Durante el próximo Consejo de Administración de la Sociedad Pública dependiente de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona (SCPSA), se someterá a votación y se aprobará “presumiblemente” la suspensión temporal del contrato entre SCPSA y la empresa contratista a partir del 1 de junio. El motivo de esta suspensión, según informó la MCP, deriva de las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) del pasado mes de diciembre, que anularon la modificación del plan sectorial de la Ciudad del Transporte de Nasuvinsa.
Tras “acatar” lo establecido en dichas sentencias, tanto Nasuvinsa como la entidad local “reiniciaron los trámites necesarios para la aprobación de esta modificación” del plan sectorial de la Ciudad del Transporte, así como del proyecto sectorial del propio centro ambiental, “previendo que puedan estar concluidos a finales del presente año”. En ese sentido, en la misma propuesta de acuerdo se estableció que “el levantamiento de la suspensión temporal se producirá en la fecha en la que el Gobierno de Navarra apruebe estos dos instrumentos urbanísticos, de forma que puedan iniciarse las obras tras los trámites oportunos”.
Según la MCP, el retraso en el inicio de las obras “es una posibilidad” prevista en el contrato. “En todo momento se ha velado profundamente por la salvaguarda de los caudales públicos, pudiendo incluso recuperarse el dinero invertido en la compra de la parcela si por cualquier motivo no pudiera efectuarse finalmente la obra. Cabe recordar que hasta la fecha se han desestimado todos los recursos interpuestos ante las diferentes gestiones efectuadas por la MCP en relación a la planta”, aseguraron desde la entidad.
Desde la MCP aseguraron que “el contrato permite recuperar el dinero invertido en la compra de la parcela si finalmente no se realizara la obra”.
La construcción y puesta en servicio del nuevo Centro Ambiental de la Comarca de Pamplona es una infraestructura “imprescindible” para el tratamiento de los residuos urbanos generados en la propia mancomunidad. Se trata, además, de una infraestructura de “obligada implantación según la legislación europea, nacional y foral en materia de residuos”.
Así, la demora de su puesta en servicio conlleva “un nuevo retraso en el cumplimiento de las obligaciones legales en materia de tratamiento de residuos”. La MCP añadió que, tras conocerse los fallos judiciales, se decidió “continuar con todo el proyecto una vez se solventasen adecuadamente los defectos de procedimiento señalados en dichas sentencias respecto del proyecto sectorial de la Ciudad del Transporte”.
UN RETRASO DE SEIS MESES
Navarra Suma anunció en el Consejo de Administración de SCPSA del pasado 29 de marzo que iba a solicitar la suspensión del proyecto, que realizó al día siguiente. Y, en el mismo sentido, la coalición se dirigió al Consejo de Navarra recientemente para que dictaminara si la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona puede continuar con el proyecto de construcción del nuevo centro.
“Si finalmente las obras del centro de tratamiento no se llevasen a cabo, ello no generaría coste para la entidad mancomunada. No obstante, es evidente el daño medioambiental causado por cualquier retraso en la puesta en marcha por fin de un tratamiento efectivo de los residuos urbanos”, valoraron desde la MCP.
La entidad remitió a todos los miembros del consejo sendos informes jurídicos y técnicos, además de la propuesta de acuerdo de suspensión del contrato con la empresa contratista de la obra, la UTE FCC. Esta suspensión de carácter temporal “es un acto obligado de acuerdo a los contratos del centro que no implica, en ningún caso, la anulación ni rescisión de dichos contratos”. Se estima que las obras podrán comenzarse en la primavera de 2023, “acumulando así un retraso real aproximado de seis meses sobre lo inicialmente previsto”.