Los consejeros Manu Ayerdi y Elma Saiz propusieron este martes la supresión del Impuesto sobre Actividades Económicas, (IAE), una medida que se haría extensiva a más de 31.000 autónomos y 7.000 pymes de la región. En un comunicado, la Unión de Trabajadores y Profesionales Autónomos de Navarra (UPTA) recibió la noticia con especial alegría, ya que se trata de una «reivindicación histórica» desde que, en 2003, se aprobó una normativa a nivel nacional que eximía del pago de dicho impuesto a todas aquellas personas trabajadoras autónomas cuya facturación fuese inferior al millón de euros.
La medida, en caso de materializarse, supondría un ahorro de entre 400 y 800 euros de media anuales para cada profesional. «Por fin nos han escuchado. Nos sentimos plenamente satisfechos con esta medida”, destacó Natalia Moriones, presidenta de UPTA Navarra. Así mismo, Eduardo Abad, presidente de UPTA a nivel nacional, subrayó que el colectivo llevaba «más de quince años luchando por la desaparición de uno de los impuestos más injustos».
«Este gravamen no tiene ningún sentido, ya que la manera de fomentar las actividades económicas es ayudando a los trabajadores autónomos a mejorar, a crecer, a fortalecerse y no haciendo que paguen más dinero por el hecho de poner su negocio en marcha», remató.
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