El aire de la bata de cola de una bailaora flamenca que se deja ver en los volantes de algunos vestidos, los brillos del traje de luces de un torero trasladados con maestría al ‘paillette’ bordado de una chaqueta bolero o la estética de la indumentaria en la corte de los Austrias reflejada en las negras telas aterciopeladas adornadas con azabache.
Son solo algunos ejemplos del trabajo que Cristóbal Balenciaga, el diseñador de moda más admirado e influyente de todos los tiempos, realizaba en su constante revisión de la historia del arte como fuente de inspiración para su trabajo. Añadamos a esos ingredientes la fuerte personalidad y de estilo demostradas por el artista vasco para mantener dichas influencias a lo largo de toda su trayectoria, incluida la parte más vanguardista, y podremos concluir que es todo un acierto acudir a Madrid a la exposición ‘Balenciaga y la pintura española’, abierta en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza hasta el próximo 22 de septiembre.
Porque en esta muestra, comisariada por Eloy Martínez de la Pera, se podrá disfrutar de hasta 90 piezas procedentes del Cristóbal Balenciaga Museoa de Getaria, el Museo del Traje de Madrid y el Museu del Disseny de Barcelona, muchas de ellas inéditas, junto a 55 cuadros prestados por El Prado, Bellas Artes de Bilbao o el Lázaro Galdiano, entre otros, colocados de tal forma que la comunicación entre ambos elementos permite entender la profundidad artística de la obra realizada por el modisto guipuzcoano.
A tal fin, se ha diseñado un itinerario cronológico que abarca desde el siglo XVI hasta el XX y donde quedan descubiertas para el visitante las conexiones conceptuales, en formas y volúmenes así como las complicidades cromáticas que dan como resultado un fascinante diálogo entre moda y pintura, entre la creatividad de Balenciaga y sus fuentes de inspiración, El Greco, fundamentalmente, pero también los bodegones barrocos, el bordado, Zurbarán, Goya o contemporáneos de su tiempo como Zuloaga o Antonio María Esquivel, por citar los más destacados.
El propio protagonista de la muestra dejó para la posteridad una reflexión que refleja perfectamente el espíritu que persigue el Thyssen con la organización de esta retrospectiva al afirmar que «un buen modisto debe ser arquitecto para los patrones, escultor para la forma, pintor para los dibujos, músico para la armonía y filósofo para la medida».
Siguiendo dicha reflexión, ‘Balenciaga y la pintura española’ permite revisar el arte desde una mirada diferente, poniendo la atención sobre los pintores como creadores y transmisores de moda y, al mismo tiempo, como maestros en la representación de telas, texturas, pliegues y volúmenes.
Si, además, tenemos la oportunidad de pasear con tiempo por las distintas salas que forman la exposición, podremos percibir el homenaje que se rinde al negro, uno de los colores fetiche del diseñador así como a su figura como ‘arquitecto de la alta costura’, denominación que le ha definido y que se ha perpetuado hasta nuestros días dada la importancia que otorgó a la línea y las formas puras a lo largo de todas sus creaciones. Algunas de ellas, como la línea barril, el semientallado, las faldas balón, la túnica, el vestido saco o el baby doll, están presentes, por cierto, en esta cita, la primera gran exposición dedicada al modisto vasco que se realiza en Madrid en el último medio siglo.
Una propuesta que, además de la exposición, incluye actividades complementarias tan interesantes como la que se ha programado para el próximo 19 de septiembre. Entonces se celebrará una jornada que contará con la intervención de conservadores, académicos, investigadores y gestores culturales de primer nivel. Todos ellos participarán en un encuentro destinado a profundizar en la figura del célebre modisto y la relación que sus creaciones mantienen con la pintura, como queda reflejado para todo aquel que se acerque a disfrutar de esta retrospectiva.
Así, entre los protagonistas de este foro estarán Juan Gutiérrez, conservador del Museo del Traje de Madrid; Miren Vives, directora del Museo Balenciaga de Getaria o; Estrella de Diego, catedrática de Historia de Arte Moderno y Contemporáneo de la Universidad Complutense de Madrid.
Expertos que analizarán y debatirán sobre la figura de un Cristóbal Balenciaga que hoy sigue más presente que nunca en la medida en que sus creaciones han trascendido la barrera del tiempo para alcanzar la moda más actual. Muestra de esto último es la declaración realizada en su día por uno de esos grandes ‘popes’ de la moda actual como es el francés Christina Dior quien expresó su admiración por el genio de Getaria cuando aseguró: «Con los tejidos, nosotros hacemos lo que podemos. Balenciaga hace lo que quiere».
No se nos ocurre mejor epílogo para una muestra, ‘Balenciaga y la pintura española’ que no hay que perderse en este tórrido verano madrileño. ¡A disfrutar!