El espíritu emprendedor fluye en el ADN de la familia Ríos. Hace más de treinta años, transitando el camino hacia la energía limpia, Adalberto fundó la compañía Ríos Renovables. Sus dos hijas, Lidia y Marina, recuerdan visitar de niñas la sede principal, ubicada en Fustiñana. Hoy ya tienen 25 y 26 años y ocupan los cargos de directora adjunta y directora de Operaciones respectivamente. Lidia, con ternura, resalta que la mayoría de los profesionales que se unieron a la empresa en sus inicios todavía continúan ligados a ella: “Nos han visto crecer. Siguen estando los de siempre, es como estar en casa”.
Licenciada en Administración y Dirección de Empresas Bilingüe por la Universidad de Navarra, Lidia desempeñó labores como auditora en EY durante un año y, después, decidió incorporarse a la compañía familiar. Lo cierto es que Ríos Renovables está preparando poco a poco su futuro relevo generacional, aunque Adalberto y su mujer, Conchi, nunca influyeron en la decisión de sus hijas respecto a su incorporación en la firma. “De niñas, cuando nos preguntaban qué queríamos ser de mayores, respondíamos ‘¡peluqueras!’. Pero, con el tiempo, escuchábamos hablar de la empresa y nos llamaba la atención. El sector nos atraía”, reconoce la pequeña de las hermanas entre carcajadas.
RUMBO AL ALMACENAMIENTO EN BATERÍAS
En concreto, la firma desarrolla cinco líneas de negocio: la plantación y el desarrollo de plantas fotovoltaicas, el alumbrado público, la iluminación eficiente, el autoconsumo fotovoltaico, y la instalación y el mantenimiento de sus proyectos. Además, creó hace un año un nuevo departamento enfocado en el desarrollo de sistemas de almacenamiento de energía en baterías. “Siempre estamos estudiando nuevas oportunidades y tendencias”, apunta Lidia justo antes de recalcar que el objetivo de la compañía es desarrollar más de 500 MW en baterías y que el proyecto salga a la luz entre 2026 y 2027.
“El principal problema de las energías renovables es que son intermitentes. Las baterías nos permiten almacenar la energía excedentaria que no estamos usando para utilizarla cuando la necesitemos”, desgrana. Para dar solución a esta necesidad, el sistema que Ríos Renovables desea diseñar será del tipo stand alone, ya que se basará en mecanismos conectados a una red eléctrica que recogerán energía en momentos de alta producción para liberarla cuando existan una baja producción y una mayor demanda: “Con el desarrollo de esta tecnología se contribuye a crear un sistema eléctrico más robusto y estable”.
Además, la empresa está trabajando en el ámbito de las comunidades energéticas con el objetivo de fomentar la sostenibilidad, la autonomía energética y la transición hacia fuentes de energía más limpias.
100 MILLONES DE FACTURACIÓN
Con cinco sedes ubicadas en Fustiñana, Tudela, Valladolid, Zaragoza y Turín, Ríos Renovables también cuenta con equipos en Madrid, Toledo y Cáceres. Y, próximamente, proyecta hacer lo propio en Lleida. “En la fase inicial, vamos a desarrollar allí diferentes plantas fotovoltaicas, así como la operación y el mantenimiento de las mismas”, avanza Lidia.
El desembarco en Cataluña será gradual. A principios de 2026, se armará el equipo encargado de las plantas fotovoltaicas. Y, una vez se haya iniciado la “fase de producción”, se procederá a la construcción de una delegación física, que estará en marcha a finales de 2027 o principios de 2028.
A la hora de poner en marcha nuevas sedes, Ríos Renovables “replica” la estructura de su central, ubicada en Fustiñana, “implantando de manera ordenada todas sus áreas de negocio”. Así lo hizo por ejemplo en Valladolid, donde comenzó con el desarrollo de más de 100 MW. Ahora el equipo “opera y mantiene esos activos”, además de desarrollar nuevos proyectos fotovoltaicos. “En Valladolid también ejecutamos proyectos de autoconsumo residencial e industrial e incluimos gradualmente las líneas de eficiencia energética. En Lleida esperamos hacer lo mismo, generando puestos de trabajo locales”, añade.
En este sentido, Lidia sostiene que el ritmo de crecimiento de la empresa se mantiene “constante y estable”, con una plantilla que suma 240 profesionales y una facturación anual de 100 millones de euros: “Llevamos unos años con este ritmo, y queremos seguir así”.
De hecho, Ríos Renovables adquirió en 2023 el negocio de la zaragozana Graus Hermanos, que le transfirió 57 contratos con comunidades de propietarios y “un pequeño porcentaje” de proyectos industriales. Así, la empresa navarra pasó de gestionar quince comunidades a 72 en la zona.
En parte, ese crecimiento se debe al apoyo que BBVA ofrece a la firma. “Compartimos valores. En BBVA y Ríos Renovables estamos comprometidos con la sostenibilidad y la eficiencia energética. Desde el principio, nos han transmitido profesionalidad y confianza”, resalta al directora adjunta de la compañía navarra, quien agrega que puede contar “para todo” con la entidad financiera.
Pero la empresa navarra también se está adentrando en otros sectores. En 2022, por ejemplo, desembarcó en el turismo de lujo invirtiendo 1,2 millones de euros en la construcción de un edificio de cuatro plantas, que hoy alberga once apartamentos. Este complejo, bautizado como Ríos Suites y ubicado en Tudela, se encuentra operativo desde el pasado año: “Creemos mucho en el potencial turístico de la Ribera. La gastronomía, el paisaje… Todo tiene su encanto. Queríamos ofrecer algo novedoso y potenciar el turismo en esta zona de Navarra”.
Se trata de “los primeros apartamentos de lujo” de estas características ubicados en la Comunidad foral. La luminosidad, la tranquilidad y la comodidad hacen del lugar un “espacio agradable”, que al mismo tiempo brinda atención al cliente las veinticuatro horas del día. “Los fines de semana estamos siempre completos. Entre semana, el porcentaje de ocupación oscila entre el 50 % y el 70 %. Estamos muy contentos”, puntualiza Lidia justo antes de remarcar que el éxito de Ríos Suites ha avivado el interés de la compañía por el sector inmobiliario. “Estamos estudiando el desarrollo de viviendas sostenibles y no descartamos hacer algún otro proyecto”, revela.
COMPROMISO CON LA RSC
La Responsabilidad Social Corporativa juega un papel fundamental en la compañía. Un compromiso que se vio reflejado, precisamente, en los Premios RSCapital organizados el pasado junio por Navarra Capital, donde la firma obtuvo el galardón en la categoría RSC Corporativa.
Asimismo, Ríos Renovables fue una de las primeras empresas en sumarse al proyecto ‘1 hectárea de vida’, impulsado por este medio y Laboral Kutxa: “Tenemos unos valores muy claros, y que te reconozcan el trabajo motiva mucho para seguir en esta misma línea. Amamos nuestra tierra”.