Arco Construcciones Modulares, con sede en Huarte, instaló recientemente las taquillas del Estadio Olímpico de Montjuic (Barcelona). En concreto, se trata de “cinco conjuntos modulares que poseen portones abatibles” para dar seguridad a la construcción y resguardo a las personas, así como permitir la interacción entre el exterior y el interior mediante interfonos.
Fundada hace más de veinte años, Arco realiza desde el diseño y proyección inicial de cada construcción modular hasta la fabricación y adaptación de los módulos. Al mismo tiempo, se encarga de la elaboración y ejecución del plan de montaje, así como del transporte y ensamblaje de los módulos en las propias instalaciones del cliente o en el lugar definitivo de implantación. En este sentido, trabaja para todo tipo de sectores construyendo colegios, viviendas, edificaciones industriales, vestuarios, oficinas, centros de salud, módulos para residuos peligrosos o modificaciones de contenedores marítimos, entre otros.
Sin embargo, no es la primera empresa navarra que trabaja en el ámbito deportivo de la capital catalana. En los últimos meses, Servicios Ecológicos Navarra ha creado una nueva sociedad en Barcelona, coincidiendo con su colaboración en la gestión de los residuos generados durante la demolición del Camp Nou. Un proyecto adjudicado a la compañía Erri Berri, situada en Olite.
