2 % de los expedientes) y un 5,4 % de los expedientes pertenecen al sector construcción. La semana pasada todavía entraron más de 100 expedientes, que sigue siendo una cantidad muy elevada, aunque lejos ya del pico, cuando se rozaron los 700 diarios.
En la última semana, por cierto, han predominado los denominados ‘ETOP’ (por causas económicas, técnicas, organizativas y productivas). No tenemos información sobre si las empresas conocen esta nueva posibilidad, del de fuerza mayor parcial, para incorporar paulatinamente a personas a la actividad. Porque otra medida que se ha adoptado para facilitar la gestión es que se comunique directamente al SEPE. Es esta entidad la que supervisa estos cambios en los ERTE una vez al mes, así que tendremos que esperar para saber más.
Los responsables del SEPE en Navarra calculan que hay cerca de 6.000 empleados en ERTE en la Comunidad foral que todavía no han cobrado. ¿Han planteado desde el Gobierno de Navarra algún tipo de solución para afrontar este problema?
El SEPE tiene un gran reto de manejo de datos y de avalancha en sus sistemas. Nosotros también la tuvimos. Para gestionar el aluvión de tantos ERTE en tres-cuatro semanas como en 30 años, tuvimos que poner a la mitad del Departamento a trabajar en ello, ayudando a los compañeros del Servicio de Trabajo. Una tarea que, en circunstancias normales, la llevaban entre dos personas ha tenido que reforzarse con 50 de todas las áreas (y algunos voluntarios también del SNE, a quienes agradezco también su generosidad).
Hubo que desarrollar la aplicación informática a marchas forzadas y lo hemos hecho en coordinación con el SEPE para facilitarle las gestiones que van después de las nuestras. Esta ha sido nuestra principal contribución. Confío en que el SEPE conseguirá llegar al 100 % de las prestaciones en breve. De momento, había articulado herramientas para los trabajadores a los que no se había llegado, con acuerdos con las entidades financieras.
Sobre los trabajadores que no han cobrado su ERTE en Navarra): «Confío en que el SEPE conseguirá llegar al 100 % de las prestaciones en breve».
Muchos empresarios nos están trasladando su malestar debido a que la ampliación del ERTE no va a solucionar del todo sus problemas en cuanto a la adaptación de plantillas a la actividad laboral prevista ¿El Gobierno de Navarra es partidario de aportar alguna medida de flexibilidad que no contempla el Ejecutivo de España? ¿Cree que habría que añadir algún supuesto más a los aprobados de estacionalidad del sector o riesgo de quiebra para poder realizar despidos?
En el Departamento estamos en continua comunicación con las empresas de los distintos sectores de la S3, así como con las organizaciones empresariales. Y de momento, al menos yo, no he tenido conocimiento de esa preocupación. Estamos trabajando también en el Consejo de Diálogo Social, donde pueden acordarse medidas. Necesitaría conocer mejor cuál es el planteamiento para poder plantear respuestas.
En la última reunión de presidentes autonómicos, María Chivite resaltó la importancia de impulsar medidas de conciliación mientras los colegios estén cerrados ¿Cuáles son las apuestas del Ejecutivo foral en esa materia?
Se ha creado un grupo de trabajo entre varios directores generales y, esta misma semana, empezaremos a dar forma a esas posibles medidas para la conciliación que también contribuyan a una reactivación de la actividad.
OTROS TEMAS DE ACTUALIDAD
Manu Ayerdi anunció este jueves que el Ejecutivo foral está impulsando la fabricación de mascarillas, guantes y batas en nuestra región. ¿Cuántas empresas de las contactadas tienen capacidad para participar en esta iniciativa, cuáles están dispuestas y cuándo podrían empezar a producir?
En estos momentos, ya hay varias empresas navarras invirtiendo en la producción de mascarillas, guantes y batas en fase muy avanzada. Una ya está produciendo y, la otra, ultimando las inversiones que precisa. También tenemos noticia de otros proyectos que están valorando una posible inversión en este campo.
«Esta misma semana, empezaremos a dar forma a posibles medidas para la conciliación».
Referido a esto último, se habla de impulsar procesos de colaboración público-privada. ¿Qué aportaría el Gobierno de Navarra en esta iniciativa y, en caso de ser inversión, hasta qué cifra podría implicarse?
La colaboración público-privada se refiere más a que son bienes críticos para la actividad sanitaria, en este caso del sector público. De modo que se están estudiando las posibilidades de coordinar producción y demanda, tanto del sector público como del privado.
Los grupos políticos han planteado la posibilidad de impulsar bonos para facilitar la compra en el comercio local. ¿Cómo han recibido esta propuesta en el Gobierno de Navarra? ¿Contemplan algún tipo de fórmula y cuál sería su coste?
Nos ha parecido una iniciativa muy interesante y hemos empezado a analizarla.
Goñi considera interesante la propuesta de crear bonos para incentivar el consumo.
Finalmente, en cuanto a los proyectos de reactivación económica, existen tres espacios de discusión donde se van a debatir medidas que se recogerán en el Plan Reactivar Navarra (el Consejo de Diálogo Social, el Grupo de Expertos y una comisión parlamentaria especial). ¿Cómo va a articular legalmente el Gobierno de Navarra el papel de cada uno? Porque algunos sindicatos afirman que ese espacio de participación está sin definir legalmente de cara al plan.
Se trata de una gobernanza en construcción. El Consejo de Diálogo Social y la comisión parlamentaria tienen su articulación legal. Y luego hay otros foros, como el comité director de la S3, especialmente importante para el Departamento de Desarrollo Económico y Empresarial, que está trabajando y que también va a hacer sus aportaciones al plan del Gobierno.
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