Grupo Apex, especializado en el sector de los snacks salados, alcanzó un «nuevo récord» de facturación en el ejercicio 2022-2023, que le permitió acelerar su crecimiento un 35 % y superar los 135 millones de euros en ingresos.
En estos momentos, la empresa navarra, cuyos accionistas materializaron una ampliación de capital de 7,5 millones de euros el pasado mes de abril, cuenta con un total de nueve centros de trabajo en España y un equipo de más de 550 personas.
«En un año que ha vuelto a ser retador por la coyuntura global y la inestabilidad y carestía de los precios de materias primas y energías, la empresa navarra ha continuado su estrategia de crecer exponencialmente, doblando tamaño cada cuatro años, ganando presencia en mercados y canales de venta, incrementando su portafolio de productos, invirtiendo en su capacidad productiva y aumentando su talentoso y comprometido equipo», señaló la firma este martes.
El grupo, integrado por más de una docena de marcas como Jumpers, Marinas, Aspitos, las patatas Vicente Vidal o las Popitas, combina desde hace años el crecimiento orgánico con la adquisición de empresas y negocios que refuercen su posición.
Así lo hizo en el último ejercicio, por ejemplo, con el fabricante de chips vegetales Viube Foods o la firma Pop Up. Ya en junio, compró Patatas Fritas Santo Reino, con fábrica en Jaén. Y, además, en los últimos años ha invertido más de 4 millones de euros en la ampliación de su sede de Ribaforada.