El número de rodajes en Navarra está registrando un «crecimiento importante». Entre 2015 y 2017, se contabilizaron 206, mientras que desde enero de 2018 a agosto de 2020 ya suman 262 (+27 %). Así lo explicó este jueves, en respuesta a una interpelación del PSN en el pleno parlamentario de control, el consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Manu Ayerdi.
En concreto, en el trienio 2015-2017 se rodaron en la Comunidad foral 27 largometrajes de ficción, cifra que entre 2018 y 2020 ya ha llegado a 29. Y el rodaje de las series de televisión, «un sector que está viviendo ahora un momento de despegue absolutamente impresionante», ha aumentado de cinco a doce. También se ha incrementado el de programas, pasando de 22 a 28.
En este sentido, el consejero destacó que se está logrando un «buen posicionamiento» de Navarra, a pesar de que es una región con «pocos años» en el sector frente a otros territorios. Por eso, se mostró «convencido» de las posibilidades del sector de «generar riqueza, actividad económica y empleo». Y, asimismo, señaló las «sinergias» que este puede tener con otros mercados «como el turismo o lo relacionado con todo lo digital», así como con el sector público.
LAS REACCIONES
Ángel Ansa (Navarra Suma) instó al Gobierno de Navarra a “atender las demandas del sector, incluidas las desgravaciones fiscales», ya que a su juicio Navarra «está en riesgo de dejar de ser una comunidad atractiva en ese ámbito». Ahora bien, la parlamentaria Ainhoa Unzu (PSN) aseguró que la región se ha situado «uno de los territorios más atractivos» para los rodajes y apostó por la digitalización de la economía «creativa y cultural, que está creando nuevas oportunidades de negocio con grandísima potencia en el mercado».
Además, Mikel Asiain (Geroa Bai) defendió la instauración de un «ecosistema empresarial», que permita crear «empleo de calidad», mientras que Laura Aznal (EH Bildu) precisó que el «reto» pendiente del sector «pasa por acabar con la brecha digital, tanto la social como la económico-geográfica, y por examinar la efectividad de los beneficios fiscales”.
Mikel Buil (Podemos-Ahal Dugu) puso el foco en la importancia de «potenciar la industria pequeña y local, lo cual pasa también por un refuerzo de la Formación Profesional y de los derechos sociales». Y, finalmente, Marisa De Simón (Izquierda-Ezkerra) alertó de que el enfoque actual del sector es «muy consumista, más basado en el precio que en la calidad del disfrute del ocio de la ciudadanía”.
