Pertenecen a generaciones y culturas distintas. Una madre de familia, una millenial y una ciudadana musulmana. Apenas unos minutos antes, dos treintañeros y un jubilado se llevaban sus pedidos. Todos tienen algo en común: se han parado junto a la sección ‘Listo para comer’ de Mercadona.
El ritmo frenético del día a día aturulla nuestras rutinas y rara vez tenemos la oportunidad de cocinar a fuego lento, como nuestras madres. Tiempo, esa valiosa palabra que tanto añoramos… Quizás por eso, algunas de las principales cadenas de supermercados han detectado un nuevo nicho de mercado y se han lanzado a vender platos elaborados sobre tres sencillas premisas: comida rica, sana y al instante. Toda una amenaza para la fast food.
La oferta de Mercadona incluye 35 platos a precios competitivos.
Un estudio de la consultora Kantar demuestra que este mercado está en auge. De hecho, sus ventas crecieron un 10 % a nivel nacional durante el tercer trimestre de 2019. Y se estima que unos 47 millones de consumidores de todo el mundo utilizan este servicio al menos seis veces al mes.
Cada vez son más los supermercados que, conscientes de esta tendencia, están abriendo secciones de platos preparados en sus establecimientos. Prueba de ello es Navarra, donde Carrefour, Mercadona y El Corte Inglés ya las han incluido. Mercadona, incluso, va a redoblar su apuesta y a implementarlas en más supermercados. Hasta ahora, ofrecía el servicio en cinco de sus once establecimientos de la Comunidad foral. Pero según confirman desde la compañía a NavarraCapital.es, este año habilitará secciones de comida para llevar en otros tres.
Además de ser la marca líder en cuota de mercado dentro de los supermercados, con un 26 %, la entrada de Mercadona en el ámbito de la restauración ha sido fulgurante. El informe de Kantar precisa que sus ventas en el canal de platos recién hechos aumentaron un 67 % y que ‘robó’ un 36,5 % del consumo de alimentación fuera del hogar a marcas de fast food como Burger King, McDonald’s o Telepizza.
La acogida de este servicio está siendo muy positiva.
Aunque las cadenas prefieren no hacer pública la facturación que genera este servicio en Navarra, se muestran satisfechas de la acogida que los clientes de la región le están brindando. Y eso que se trata de una comunidad en la que las distancias del trabajo al domicilio a menudo son cortas y, por lo tanto, muchos ciudadanos pueden comer en casa.
«Los consumidores son el verdadero faro en el que nos basamos para tomar las distintas decisiones», afirman fuentes de Mercadona. Quizás este sea uno de los motivos principales que les está ayudando a lograr esa penetración de mercado: «La introducción de la sección ‘Listo para comer’ se ha realizado escuchando las opiniones de los clientes y atendiendo a sus necesidades».
En la misma línea se sitúa Carrefour. Conscientes de que los modos de vida y los hábitos de consumo han cambiado y de que el ciudadano se preocupa cada vez más por su alimentación, el origen de esta y los modos de producción, sus responsables han puesto a disposición de los clientes «platos preparados con recetas tradicionales». El objetivo de su estrategia es «convertir a la empresa de distribución en referente de la transición alimentaria para poder ofrecer todos los días una alimentación de calidad», defienden desde la cadena francesa. Y para conseguirlo, llevan a cabo un minucioso seguimiento de la gastronomía y de las actuales tendencias de alimentación: «La compañía revisa todas las recetas constantemente para ofrecer novedades».
ALTERNATIVA A LOS RESTAURANTES
Con el crecimiento de un sector, siempre hay alguien que sale perdiendo. En este caso son los restaurantes de comida rápida o fast food. Según el estudio de Kantar, el 40 % de las veces que Mercadona gana un cliente con su ‘Listo para comer’ lo hace arrebatándoselo a las principales cadenas de comida rápida y, en menor medida, a restaurantes tradicionales.
La sección de Carrefour está ampliando la oferta vegana y los alimentos estacionales.
La oferta de los supermercados cada vez es mayor y va enfocada hacia un cliente que quiere comer de manera saludable. También es cierto que el aumento del consumo de comida preparada es mayor o menor dependiendo de la región. Al frente se sitúan las grandes ciudades, debido sobre todo a su estilo de vida. Quizás por eso las cadenas de supermercados adaptan sus modelos a la idiosincrasia de cada región.
Con el fin de seguir creciendo y lograr la fidelidad de los consumidores, el siguiente paso previsto por Mercadona será trabajar el surtido local: «Hemos ido adaptándonos a las distintas zonas geográficas a medida que hemos ido implantando la sección. No obstante, todavía nos queda camino por recorrer, como el de centrarnos en productos navarros», confirman.
Su menú se basa en 35 platos distintos y las recetas «han sido definidas en las sesiones de trabajo que ha mantenido Mercadona con 800 clientes». Entre las comidas más demandadas se encuentran la lasaña, la fabada, las lentejas, la fideuá, la paella, la tortilla de patatas… Pero, además, los trabajadores de cocina también pueden preparar en el momento un plato de pasta con los ingredientes que el cliente desea, sándwiches, pizzas… Sin olvidar las ensaladas, que el cliente puede adaptar a su gusto.
En este sentido, Carrefour ha tenido en cuenta las actuales tendencias de consumo y también está reforzando y completando su oferta: «Se está produciendo un incremento de los productos relacionados con el cuidado de la salud, la nutrición, la alimentación ecológica y los frescos. Nuestra sección está enfocada a ello y a promover el consumo de una dieta variada». Ejemplo de ello es la ampliación de la oferta vegana, la adaptación de los alimentos a cada estacionalidad o la restricción del uso de aditivos, entre otras iniciativas.
Carrefour pretende fomentar una dieta variada.
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