La Unión de Agricultores y Ganaderos de Navarra (UAGN) anunció este martes el inicio de movilizaciones en la Comunidad foral tras las protestas llevadas a cabo en Francia y otros países europeos. Así lo confirmó la organización en una rueda de prensa, donde se solidarizó con el agro europeo e informó de que estas acciones serán de nivel nacional y se pondrán en común el próximo jueves 1 de febrero.
«Somos un sector envejecido, con una media de edad de 61 años. Nos estamos jugando el futuro del sector, de nuestros pueblos, muchos de ellos habitados por la última generación. Pero también la sociedad se está jugando el futuro de una alimentación sana, segura y sostenible. Esta es una batalla de todas y todos y, ante esto, no nos queda otra que salir a la calle y reclamar el derecho de seguir vivos», subrayó Félix Bariáin, presidente de UAGN. «Es un momento crítico en el que la agricultura y ganadería familiar van a desaparecer y no queremos a ningún político ni partido político en nuestras movilizaciones. Porque hasta ahora ninguno ha hecho nada a nivel local, regional, nacional ni europeo», añadió recordando que la organización.
«La sociedad se está jugando el futuro de una alimentación sana, segura y sostenible. Ésta es una batalla de todos»
Los problemas, explicó, pasan por «normativas absurdas que solo benefician a terceros países», mientras el agro comunitario «se asfixia». Por ello, las acciones se concretarán a nivel nacional el próximo 1 de febrero y «las movilizaciones no tendrán límite en el tiempo». «Abogaremos por dialogar y negociar, pero esto no es un chiste. No va contra nadie, sino contra una política, un modelo, que nos ha llevado hasta aquí».
Lo que sí adelantó Bariáin fue la primera petición: la creación de un impuesto a la gran distribución. «El precio que nos pagan por nuestros productos es ruinoso y el precio, en cambio, sube. De modo que alguien se está lucrando. Ahí debe entrar la Ley de la cadena, que se modificó gracias a nuestras tractoradas previas, pero ahora hay que aplicarla y esto es responsabilidad de la Administración. También hay que realizar rotundamente una reforma a la PAC, que se ha convertido en un absoluto monstruo funcionarial; que no sirve para garantizar los ingresos del agro; y que, si bien nosotros lo pagaremos a corto plazo, a largo plazo lo harán los consumidores. Pagarán más por unos productos de menor calidad y menor seguridad alimentaria», defendió.
«El precio que nos pagan por nuestros productos es ruinoso»
Además, debido a la subida del SMI, solicitaron exenciones a las cuotas de la seguridad social para apoyar la contratación de los trabajadores, así como una ley de despoblamiento. «Hace cinco años, ya presentamos medidas para que esta se desarrolle acompasada de una ley de desarrollo rural y un apoyo real a la ganadería intensiva y extensiva».
Para concluir, el presidente de UAGN lanzó un mensaje a la sociedad: «Esto no va contra la sociedad, es una batalla de todos, debemos ganar todos. No queremos molestar a la ciudadanía, simplemente queremos garantizar una alimentación sana y sostenible».
