La Asociación de Industrias Agroalimentarias de Navarra, Aragón y La Rioja (ALINAR) ha fichado a Diego Galilea como nuevo director general, con el objetivo de «continuar impulsando el papel de la asociación como entidad de representación referente de la industria agroalimentaria». Licenciado en Ingeniería Industrial por la Universidad Antonio de Nebrija y MBA por la Universidad de Comillas, Galilea ocupaba el cargo de director territorial de Navarra y La Rioja del Grupo Veolia, especializada en gestión optimizada de recursos energéticos y medioambientales, y cuenta con una amplia trayectoria de más de quince años en el ámbito de la dirección de servicios industriales auxiliares, especialmente enfocados al sector agroalimentario.
Diego Galilea: «Queremos contar con todas las empresas, independientemente de su tamaño o actividad en la industria alimentaria, para defender sus intereses».
Galilea se mostró agradecido por «la oportunidad de asumir este reto profesional» y afronta su nueva etapa al frente de ALINAR con «la motivación de continuar la labor que ha desempeñado su predecesora, Cristina Lecumberri, en el reposicionamiento de la asociación y en su consolidación».
ALINAR cuenta en la actualidad con 65 empresas socias, entre las que se encuentran «empresas líderes en el mercado nacional e internacional». Así mismo, la facturación de todas sus asociadas suman más de 2.500 millones de euros, y dan empleo a más de 10.000 personas con una tasa de empleo femenino del 68 %.
«Tras la crisis sanitaria, las empresas socias se encuentran inmersas en una fase de recuperación, en la que están teniendo que enfrentarse a nuevos e importantes retos: la subida del precio de las materias primas, del punto verde, de los costes del transporte y fletes marítimos, del precio de la electricidad… A esto, se suman las dificultades generadas en las exportaciones al Reino Unido y los cambios normativos, en los que ALINAR pretende acompañarles día a día», subrayó Galilea.
Al mismo tiempo, el nuevo director general de ALINAR destacó que «todas las empresas, independientemente de su tamaño o actividad en la industria alimentaria, son bienvenidas y queremos contar con todas ellas para defender, cada vez con más fuerza, sus intereses».
