La jornada ‘Crecimiento y arraigo, pilares del desarrollo de nuestro tejido empresarial’, organizada por la Fundación Artizarra y su gestora de capital privado Stellum Capital este viernes en Baluarte, dejó importantes reflexiones en materia de arraigo y crecimiento empresarial, así como un anuncio de calado por parte de la chief Legal and Strategy officer de Amixalan, Amaia Goñi.
Después de que el presidente de la fundación, Jon Ander de las Fuentes, confirmara que Stellum Capital ya ha superado los 25 millones de euros invertidos en siete empresas navarras, el encuentro, que contó con la colaboración de Caja Rural de Navarra, Sodena y la Asociación para el Desarrollo de la Empresa Familiar Navarra (ADEFAN), continuó con la celebración de dos mesas de debate en torno al concepto del arraigo.
Joseba Martikorena: «Nuestro principal reto es atraer talento desde zonas urbanas hasta nuestro entorno, y nuestra solución es optar por gente joven, mentorizarla y que crezca con nosotros»
La primera comenzó con la intervención de Joseba Martikorena, vocal de ADEFAN. Tras detallar brevemente la trayectoria seguida por su firma, Martiko, explicó que, en empresas como la suya, la elección del talento joven, su formación y fidelización es la clave que facilita la vinculación y arraigo con el territorio: «El principal reto en nuestro caso es atraer al talento desde zonas urbanas hasta nuestro entorno, y nuestra solución es optar por gente joven, mentorizarla y que crezca con nosotros».
Por eso, en su opinión, la principal aportación que puede realizar ADEFAN es apostar por los jóvenes y poner en valor ante ellos a la empresa familiar y al empresario con proyectos como ‘La empresa familiar en las aulas’ o la Cátedra de Empresa Familiar. «Tratamos de explicar la importancia que tiene hacer cosas en el entorno y lo crítico que es mantener el poder de decisión en Navarra», argumentó.
Andoni Cortajarena: «El arraigo empresarial ha tenido un notable reflejo en el bienestar social de Euskadi o Navarra, pero no creo que sea algo perpetuo. Ya hemos visto los riesgos»
Por su parte, el patrono de Fundación Artizarra y secretario del Consejo de Administración de Viscofan, Andoni Cortajarena, valoró el trabajo que se está realizando en este ámbito dentro de la Comunidad foral, pero previno de las crecientes amenazas que harán difícil evitar nuevas deslocalizaciones. “El arraigo empresarial ha tenido un notable reflejo en el bienestar social que podemos tener hoy en Euskadi o Navarra, pero no creo que sea algo perpetuo. Ya hemos visto los riesgos”, señaló.
Desde su punto de vista, hay tendencias en auge que lo dificultan como la globalización, el aumento de operaciones de concentración empresarial en la industria, los conflictos de sucesión o la creciente complejidad del entorno regulatorio. Mitigar esos riesgos depende, según él, de fomentar la educación y formación y proteger las estructuras de capital. Ese fue precisamente el objetivo del proyecto de Fundación Artizarra: impulsar que inversores locales puedan apostar por empresas con potencial de crecimiento. “Si el capital es de aquí, es más fácil que el centro de decisión se mantenga también aquí”, sostuvo.
Mª Eugenia Lecumberri: «El apoyo de Sodena se concreta tanto en inversión directa como fondeando en vehículos de inversión»
Ante el escenario descrito por sus compañeros de mesa, María Eugenia Lecumberri, directora de Inversiones de Sodena, detalló algunas de las líneas de trabajo impulsadas por la sociedad pública. “En Sodena tenemos una visión de arraigo bastante amplia”, introdujo para explicar a continuación que esa visión se concreta tanto en el acompañamiento y asesoría a empresas de fuera para que se implanten en Navarra, como en el área de apoyo financiero para impulsar las etapas iniciales de nuevas firmas.
“Este apoyo se concreta tanto en inversión directa como fondeando en vehículos de inversión, tanto verticales como generalistas”, afirmó tras agradecer la apuesta de Stellum Capital por Navarra y elogiar las oportunidades de la colaboración público-privada.
CRECIMIENTO E IMPACTO
El segundo de los debates giró en torno a los instrumentos de crecimiento e impacto que el tejido productivo foral tiene a su alcance. Aquí, la chief Legal and Strategy officer de Amixalan, Amaia Goñi, desgranó el proceso de creación de su compañía tras la venta a Array Technologies de STI Norland, firma navarra que se había convertido en la cuarta empresa mundial en fabricación de seguidores solares.
Amixalan ya da empleo a 170 personas, veintitrés de las cuales trabajan en el área corporativa
Tras los fondos obtenidos con la operación, el nuevo grupo empresarial, creado por el antiguo propietario de STI Norland (Xabier Blanco) y que centra su actividad en la adquisición y creación de empresas, ya está presente en los seis sectores estratégicos definidos en su estrategia: real estate, construcción modular industrializada, salud, tecnología, transición energética y agroalimentación. “Tenemos el objetivo de invertir 160 millones de fondos propios para 2025 en los seis sectores descritos”, avanzó.
Goñi compartió con los más de 200 asistentes cómo fue el origen de Amixalan. “En 2011, STI Norland inició una estrategia de internacionalización y en 2016, cuando tenía cierta seguridad, comenzó su estrategia de alto rendimiento”, rememoró. El resultado fue abrumador. La compañía pasó de los 30 millones de facturación en 2016 a 220 millones de euros en 2022, convirtiéndose así en un referente mundial dentro de su campo. Con estas cifras, no tardó en llegar la oportunidad de venderla a Array Technologies, la segunda mayor firma global del ramo por unos 570 millones de euros. “Tras la venta pensamos: ‘¿Qué hacemos? ¿Lo dejamos o seguimos?’ Y, finalmente, optamos por seguir construyendo de cero un proyecto en el que pudiéramos aportar nuestro saber hacer”, relató.
La directiva enumeró cuáles son los aspectos diferenciales de la firma: “Somos un grupo empresarial navarro; con arraigo en el territorio; que conocemos en profundidad el sector público foral, nacional y europeo, así como el sector empresarial e industrial. También somos multisectoriales».
Pablo Baroja: «El crecimiento no es una opción, sino una necesidad, con la dificultad añadida de que debe producirse muy rápido. De lo contrario, se pone en riesgo la sostenibilidad de la compañía»
En su primer año de actividad, Amixalan ya está presente en ocho empresas (tres por adquisición y cinco por creación propia). Precisamente, el sector al que está dedicando mayores recursos es la construcción modular industrializada, donde busca comprar empresas de toda la cadena de valor. De hecho, ya tiene una participación mayoritaria de EGA perfil y el 49 % de EPER. En la actualidad, además, el grupo da empleo a 170 personas, veintitrés de las cuales trabajan en el área corporativa. “Queremos tener poder de decisión, pero también lograr equilibrios manteniendo a los gestores de la empresa o a los propietarios originales en las estructuras. Sin equilibrio no hay avance y, sin avance, no hay crecimiento”, subrayó convencida.
Como complemento a las ideas enunciadas por Goñi, Pablo Baroja, managing partner de Stellum Capital, enfatizó la importancia del crecimiento para asegurar el arraigo de las empresas. “Dedicar recursos a la innovación, retener y atraer el talento, internacionalizarse… son factores críticos para la competitividad y muchas veces imposibles si la empresa es pequeña”, enfatizó. Para él, hoy en día es más crucial que nunca asegurar ese crecimiento al ritmo que demanda el mercado. “El crecimiento no es una opción, sino una necesidad, con la dificultad añadida de que debe producirse muy rápido porque, de lo contrario, se pone en riesgo la sostenibilidad de la compañía”, remarcó.
Juan Mari Ayechu: «A veces, proyectamos que el crecimiento es un proceso complejo y no tiene por qué ser así»
Finalmente, el director de Empresas de Caja Rural de Navarra, Juan Mari Ayechu, hizo hincapié en la necesidad de «naturalizar» la figura del inversor como «un agente imprescindible», que evite la sensación de soledad que suele acompañar al empresario en su proceso de toma de decisiones: “Hay que quitar hierro a todo esto porque, a veces, proyectamos que el crecimiento empresarial es un proceso complejo y no tiene por qué ser así”.
A este respecto, la adecuada formación y la presencia de entidades, administraciones y fondos de inversión, “muy preparados y especializados” para realizar la labor de facilitadores, simplifica en gran medida este proceso. El directivo acabó su intervención dirigiéndose directamente a los responsables de las compañías. “Hago un llamamiento a los empresarios para que abran su mente, que no sean solitarios, que se dejen ayudar, que se rodeen de colaboradores, de expertos. No estamos solo para aportar fondos, sino para asesorar y acompañar en todo el proceso”, zanjó.
